Sentir frío… no un frío externo, un frío que nace de tu
corazón y recorre todo tu cuerpo, que congela la sangre que corre en tus venas
y vuelve de hielo tus huesos… un frío que se queda en tu garganta y te quita el
habla… eso es lo que sucede cuando el invierno se instala en tu alma.
Liliana Celeste Flores Vega
Mayo 2016
Imagen: GoogleMayo 2016
2 comentarios:
El invierno se quedó en mi corazón.
Somos almas con corazones de invierno.
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