tag:blogger.com,1999:blog-89480729292115214422024-03-12T14:15:27.350-05:00Memorias de una Dama BlancaPoemas simbolistas y relatos de terror, ciencia ficción, fantasía épica, romanticismo oscuro y erotismo. Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.comBlogger305125tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-89787476785400187192023-05-21T19:42:00.006-05:002024-03-11T20:04:06.787-05:00El faro en el cabo del norte<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Bookman Old Style",serif; font-size: 10pt; mso-ansi-language: ES-PE;"></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjo6FoVVQr1JyDZD0CUUUwawM4n_t6jC6ouO6xUdDQ0xhV_Tr8ao5gkqjH94_-bOsIWS5WiDPozCUnL61XtetnyAdD1oa4NW-6dQU9OZtaeyo_KII5wVzQdQH-IcmriV8LCr20Vai7g3CEdHu2Tg8PdvT4tDCswPE1o0bG5gUZ1d1ZQAsFy5WG56PEnkwk/s765/03%20faro.jpg" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="765" data-original-width="499" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjo6FoVVQr1JyDZD0CUUUwawM4n_t6jC6ouO6xUdDQ0xhV_Tr8ao5gkqjH94_-bOsIWS5WiDPozCUnL61XtetnyAdD1oa4NW-6dQU9OZtaeyo_KII5wVzQdQH-IcmriV8LCr20Vai7g3CEdHu2Tg8PdvT4tDCswPE1o0bG5gUZ1d1ZQAsFy5WG56PEnkwk/w261-h400/03%20faro.jpg" width="261" /></a></div><p style="text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Pedro era un hombre solitario y endurecido por los sufrimientos.
Desconocía sus orígenes pues siendo un recién nacido fue abandonado en un
orfanato, a los diez años se escapó, llegó al puerto y rogó para que lo
aceptaran como grumete en un barco pesquero. El sol del trópico y la dura vida
en altamar habían curtido su rostro y su alma, a sus cincuenta años aparentaba
llevar una década más a cuestas y en sus ojos grises había un perpetuo velo de
tristeza.</span></p><span style="font-family: georgia; font-size: medium;"><o:p></o:p></span><p style="text-align: left;"></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">En su último viaje sufrió un accidente. Mientras aseguraba la carga en
la bodega unos toneles rodaron, le cayeron encima y le fracturaron la pierna
derecha. A consecuencia de eso cojeaba y se sentía demasiado achacoso para
seguir trabajando en un barco, pero no podía alejarse del mar. Entonces decidió
responder un aviso que llevaba varios meses en el pizarrón de la taberna en el
que se solicitaba un guardián para un faro ubicado en un remoto cabo que se
adentraba en el Mar del Norte.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Cuando desembarcó en el puerto norteño se llevó una agradable sorpresa
al encontrarse con un pintoresco pueblo y se extrañó de que el puesto de
guardián del faro, que imaginaba en un lugar austero y miserable, no hubiera
sido tomado antes. Se dirigió al faro que se ubicaba sobre un promontorio, le
llamó la atención una formación de piedra que se alzaba sobre el acantilado
bajo el que se estrellaban las olas con un murmullo casi musical… de lejos
parecía la figura de una mujer que miraba hacia el mar y a sus pies había
flores secas, caracoles y vasijas de arcilla. Pensó que sería alguna clase de
culto pagano dedicado a una diosa marina pero no le causó inquietud, durante su
vida había visto las más estrambóticas supersticiones, las ofrendas a aquella
figura producto de la erosión era algo inocente.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium; mso-ansi-language: ES-PE;">Pedro subió la escalinata que llevaba a la base del faro y tocó la
desvencijada puerta de madera, después de un rato fue atendido por un anciano
decrépito.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">— Soy Pedro y vengo por el trabajo — dijo.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium; mso-ansi-language: ES-PE;">— Gracias a los Dioses — murmuró el anciano — ya no puedo con esta
carga.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium; mso-ansi-language: ES-PE;">— Es un bonito faro con una vista hermosa — dijo Pedro — me extraña que
el puesto haya estado vacante tanto tiempo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium; mso-ansi-language: ES-PE;">— ¿No conoces la leyenda que se cuenta de este lugar? — preguntó el
anciano, Pedro negó con la cabeza — dicen que algo maligno habita en estas
aguas, el faro debe de encenderse todas las noches sin falta pues sin su luz un
terror indescriptible destruirá el pueblo… pero es solo un cuento, en todo este
tiempo nunca he visto nada sobrenatural… aunque tampoco he faltado ni una sola
noche a mi deber.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Durante dos semanas el anciano instruyó a Pedro en la labor que debería
de realizar. Los viernes entregaban las provisiones, la leña y el combustible.
No tendría que preocuparse por nada más que encender el faro todas las noches.
Después el anciano se despidió de Pedro y se marchó para pasar sus últimos días
en un asilo.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Y así pasaron los meses hasta que se cumplió un año. Durante las
primeras semanas algunos días Pedro bajaba hasta el pueblo para almorzar, pero
notó que las personas lo miraban con desagrado y hasta con miedo, entendió que
ser el guardián del faro equivalía a ser un apestado. Decidió no bajar al
pueblo a menos que fuera por algo muy necesario y aprendió a convivir con la
soledad.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Una noche se desató una terrible tormenta, Pedro se mantuvo pendiente
del faro pues sabía que en esas condiciones muchas vidas dependían de que la
luz no se apagara. Y fue al amanecer, cuando la tormenta amainaba, que escuchó
aquella voz por primera vez… parecía un cántico dulce y triste a la vez…
¿Sirenas?... No, él no creía en esos cuentos.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Dos días después escuchó el mismo cántico, esta vez al atardecer,
mientras contemplaba el horizonte fumando su pipa. Eso se repitió varias veces
y pensó que tal vez estaba enloqueciendo por la soledad y el aislamiento.
Entonces decidió bajar al pueblo para visitar al anciano a quien no veía desde hace
más de cuatro meses, pero cuando llegó al asilo le dijeron que el anciano había
fallecido, aunque le había dejado una carta.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Pedro regresó al faro y leyó la carta. En ella el anciano le decía que
en uno de los cajones de la cómoda había un cofre y en este una llave que abría
la puerta de una trampilla que conducía a un recinto subterráneo. Pedro tomó la
llave, abrió la trampilla y encontró una escalera de piedra que según sus
cálculos atravesaba el promontorio sobre el que se alzaba el faro. Mientras más
bajaba más sentía la humedad hasta que llegó al mencionado recinto. Parecía una
cueva natural adaptada como bodega para vinos y luego remodelada como un
estudio. Encontró varios toneles, una repisa con libros y una mesa con una
silla destartalada.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Colgó su lamparín de un gancho y empezó a revisar los libros enmohecidos
en busca de alguno en buen estado. Encontró un grueso volumen cuya cubierta de
cuero tenía una ligera pátina verdosa y lo llevó a la mesa para leerlo. Era una
especie de diario fechado en sus inicios hace tres siglos y continuado por los
sucesivos guardianes del faro. Leyó sobre unas gentes que antaño habían habitado
en el lugar y realizaban ciertos rituales que mantenían dormido al terror sin
nombre, de una hechicera llamada Leuxia que había sido elegida por las
estrellas para enfrentar a ese terror indescriptible, pero había desaparecido…
también leyó que una vez el terror llegó con la oscuridad y el frío, entonces
apareció una anciana misteriosa quien lo enfrentó, pero quedó convertida en
piedra.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Contaban también sobre unas repugnantes criaturas de aspecto anfibio que
eran heraldos del terror sin nombre y del horrendo cántico que entonaban… pero
solo era una recopilación de leyendas, ninguno de los guardianes del faro
aseguraba haber sido testigo de esos hechos, al contrario, habían anotado que
durante todos los años que sirvieron en el faro nunca habían presenciado ningún
hecho sobrenatural y el mayor miedo que habían experimentado era el de perder
la razón a causa de la soledad pues las personas del pueblo evitaban todo
contacto con ellos como si estuvieran tocados por una maldición.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Pedro cerró el libro, le había parecido escuchar aquella voz otra vez…
efectivamente el triste y dulce arrullo se escuchaba muy cerca, casi detrás de
una de las paredes... se acercó a esa dirección y tanteó el muro de ladrillo
cubierto con escayola que estaba humedecido, hizo presión y un pedazo del muro
cedió. Se asomó por el boquete abierto, vio la inaccesible playa que se veía
bajo el faro… y la silueta de una extraña criatura entre las olas.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Pedro subió la escalera y volvió con un pico, derrumbó el muro dejando
al descubierto la entrada original de la cueva que daba a la playa y salió del
recinto al momento que una ola entraba en el mismo y las aguas llegaban hasta
la mesa. Entonces escuchó otra vez el cántico… un escalofrío lo recorrió al
descubrir que aquel hermoso arrullo provenía de una horrenda criatura semejante
a un anfibio con rasgos repulsivamente humanos. La criatura le devolvió la
mirada, extendió sus brazos hacia él y volvió a entonar su hipnótico cántico…
Pedro dio un par de pasos hacia la criatura, pero reaccionó, se cubrió los
oídos y huyó espantado.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Colocó un pesado baúl sobre la trampilla, pero desde entonces y todos
los días al amanecer escuchaba el cántico de la criatura que al parecer se
había alojado en el recinto subterráneo ahora inundado por el mar y al
atardecer la veía nadando entre las olas.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Finalmente, la soledad hizo que Pedro se acostumbrara a la presencia de
la criatura que demostraba ser pacífica. Y una mañana abrió la trampilla y
descendió por la escalera de piedra. El agua llegaba a la altura de medio metro
del recinto, la mayoría de los libros se encontraban a salvo y la criatura
estaba recostada sobre la mesa. Entonces Pedro pudo observarla con
detenimiento, su apariencia era femenina, aunque carecía de pechos como las
sirenas de los cuentos, su piel era lustrosa y verdosa con motas negras
semejante a un bagre, su rostro se parecía al de una rana y su mirada era
perturbadoramente humana.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Después de ese primer encuentro vinieron muchos más. La criatura parecía
impaciente por comunicarse con Pedro, pero él no entendía sus gestos, entonces
ella trajo varias piedras pequeñas y las juntó formando unos símbolos sobre la
mesa, Pedro no tardó en reconocer que eran runas, sin duda la criatura quería
decirle algo. Para su fortuna en la repisa encontró un libro sobre el
significado de las runas y en un par de semanas pudo descifrar el mensaje que
la criatura quería darle:</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">«Siete días después del solsticio de invierno el terror sin nombre
regresará, deben de huir»</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Pedro no supo qué hacer y durante días no pudo conciliar el sueño, era
noviembre y el solsticio de invierno se acercaba ¿Cómo podía convencer a las
personas del pueblo que creyeran en una leyenda? Tal vez si capturaba a la
criatura y la llevaba al pueblo… pero después de haber entregado su mensaje la
criatura mantenía su distancia contemplándolo desde las olas al atardecer.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">El día del solsticio de invierno Pedro bajó al pueblo y gritó la
advertencia en medio de la plaza donde todas las personas estaban reunidas para
celebrar la fiesta, pero creyeron que había enloquecido. Lo insultaron, le
arrojaron piedras y lo hicieron volver a su faro.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Cuando el séptimo día llegó Pedro divisó una extraña niebla que
descendía del Norte y supo que con ella venía el terror sin nombre, encendió el
faro como una última esperanza, pero cuando la niebla rozó al acantilado la luz
del faro languideció y se extinguió, intentó volver a encender el faro varias
veces sin éxito… entonces los vio, aquellas formas indescriptibles que se
retorcían en la bruma… esos seres no eran de este mundo ni del mundo de las
pesadillas… provenían de un lugar peor, más oscuro y más frío.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;">Pedro se escondió en el recinto subterráneo agazapándose sobre un tonel
y cubriéndose con una manta temblando como un niño que ve sombras en su
habitación. Perdió la conciencia y la noción del tiempo hasta que una mano
húmeda y viscosa le acarició el rostro… despertó, vio a la criatura y entendió
que el terror sin nombre se había ido y era seguro salir. Entonces bajó al
pueblo con el corazón agitado temiendo encontrarse con una visión de pesadilla,
las calles cubiertas de cadáveres con un rictus de espanto en sus rostros
cetrinos o desmembrados sobre charcos de sangre... más no encontró nada, o
mejor dicho a nadie, todos los habitantes habían desaparecido sin dejar
rastros.</span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;"><br /></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium;"><b><span>Por Liliana Celeste </span><span>Flores</span><span> Vega</span></b></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium; mso-ansi-language: ES-PE;">Imagen: Pinterest</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: georgia; font-size: medium; mso-ansi-language: ES-PE;"> </span></p>Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-34192213161001703482022-08-05T03:31:00.004-05:002022-08-07T11:37:49.628-05:00Steampunk<span style="font-family: georgia;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi-xVT8VsbP-Gy9coZqHKXTSbdQ_wQOfK2KqxRsV7dzENtlkOdDJWWro66XhoV_7-2qkxBlF9KuUHRk_3JwpXewKc4_wHgI3N6Z15EexKh6gA1IqPuoVybNmYOzMeU5efrtf0h_LJ-XnOKi120DhXt7_vS1TUQ1hDTkuTq_EkVEHGur40U6UeBtuXxC/s259/steampunk.jpg" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="259" data-original-width="194" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi-xVT8VsbP-Gy9coZqHKXTSbdQ_wQOfK2KqxRsV7dzENtlkOdDJWWro66XhoV_7-2qkxBlF9KuUHRk_3JwpXewKc4_wHgI3N6Z15EexKh6gA1IqPuoVybNmYOzMeU5efrtf0h_LJ-XnOKi120DhXt7_vS1TUQ1hDTkuTq_EkVEHGur40U6UeBtuXxC/w300-h400/steampunk.jpg" width="300" /></a></div><div style="text-align: justify;">Relatos de temática steampunk.</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: georgia;"><br /></span></div><div style="text-align: justify;"><a href="https://lilinaceleste.blogspot.com/2019/05/la-promesa-cumplida.html" target="_blank"><span style="font-family: georgia;">La promesa cumplida</span></a></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: georgia;">Ficción steampunk, aventuras y romance. Ganadora del segundo lugar en el concurso de cuentos retrofuturistas organizado por la Comunidad Steampunk del Perú en el año 2016. Una intrépida aventurera hará todo lo posible para cumplir con la promesa que su madre fallecida le hizo a su mejor amiga, en el camino se verá en la encrucijada de traicionar al hombre que la ama para salvarle la vida o revelarle un secreto que lo convertiría en su cómplice, además de enfrentarse con un rufián que quiere arrebatarle una joya que es la clave para encontrar un tesoro.</span></div><div style="text-align: justify;"><br /></div>Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-10964363703094043482022-08-05T02:09:00.003-05:002022-08-05T05:26:22.727-05:00Sortilegios y Secretos<p style="text-align: justify;"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi6giDeb7BWSzVPYwxN-bGdbc7Na_4oG1VDP0fSIRcEaE91iuJDLa-vbfMH036QUxWykz4B_MBxZPcgjmccAfXpoI9bWKjE-5rt31P-8jlk98BIuveSo2ea7T-VaXvO0QM2For5L3oL9lp3C8hSY86D2fN-1KTfHcvDh4I5vN9MiROxiQuHTag7dIUY/s704/sortilegios.jpg" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="704" data-original-width="500" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi6giDeb7BWSzVPYwxN-bGdbc7Na_4oG1VDP0fSIRcEaE91iuJDLa-vbfMH036QUxWykz4B_MBxZPcgjmccAfXpoI9bWKjE-5rt31P-8jlk98BIuveSo2ea7T-VaXvO0QM2For5L3oL9lp3C8hSY86D2fN-1KTfHcvDh4I5vN9MiROxiQuHTag7dIUY/w284-h400/sortilegios.jpg" width="284" /></a></div><div style="text-align: justify;">En esta serie "Sortilegios y Secretos" encontrarán relatos en los que se mezclan terror, fantasía onírica, ciencia ficción y erotismo. Tienen en común que involucran a los protagonistas de mi relato de horror cósmico folk "La criatura de los humedales" (Ganador del primer lugar en el concurso de cuentos de terror de la Sociedad Histórica Peruana Lovecraft en el año 2014 y publicado en la antología de relatos de terror "Tenebra" de Torre de Papel Ediciones) y de mi novela "Los Dioses sin Nombre" (Todavía sin publicar). </div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Estos relatos profundizan la relación de los protagonistas desvelando secretos y esclarecen algunos hechos que son mencionados o a los que se hace referencia en el relato y la novela.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2017/12/recuerdos-de-arena.html" target="_blank">Recuerdos de arena</a></div><div style="text-align: justify;">Un ritual ancestral llevará a nuestros protagonistas a un viaje onírico en el que recordarán una vida pasada dando algunas luces al vínculo mágico que los une.</div><p style="text-align: justify;"><br /></p><p style="text-align: justify;"><br /></p>Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-86759424561696385402021-11-18T03:47:00.011-05:002021-11-18T03:48:53.279-05:00La dama del lago<div style="mso-layout-grid-align: none; mso-pagination: none; text-align: justify; text-autospace: none;"><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;">Hace centurias ella duerme<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;">en un lecho de algas...<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;">hace centurias que nadie la busca,<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;">nadie la invoca.<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><o:p> <br /></o:p></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;">Ella duerme<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;">envuelta en espuma, cubierta de perlas<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;">como un ídolo olvidado<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;">que yace en la oscuridad,<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;">como una madre buena<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;">a quien sus hijos han olvidado.<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><o:p> <br /></o:p></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;">Hace centurias ella duerme<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;">en las profundidades de su lago de aguas
serenas...<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;">ella duerme,<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;">¿qué soñará?</span></div><div style="mso-layout-grid-align: none; mso-pagination: none; text-align: justify; text-autospace: none;"><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><br /></span></div><div style="mso-layout-grid-align: none; mso-pagination: none; text-align: justify; text-autospace: none;"><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif; mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><b>Liliana Celeste Flores Vega - 1992 </b></span></div>
Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-82185542065251156622021-10-20T21:50:00.003-05:002021-10-20T21:50:57.569-05:00Llovizna<div style="mso-layout-grid-align: none; mso-pagination: none; text-align: justify; text-autospace: none;"><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">Llovizna... cristales
empañados<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">por el vaho de las hadas...<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">una vela de danzarina flama
ilumina la alcoba<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">tú y yo abrazados en el
lecho<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">al abrigo de nuestros
cuerpos desnudos...<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">noche cerrada sin luna...
nubes negras<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">coronando la montaña vieja.<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;"> <br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">Calidez... tu piel y mi piel<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">rozándose bajo las
sábanas...<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">tibias caricias y besos
tiernos<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">el búho somnoliento cierra
los ojos<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">cuando complaciente a ti me
entrego...<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">llantos de arcángeles... las
oraciones paganas<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">de la raza antigua
arrullando al bosque.</span></div><div style="mso-layout-grid-align: none; mso-pagination: none; text-align: justify; text-autospace: none;"><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;"><br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">Llovizna... el goce fue
intenso<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">y abrazados dormitamos...<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">en las profundidades de la
foresta<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">los hijos de la lluvia y del
viento<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">danzan alrededor del árbol
milenario...<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">la vela se consume... en las
lejanías<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;">las vibraciones musicales de
una gaita.</span></div><div style="mso-layout-grid-align: none; mso-pagination: none; text-align: justify; text-autospace: none;"><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;"><b><br /></b></span></div><div style="mso-layout-grid-align: none; mso-pagination: none; text-align: justify; text-autospace: none;"><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style", serif;"><b>Liliana Celeste Flores Vega - 1992 </b></span></div><p>
</p>
Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-30672173796096629952021-10-02T16:59:00.001-05:002021-10-03T17:04:00.490-05:00Dinámica LITERART 02 Escritor<div style="text-align: left;"><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdhguYyq4G9_sbwZVq0nn4YBn4V3TbM_OJmJPoJKKuJzJ6JpeDbiL9vsUnRO3u2Pc5xNgjRkPZekByaMSAHcWAZx-eYqZej-dZ8E5D6O5ud1LcSZk_4ylAr-XRMcQufZD1dD3Liat-ZpU/s2015/239881857_6123224044418137_4318378040239337127_n.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="2015" data-original-width="1432" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdhguYyq4G9_sbwZVq0nn4YBn4V3TbM_OJmJPoJKKuJzJ6JpeDbiL9vsUnRO3u2Pc5xNgjRkPZekByaMSAHcWAZx-eYqZej-dZ8E5D6O5ud1LcSZk_4ylAr-XRMcQufZD1dD3Liat-ZpU/w284-h400/239881857_6123224044418137_4318378040239337127_n.jpg" width="284" /></a></div>LITERARTOBER DÍA 2</div><div style="text-align: justify;">Concepto: Escritor</div><div style="text-align: justify;">#LITERARTOBEREscritor</div> <div style="text-align: justify;">#Lileth</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Don Jacinto era un anciano de raras costumbres. Pasaba las
tardes sentado en una banca del parque disfrutando del aroma de las rosas
mientras que su fiel perro jugaba con las palomas. Pero luego, cuando caía la
noche, regresaba a paso lento a su vieja casona.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Entonces, en la oscuridad apenas quebrada por la débil luz
de los faroles de luz amarillenta que se colaba por las hendiduras de las
tablas de madera con las que había intentado tapiar la ventana de su
biblioteca, se sentaba frente a su escritorio repleto de papeles amarillentos.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">No podía evitarlo, una malsana compulsión lo obligaba a
garrapatear extraños símbolos arcanos y escribir ominosas palabras de un
lenguaje desconocido que aquellas indescriptibles criaturas surgidas del abismo
le susurraban.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">No había bastado con arrancarse los ojos para dejar de
verlas... Ellas seguían allí, acosándolo, atormentándolo, obligándolo a
escribir noche tras noche hasta el alba.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">¡Ya no lo soportaba! Tomó su pluma y se perforó los
tímpanos. Un horrible dolor que fue recompensado con el silencio... ¡Al fin
había encontrado la paz!</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Cruzó los brazos sobre el escritorio y reposó la cabeza
sobre ellos. Se quedó dormido... ¡Oh no, las criaturas encontraron la manera de
entrar en sus sueños!</div> <o:p><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><br /></div></o:p><div style="text-align: justify;"><b>Relato inspirado en el dibujo hecho por mi talentosa hija
Ingrid Flores</b></div><div style="text-align: justify;">Yngri https://www.instagram.com/the.blind.sheep</div></div><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p>
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<p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p>Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-32497926506121712522021-10-01T19:04:00.001-05:002021-10-01T19:04:40.035-05:00Dinámica LITERART 01 Cuervo<div style="text-align: left;"><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjkDrKpjvtg2tk9-2nc3wg8Sg6NYALIVvrj3OcKkCbzWX0L-2rLup1zR7S57gd2mDKDl15HSIWeqNDhyphenhyphen4r_5BAOSMnOTwS9QpuZs8COqeGUv91AMnAMjrlIcayzEfns4ZDnKH2sf_Evwho/s600/01+cuervo.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="600" data-original-width="505" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjkDrKpjvtg2tk9-2nc3wg8Sg6NYALIVvrj3OcKkCbzWX0L-2rLup1zR7S57gd2mDKDl15HSIWeqNDhyphenhyphen4r_5BAOSMnOTwS9QpuZs8COqeGUv91AMnAMjrlIcayzEfns4ZDnKH2sf_Evwho/w269-h320/01+cuervo.jpg" width="269" /></a></div>LITERARTOBER DÍA 1</div><div style="text-align: justify;">Concepto: Cuervo</div><div style="text-align: justify;">#LITERARTOBERCuervo</div><div style="text-align: justify;">#Lileth</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Se despertó, esperaba que todo fuera una pesadilla, pero
allí estaba atado con gruesas sogas en una cruz de madera en medio del campo de
trigo. El sol quemaba sobre su cabeza cubierta con un sombrero viejo y sacudió
la cabeza para apartar de su rostro los mechones de su cabello rubio pajizo.
Intentó liberarse de sus ataduras, pero sus brazos no tenían fuerzas, sus
esfuerzos fueron inútiles.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Quiso gritar pero su lengua parecía de trapo y ni un solo
sonido salió de su garganta. Estuvo toda la tarde rezando para que alguien
pasara, lo viera y lo ayudara. Cuando el sol se ocultó escuchó el horrible
graznido y vio a aquél siniestro cuervo acercándose.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">El cuervo se acercó a él y empezó a herirlo con feroces
picotazos, tenía la precisión de un torturador, le causaba dolorosas heridas
pero ninguna lo suficientemente grave para aferrarse a la esperanza de la
muerte. Cerró los ojos soportando su suplicio.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¿Por qué me haces esto? — pensó, incapaz de articular
palabras, pero para su sorpresa el cuervo pudo leer sus pensamientos.</div><div style="text-align: justify;">— Es tu castigo por haber destruido el santuario de nuestra
Diosa — le respondió el cuervo.</div><div style="text-align: justify;">— Yo solo talé unos árboles — refutó mentalmente.</div> <div style="text-align: justify;">— Exactamente — dijo el cuervo y siguió picoteándole el
pecho con saña.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">El hombre, convertido en espantapájaros por la magia de
Morrigan, bajó la cabeza resignado a su fatal destino.</div></div><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p>
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<p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p>Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-10592173320916867822021-08-30T21:52:00.002-05:002021-08-30T21:52:32.658-05:00El show del paralelo<div style="text-align: left;"><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiwa1nMpV8yk8W9qyPsNMPf5AaEXLWfI1eD5GQd51g8-3Arp_8vxpudCqg9y3rCXBDSPpKXL2qDbHcHc4xA1XvdwK_haI0SRseDdkj6HXClMOmGliuFxpeaSIV46ezA2JMeAT5S54WtuSA/s1023/televintage.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="682" data-original-width="1023" height="266" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiwa1nMpV8yk8W9qyPsNMPf5AaEXLWfI1eD5GQd51g8-3Arp_8vxpudCqg9y3rCXBDSPpKXL2qDbHcHc4xA1XvdwK_haI0SRseDdkj6HXClMOmGliuFxpeaSIV46ezA2JMeAT5S54WtuSA/w400-h266/televintage.jpg" width="400" /></a></div>Fui a la villa
para encontrarme con Jeraseth, necesitaba hablar seriamente con él.</div><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><a name="_Hlk81240340"></a><div style="text-align: justify;"><a name="_Hlk81240340"></a><a name="_Hlk81240340"><span lang="ES">—</span></a><span lang="ES"> Tenemos que hablar —
le dije, de inmediato se puso a la defensiva — hace días que me sucede algo
extraño, experimento episodios de tristeza y alegría inexplicables, por
momentos me envuelve una sensación de calidez y bienestar, luego una profunda nostalgia,
un anhelo de algo que tuve y que he perdido. Me despierto con la sensación de
haber dormido contigo, hasta siento tu olor en mi piel y el sabor de tu boca en
mis labios… el viernes en la noche estaba sentada en mi sillón teniendo una
charla por zoom con unos amigos y sentía que me estabas abrazando, sentía tus
caricias y tus besos, tuve que apagar mi cámara un momento porque la sensación
era demasiado real.</span></div><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Si piensas que
te estoy haciendo un amarre te juro que no es así — me respondió nervioso.</div><o:p><div style="text-align: justify;">— Conozco bien la
sensación — le dije — sé que son los ecos de un paralelo que comparte un pasado
casi idéntico a este y se bifurca en un punto reciente, por eso puedo sentir
las resonancias de las emociones que experimenta mi otra yo. Provienen de un
paralelo en el que estamos juntos, viviendo felices con nuestros hijos… ¿fuiste
a ver a Tam y le pediste que hiciera eso?</div></o:p></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Bien, lo
confieso — me respondió — lo hice, fui a ver a Tam y le pedí que me diera un
paralelo en el que estuviéramos juntos y fuéramos felices… y me lo dio.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— ¿Qué has hecho,
Jeraseth? — le reclamé — sabes que no podemos alterar las líneas del tiempo.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Déjame
explicarte — me dijo — fui a ver a Tam con la esperanza que pudiera alterar
este paralelo retrocediendo el tiempo hasta el momento en el que te pedí que te
casaras conmigo y manipular la situación para que me aceptaras. Le pregunté si
podía darme un paralelo en el que estuviéramos juntos y fuéramos felices, me
respondió que sí y me entregó esto.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Jeraseth me
mostró un artefacto parecido a un televisor antiguo.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— ¿Y este aparato
puede retroceder el tiempo? — le pregunté intrigada.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— No — me respondió
y lo encendió, entonces apareció una imagen en la que estábamos Jeraseth y yo
conversando en una acogedora sala de estar — Tam no tiene ese poder, este
aparato solamente permite ver lo que está sucediendo en otro paralelo.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Déjame ver si
entiendo — le dije mirando la escena — somos tú y yo, pero no somos nosotros,
son otros nosotros de otro paralelo ¿verdad?... entonces lo que hizo Tam fue
sintonizar la frecuencia de un paralelo en el que estamos viviendo juntos.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Jeraseth asintió.
La escena cambió para mostrar una habitación en la que Danica estaba jugando
con Jaslin y Jerith quienes tenían aproximadamente cuatro años.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— En ese paralelo
los tuvimos como mellizos — le comenté.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Si — me
respondió — procreamos las dos gemas al mismo tiempo y ellos nacieron como
mellizos. El aparato permite retroceder las escenas como si fueran las de una
película y ver lo que ha pasado en ese paralelo, ¿te gustaría verlo?</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— No — le
respondí — pero supongo que tú ya lo viste, así que cuéntame que pasó.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Si, lo estuve
viendo durante estos días — me dijo — hay algunas diferencias en nuestras
vidas, pero casi todo sucede como sucedió en este paralelo. Tu relación con Luc
era más conflictiva, cuando Thew nos presentó estabas angustiada porque querías
terminar la relación que tenías con Luc, pero él no lo aceptaba y te tenía
amenazada, creo que eso influyó para que me vieras como alguien que podía
protegerte de él. Finalmente terminaste con Luc, él reaccionó de una manera muy
violenta, Thew te defendió y Luc le dio una brutal golpiza. Yo te acompañé de
regreso a tu país, luego empecé a visitarte, al principio estabas decepcionada
y no querías tener ninguna relación con nadie, pero después empezaste a aceptarme
como pretendiente. Llevábamos seis meses estando juntos, fuimos al castillo del
lago y te pedí que te casaras conmigo, no me diste un sí inmediato, pero
tampoco me rechazaste. Entonces renté un departamento para que tuviéramos un
lugar donde encontrarnos cuando fuera a verte.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Miré de reojo el
artefacto, en la pantalla estábamos Jeraseth y yo en una habitación, una
habitación que yo conocía, aunque en mi memoria no coincidía con ninguna de las
habitaciones de los hoteles en los que habíamos estado, ahora entendía de donde
tenía ese recuerdo.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Te encargaste
de acondicionar el departamento mientras que yo tuve que viajar para atender
unos asuntos de mi trabajo — prosiguió — cuando regresé me dijiste que estabas
embarazada, te volví a pedir que nos casáramos, pero me respondiste que todavía
no estabas preparada para dar ese paso y que primero querías que viviéramos
juntos un tiempo. Te mudaste al departamento con tu hija menor y yo procuraba
estar contigo todo el tiempo que mi trabajo me lo permitiera, teníamos
discusiones frecuentes por eso, tú querías que me quedara, pero mis contratos
no lo hacían posible. Luego el doctor nos dijo que estábamos esperando
mellizos, entonces aceptaste que comprara una casa porque necesitaríamos
espacio para los niños y para el personal que tendríamos que contratar. Te dije
que mínimo necesitaríamos una señora que se hiciera cargo de la cocina, otra de
la limpieza, una señorita que te ayudara con los niños y dos guardias de
seguridad, tú estabas fastidiada por la idea de tener tanta gente extraña en la
casa y me sacabas en cara que no renunciara a mi carrera para quedarme a tu
lado. Tuviste un parto complicado y estuviste tres semanas interna en la
clínica, mientras tanto yo me ocupé de comprar la casa y acondicionarla, cuando
te dieron de alta y te llevé a nuestro hogar no te gustaron la casa ni los
muebles. Tuvimos otra discusión, me acusaste que nunca te prestaba la atención
suficiente y que por eso ni conocía tus gustos, lo admití, te dije que terminaría
un contrato pendiente y te prometí que me quedaría un buen tiempo contigo y los
bebés, mientras tanto podías redecorar la casa a tu gusto.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Tenía recuerdos
de esa discusión. Recordaba la casa de dos pisos de diseño moderno, un jardín con
un simple cerco de flores blancas, un patio con piscina, la sala que parecía el
recibidor de un bufete de abogados, la cocina y las habitaciones minimalistas.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Jeraseth sirvió
dos copas de vino y nos sentamos frente al artefacto como si estuviéramos
viendo una serie en un televisor. Era curioso ver a los nosotros de otro
paralelo llevando una vida cotidiana. No nos veíamos iguales como un reflejo en
el espejo, pero eran apariencias que en algún momento habíamos tenido… él se
había dejado la barba un poco más crecida y yo tenía el cabello corto hasta los
hombros teñido de castaño oscuro y peinado con un estilo pinup parecido al que tenía
cuando nos conocimos en este paralelo.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Entonces viajé
y te dejé con el personal que había contratado — continuó — unos días después
me dijiste que Thew había llegado de visita pues quería conocer a los bebés y
se había ofrecido a ayudarte con la redecoración de la casa, me pareció bien
pues él tenía gustos parecidos a los tuyos y pensé que su compañía te haría
olvidar los disgustos pasados. Yo calculaba que estaría de regreso en un par de
semanas, pero las cosas se complicaron, me demoré dos meses y Thew se quedó
todo ese tiempo contigo. Cuando regresé y los vi juntos sentí celos, estaban
tan felices que sospeché que habías vuelto a enredarte con él, discutimos y le
prohibí volver a visitarte.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Por lo que me
cuentas no parece que seamos muy felices — le comenté.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Los primeros
años fueron conflictivos — me respondió — yo te dejaba mucho tiempo sola, tenías
a tus amigos del grupo medieval y del ambiente literario, ibas a los eventos y
reuniones que hacían, pero yo te exigía que fueras acompañada por un guardaespaldas,
eso te incomodaba e incomodaba a tus amigos. Dejaste de ir a los eventos y
decías que por mi culpa no podías tener una vida normal. Escribías, pero no
querías que yo pagara la publicación de tus libros con una editorial de
renombre, empezaste a usar un seudónimo para evitar que leyeran tus obras por
ser mi mujer, tu seudónimo era masculino: Lian Stark. Te visitaba tu amiga la
princesa mexica, a ella le decías que estabas bien pero no eras feliz, que me querías
y te dolía que yo prefiriera mi carrera que quedarme contigo, ella te decía que
no te quedaba otra que aguantarte por los niños porque tú sola no podías
hacerte cargo de ellos. Eso lo sé por lo que he visto en la pantalla, yo no me
daba cuenta de lo abandonada que te tenía, me dedicaba a trabajar mientras
pudiera hacerlo para asegurarnos un buen futuro y pensaba que eras feliz porque
no te faltaba nada a ti, ni a los niños ni a tu familia y cada vez que
regresaba me recibías contenta.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Me faltabas tú —
le expliqué — bueno, supongo que a pesar de todo estábamos mejor que en el
paralelo de la casa de Barranco en el que Thew se murió ahogado o en el del
castillo del lago Titicaca en el que la oscuridad cayó sobre el mundo. </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Después empezó la
pandemia — prosiguió — afortunadamente estaba en nuestra casa pasando las
vacaciones de verano cuando cerraron los aeropuertos. Entonces todo cambió, el
primer año de la cuarentena fue maravilloso para nosotros pues me di cuenta de
lo que me estaba perdiendo, las pequeñas grandes cosas de la vida como ver
crecer a nuestros hijos y pasar tiempo como pareja. Empezamos a tener una vida sencilla
como siempre quisiste, pasábamos las tardes jugando con los niños, adoptamos cuatro
gatos y dos perros, nos dedicamos a cuidar el jardín. Las noches eran nuestras,
veíamos series y películas, yo te preparaba cenas románticas y hacíamos el amor
como dos enamorados. Cuando levantaron las restricciones, tú tenías miedo que
retomara mi carrera y volviera a dejarte sola, pero yo me había acostumbrado a nuestra
vida en familia, entonces decidí retirarme para quedarme contigo, te volví a
pedir que te casaras conmigo y aceptaste. Nuestra boda fue sencilla, en casa,
sin periodistas y solo con nuestros amigos cercanos. Fue el sábado, aniversario
del día que nos conocimos.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Confirmé que de alguna
manera me llegaban las resonancias de las sensaciones y emociones que mis otras
yo experimentaban en sus respectivos paralelos… cómo la sensación que
experimenté el viernes mientras estaba en la charla por zoom con mis amigos, la
alegría con la que me desperté el sábado y mis ganas de celebrar algo, aunque
no supiera que fuera. En ese momento en la pantalla se vio un acercamiento de
la mano de mi otra yo y llevaba un anillo de oro con un rubí cuadrado rodeado
de pequeños diamantes, muy parecido a uno que días atrás vi en la página de una
joyería y me había gustado mucho. También entendí el motivo de la sensación de
felicidad y satisfacción con la que me desperté el domingo y la profunda
nostalgia de haber tenido algo y haberlo perdido que me embargó luego… una
nostalgia que durante el día fue creciendo hasta que al llegar la noche se
rebalsó en lágrimas, la añoranza por algo que nunca he vivido ni tenido en este
paralelo.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Cuéntame más cosas
de ese paralelo — le pedí.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Tu hija mayor
vive con tu madre, le pedimos varias veces que viniera a vivir con nosotros,
pero parece que yo no le caigo bien y no soporta la bulla que hacen Jaslin y
Jerith — me respondió — tu tía está en una buena residencia de reposo, mis
padres también están bien. Tu amiga conoció a uno de sus pretendientes en real.
Thew está bien, luego de la discusión hice fui a disculparme con él, lo
invitamos a la boda, de hecho fue él quien te entregó.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— ¿Durante esos
dos meses que él se quedó conmigo ayudándome con la redecoración de la casa no
sucedió nada entre nosotros? — le pregunté porque tenía una sensación confusa.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Miradas,
caricias y besos furtivos — me respondió sin molestia — tú sintiéndote culpable
de lo que todavía sentías por él y él masturbándose en la habitación de
huéspedes, pero no pasó de eso… y si hubiera pasado, pues merecido me lo
hubiera tenido por haberte dejado con los bebés apenas te dieron de alta de la clínica. </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— ¿Y te enteraste?
— le pregunté — es decir ¿tu otro yo del paralelo se enteró?</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Tú misma me lo confesaste
— me respondió.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Entonces no
entiendo por qué te disculpaste con Thew — le comenté.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Fui a
disculparme con él fingiendo que no sabía lo que había sucedido entre ustedes y
admitiendo que me había comportado como un imbécil — me respondió — Thew, como
el caballero que es, no me contó detalles, pero estuvo de acuerdo que era mejor
que no volviera a visitarte porque él seguía enamorado de ti. Esa sinceridad me
gustó e hicimos las paces. Mi venganza fue invitarlo a nuestra boda y pedirle
que te entregara en la ceremonia como una demostración de buena voluntad, tú no
tenías ningún familiar varón que pudiera hacerlo y él nos había presentado.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Eso fue cruel —
le dije y él sonrió ladinamente.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Jeraseth volvió a
llenar las copas. En la pantalla vimos que él salió de nuestra habitación, bajó
las escaleras, entró a la biblioteca y tomó un libro que estaba sobre el
escritorio, el título era “La leyenda de Vintergard” tenía un subtítulo que no
distinguí, pero el nombre del autor era Lian Stark. Leyó el prólogo impostando
la voz como si estuviera interpretando la introducción de una película, sonrió
y lo colocó en un librero al lado de otros dos libros, era el último de una
trilogía. Era el mismo título de la novela de fantasía épica que empecé a
escribir hace más de veinte años y hasta ahora no he podido terminar, entonces
supe que nunca terminaría de escribirla en este paralelo.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Ya no perderé
el tiempo tratando de terminar esa novela — le dije haciendo un mohín.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Luego subió y revisó
las habitaciones de los niños. Danica estaba durmiendo con un gato tricolor a
los pies de su cama. Jaslin y Jerith compartían una habitación con camas
gemelas. La decoración de la casa era estilo shabby chic, habíamos reemplazado
casi todos los muebles. Después regresó a nuestra habitación en la que yo lo
estaba esperando, me había puesto un babydoll que combinaba con el peinado y
maquillaje pinup que llevaba. La habitación estaba a media luz y se escuchaba
una música instrumental de los años 40s creando un ambiente romántico y
sensual.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Si es un
paralelo en el que han sucedido casi las mismas cosas que en este supongo que
sucedió lo del sacrificio de los Soles en el Trono Dorado, los eventos
trascendentales se repiten en la mayoría de los paralelos — le dije, Jeraseth
asintió — por lo tanto asumo que Lucien está ocupando el lugar de Luc, pero era
incómodo invitarlo a nuestra boda. </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— No — me
respondió — Luc murió esa noche, supuestamente por una sobredosis de drogas. Por
la pandemia no pudimos ir a su velorio, pero cuando se permitieron los vuelos Thew
te trajo la urna de cenizas y la pusiste sobre tu cómoda. Le pones inciensos,
le das las buenas noches y los buenos días, hasta le cuentas lo que haces y le lees
tus libros.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— ¿Hablo con un
ánfora funeraria y no me has llevado al psiquiatra? — le pregunté.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Yo te llevaría —
me respondió — es mi otro yo quien no lo hace, es un imbécil a quien le parece
que lo que es haces es tierno.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Nos reímos de que
se hubiera llamado imbécil. En la pantalla estábamos besándonos con pasión. Jeraseth
apagó el aparato y me hizo un gesto para ir a la cama.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Una pregunta
más — le dije — ¿se puede ver qué sucede en el futuro?</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— No — me respondió
— el paralelo transcurre sincronizado con este, se puede ver el pasado como
quien retrocede una película, pero no se puede ver un futuro que aún no sucede.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— ¿Y qué ha
pasado a nivel mundial? — le pregunté por curiosidad.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Pues me parece
que lo mismo que ha pasado en este paralelo — me respondió — a veces salen escenas
de nuestros familiares y amigos cercanos, pero no he podido ver detalladamente lo
que está sucediendo en el resto del mundo, creo que Tam solo sintonizó lo que
nos concierne a nosotros.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Jeraseth me besó
y me llevó a la cama. Hicimos el amor y luego seguimos conversando.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Lilith — me
dijo acariciando mi cabello que soltó unas chispas rojizas — cuando vi que el
aparato solo servía para ver un paralelo le pregunté a Tam si podía mostrarme
otros paralelos, primero se negó, pero luego accedió como una manera de compensarme
por no haberme dado lo que le pedí. Tam me llevó a una sala donde había un
monitor que mostraba varios cuadros, me explicó que cada cuadro correspondía a
un paralelo y me dijo que podía elegir otros paralelos en los que estuviéramos
juntos para sintonizármelos en el aparato. Me dejó solo y aproveché para buscar
los paralelos en los que no ha sucedido lo del sacrificio de los Soles en el Trono
Dorado, encontré dos paralelos en los que Luc aún está vivo. Uno es un mundo
postapocalíptico como Mad Max y el otro es un paralelo infestado de zombis, en ambos
Luc es un sobreviviente y está buscándote.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Ya me habían
dicho que existían algunos paralelos en los que Luc no se había inmolado en el
Trono Dorado. No quise indagar, pero Jeraseth me dijo más de lo que quería
saber.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— ¿Por qué visitas
tanto a Lucien en el real cómo súcubo? — me preguntó.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Discúlpame — le
respondí entendiendo que eso le molestara — es algo que no puedo evitar, pero
te prometo que trataré de no hacerlo.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— No te lo estaba
reclamando — me aclaró — quiero que te des cuenta por qué lo haces. Seamos
sinceros, lo haces porque extrañas a Luc. Lo que buscas es su cuerpo, su tacto,
su olor… lo haces para revivir los momentos cuando estaban juntos.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Si, lo hago por
eso — admití — pero también lo hago porque necesito la energía de Lucien.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Inmediatamente
después de la muerte almática de Luc empezaste a visitar al doppelgänger que se
quedó ocupando su cuerpo — me recordó — pero no lo hacías cómo súcubo, muchas
veces solo lo contemplabas mientras estaba haciendo cosas cotidianas.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— El doppelgänger
se estaba deteriorando — le respondí — ya no podía darme energía.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Es cierto — me concedió
— pero igual lo visitabas. Una vez dijiste que, aunque el doppelgänger ya no
tenía la energía para corresponderte, te hacía feliz solo contemplarlo mientras
dormía. Luego Lucien pasó a ocupar el cuerpo de su padre y volviste a hacerle visitas
nocturnas como súcubo. Sé que necesitas la energía de Lucien, pero puedes buscarlo
y follártelo en el astral cuando se te antoje, además está más guapo y su energía
es más pura. Pero prefieres buscarlo en el real…</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Porque extraño
a Luc — le respondí.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Si — me
respondió — pero también lo haces por la resonancia… el cuerpo de Luc puede
captar las reverberaciones de sus otros él de los paralelos en los que no ha
muerto y tú, inconscientemente, respondes a esa resonancia. El destello azul
que ves en sus ojos cuando le haces el amor no es idea tuya. Puedes comprobarlo
si quieres, ve al Templo del Sol, abre el cofre que guarda los restos de su
gema y verás que entre las cenizas todavía hay chispas azules.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Por un momento
tuve una esperanza, pero luego recordé que, tarde o temprano los
acontecimientos trascendentales se repiten en todos los paralelos.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Chispas azules
que terminarán apagándose — le respondí con tristeza — verlas solo alimentarán
mis esperanzas de algo que ya no puede ser porque tarde o temprano esos otros él
también morirán en sus respectivos paralelos para reunirse con los que ya están
en la Fuente.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— No irán a la
Fuente — me dijo.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— ¿Qué quieres
decir? — le pregunté.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Tu Luc no fue a
la Fuente — me respondió — su energía fue consumida para sostener el Trono
Dorado y su esencia fue asimilada por el Emperador. Los esbirros del Emperador
están recolectando los otros ellos de todos los Soles que se inmolaron voluntariamente
en este paralelo, los interceptan en el momento que mueren y los llevan al
Trono Dorado para ser sacrificados.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— ¿Y para qué me
lo estás diciendo? — le pregunté impotente — no puedo hacer nada.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Si puedes — me
respondió — puedes evitarlo interceptándolos en el momento de sus muertes antes
que los esbirros del Emperador lo hagan y los obliguen a inmolarse en el Trono
Dorado. Eres la luna celta, heredera de Ariadna, la dueña de las almas… tu
ocupación es recoger las almas de los fallecidos en la orilla y llevarlas en tu
barca al otro lado. En el caso de los otros Luc, aunque no son tus parejas, ellos
tienen el derecho que tú seas el psicopompo que los guíe al otro lado. Podrías interceptar
al Luc del paralelo de los zombis y al del paralelo Mad Max en el momento que
mueran, pero en lugar de hacerlos cruzar al más allá, donde seguramente los
esbirros del Emperador estarán esperándolos, puedes anclarlos en su cuerpo de
este paralelo.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Y crearía una
aberración semejante a un horrocrux — observé — dos fragmentos de alma atados a
un cuerpo que en unos años morirá de muerte natural.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— No son
fragmentos de alma — me respondió — cada uno es un alma completa.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Lucien está
ocupando ese cuerpo — le recordé — y en el caso que lo moviéramos a un cuerpo
más adecuado a su edad almática y al gusto de Elianne, solo podría anclar a uno
de los Luc.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Puedes anclar a
los dos con un cordón doble — me respondió.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"><span lang="ES">— ¿Y qué
ganaríamos con eso?</span><span lang="ES"> </span><span lang="ES">— le pregunté.</span></div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Pues que no los
sacrifiquen en el Trono Dorado y evitar la destrucción de su pilar almático —
me respondió — mientras su pilar se mantenga en pie hay esperanzas. Si el
Emperador muere todas las esencias que asimiló serán liberadas y regresarán a
sus pilares respectivos.</div><o:p><div style="text-align: justify;">— Eso es
levantarnos en contra del Imperio — le dije.</div></o:p></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Los esbirros
del Emperador están tomando los otros ellos de los Soles que aceptaron
inmolarse sin permiso — me respondió — el trato que se hizo fue entregar la
energía de un Sol para sostener el Trono Dorado, por eso se pidió que
entregaran las gemas, nunca se aceptó entregar sus esencias. Ellos tomaron sus
esencias y además ahora están tomando a los Soles de los otros paralelos. Están
atentando contra el Orden del Universo y la Fuente destruyendo pilares
almáticos para mantener vivo a un cadáver al que adoran ciegamente. Tú tienes
el derecho, e incluso diría el deber, de evitar la destrucción del pilar
almático de Luc.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">No supe que
responderle, era algo que me sobrepasaba.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Los Renegados estarán
a tu lado apoyándote — me dijo — uno de ellos es tu hijo y los otros son hijos
de otras Lunas, amigas y aliadas tuyas. Lunas que también perdieron a sus
respectivos Soles, que eran sus esposos y hermanos. Lunas que claman venganza.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Los Renegados
fueron purificados — le respondí.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— En la fuente de
la vida del astral azul — me recordó — purificados de la ruina de los Dioses
del Caos, pero siguen siendo Renegados del Imperio y ahora son leales a sus respectivas
madres, las Diosas del linaje de Astarté. El Fénix es el prometido de tu hija
Luana.</div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"><span lang="ES">— Dime lo que
quieras decirme sin rodeos, hijo de Nergal</span><span lang="ES"> </span><span lang="ES">— le dije.</span></div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Crea alianzas
con los Renegados y con los que son Leales al Imperio — me respondió — ofréceles
lo que ellos siempre han deseado y que el Emperador siempre les ha negado.</div><o:p><div style="text-align: justify;">— ¿Qué es lo que podría
ofrecerles? — le pregunté.</div></o:p></span><a name="_Hlk81251392"></a><div style="text-align: justify;"><a name="_Hlk81251392"></a><a name="_Hlk81251392"><span lang="ES">—</span></a><span lang="ES"> Una familia que los
ame — me respondió — el amor de una madre, el amor de un hermano, el amor de una
esposa, la opción de tener hijos a los que ellos amarán y protegerán. Dos de
los Leales son hijos tuyos y han tomado mujeres, uno a su hermana y el otro a una
guerrera de un mundo élfico… ¿crees que el Emperador sigue considerándolos Leales
cuando han roto sus juramentos? ¿de qué lado piensas que se pondrán ellos cuando
el Emperador los amenace con exterminar a sus hijos?... For our children! será el
grito de guerra que estalle en sus gargantas cuando levanten sus puños contra
el Emperador para defender a sus familias.</span></div><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— ¿Crees que
perderán su honor para defender a sus familias? — le pregunté.</div> <o:p><div style="text-align: justify;">— Si, porque a
pesar de todo siguen siendo humanos — me respondió — ya lo dijo el maestre de
la Guardia de los Cuervos: ¿Qué es el honor en comparación con el amor de una
mujer? ¿Cuál es el deber frente a la sensación de un hijo recién nacido en tus
brazos o el recuerdo de una sonrisa entre hermanos? El viento y las palabras.
Sólo somos humanos, y los Dioses nos han formado para el amor. Esa es nuestra
gloria y nuestra gran tragedia.</div></o:p></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Busqué el refugio
de su pecho. Jeraseth acarició mi cabello, sabía que estaba llorando en
silencio.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"><b>Liliana Celeste Flores
Vega – lunes 23 de agosto del 2021</b></div> </span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Imagen: Google</div></span></div>
Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-67189884262727743592021-08-19T04:00:00.002-05:002021-08-19T04:00:44.222-05:00El hijo del dragón<div style="text-align: left;"><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEizcMSa2YXm1oiE4cvl3kvxjFEzri7byLOpEpJgQZzyM2Tpld7We0Znyr6abFt_WvoIBAgUXr0klQxV2X2UDYUfV52EuETOIBlvPoSwkD6eWZ5gV1J0FdRdc5y1pfxhVF6F0doEK-v0AzQ/s1836/hijo.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1836" data-original-width="1290" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEizcMSa2YXm1oiE4cvl3kvxjFEzri7byLOpEpJgQZzyM2Tpld7We0Znyr6abFt_WvoIBAgUXr0klQxV2X2UDYUfV52EuETOIBlvPoSwkD6eWZ5gV1J0FdRdc5y1pfxhVF6F0doEK-v0AzQ/w281-h400/hijo.jpg" width="281" /></a></div>Y a pesar de mi ira y tristeza no podía controlar el deseo
que sentía por Jeraseth. Fui a buscarlo a la villa, subí a nuestra alcoba y lo
encontré sentado en el lecho rasgueando algunas notas de aquella canción en su
guitarra, vi un vaso y media botella de whisky sobre el velador.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¡Lilith! — exclamó con sorpresa al verme — no te esperaba,
pensé que estabas molesta.</div><div style="text-align: justify;">— ¡Estoy furiosa! — exclamé acercándome a él, anticipando
mis acciones dejó la guitarra a un lado y se puso a la defensiva.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Me detuve firmemente frente a él y con todas mis fuerzas le
di una, dos, tres bofetadas… le hubiera dado una cuarta si no fuera porque me
empezó a doler la mano. Jeraseth las recibió sin inmutarse, ni siquiera se
limpió el hilillo de sangre que le escurría del lado izquierdo del labio
inferior. Sostuvo mi mirada desafiante e hizo una mueca dándome a entender “¿Eso
es todo?”</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">En respuesta me senté a horcajadas sobre sus piernas, tomé
su rostro con ambas manos y le di un beso, un beso que lo tomó tan de sorpresa
que no supo corresponderme.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¡Abre la boca! — le exigí presionando las articulaciones
de su mandíbula, él cedió y lo besé apasionadamente introduciendo mi lengua
dentro de su boca.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Lo besé largo rato degustando el sabor a licor que tenía su
boca. La alcoba estaba cálida pesar de que las puertas del balcón se
encontraban abiertas, en la chimenea ardían algunos leños y en el aire flotaba
un ligero aroma de sándalo. Jeraseth puso sus manos en mi cintura, pero yo me
liberé con enfado de su abrazo.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¡Tus manos entrelazadas y detrás de tu nuca! — le ordené,
él obedeció con una sonrisa dispuesto a dejarme hacer.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Le desgarré la camisa para lamer su cuello, morder sus
hombros, retorcer sus pezones y acariciar su vientre. Jeraseth soportó mis ataques
sin moverse y mordiéndose los labios para no emitir ni un gemido. Sentía su
miembro viril enhiesto y caliente presionando contra mi pubis, pero mantuvo sus
manos entrelazadas detrás de su nuca.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Me puse de pie para quitarme el vestido y le indiqué que se
desnudara. En la espalda aún tenía las marcas del látigo que le dejé en nuestro
anterior encuentro.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¡No me toques! — le grité cuando hizo un ademán de tomarme
entre sus brazos para llevarme al lecho — siéntate al borde de la cama con las
piernas separadas.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Obedeció, ya conocía ese juego. Me arrodillé entre sus
piernas para lamer con ansias su sexo. Luego levanté mi rostro, sabía que le
mostraba la imagen de una bacante ebria de deseo, con las pupilas dilatadas y
los labios enrojecidos… introduje dos dedos en mi boca y los chupé para
ensalivarlos, él ya sabía lo que venía a continuación.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Se apoyó con una mano sobre la cama, levantó un poco las
caderas y con la otra mano sujetó sus testículos para facilitarme el acceso a
aquella zona de su cuerpo. Tanteé su entrada y él se relajó para facilitar mi
propósito, se tensaba con los dildos pero le gustaba cuando usaba mis manos. Lentamente
lo penetré con mis dedos, sus jadeos me confirmaron que lo disfrutaba y volví a
atender con mi boca su miembro viril. Sentía mis entrañas latiendo y mis
fluidos goteando.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— Sigue — murmuró entre jadeos — así quiero tenerte siempre,
de rodillas a mis pies, devorando mi verga como una puta.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Tuvo suerte que yo reaccionara retirando mis dedos de su
interior antes de que mi rabia revelara mi aspecto bestial. Me incorporé y lo
tumbé sobre la cama con un zarpazo, mi mano se había transformado en una garra
y le dejé tres arañazos ensangrentados cruzando su pecho. De inmediato me monté
a horcajadas sobre él y me empalé con su miembro erecto que se deslizó en mis
entrañas húmedas y palpitantes. Jeraseth alargó la mano y estrujó uno de mis
pechos.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¡Te dije que no me tocaras! — exclamé dándole un zarpazo
en la mejilla — mantén tus manos entrelazadas y detrás de tu nuca.</div><div style="text-align: justify;">Obedeció con una sonrisa a pesar del arañón que le había
dejado en el rostro y empecé a cabalgarlo furiosamente.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¿Ya aprendiste la lección, hijo de Nergal? — le pregunté
sin dejar de moverme de arriba para abajo mientras apretaba su tráquea — no
matarás ni lastimarás a mis amigos.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Jeraseth sostuvo mi mirada, se mordió los labios y asintió levemente.
Retiré mi garra de su cuello y seguí cabalgándolo hasta que el placer me
envolvió en una oleada cálida y me desvanecí jadeante sobre su pecho. En ese
momento él aprovechó para tomarme de las caderas y hacerme dar la vuelta quedando
encima de mí, empezó a embestirme bufando como un animal salvaje y colocó una
mano alrededor de mi cuello.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¿Y tú, princesa pleyadiana, también aprendiste la lección?
— me preguntó mientras ejercía la presión suficiente para dificultarme la
respiración — si no me rechazas no tendré motivos para matar o lastimar a tus
amigos.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Me negué a responder y Jeraseth ejerció un poco más de
presión, sujeté su brazo para hacerle saber que estaba empezando a apretar demasiado
fuerte, pero él no desistió, repitió la pregunta y asentí… entonces retiró su
mano y me besó apasionadamente. Rodeé sus caderas con mis piernas haciendo
traba con mis tobillos y enlacé mis brazos alrededor de su cuello, Jeraseth sabía
lo que yo quería cuando hacía eso, se levantó sosteniéndome entre sus brazos y
me llevó a la terraza.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Bajo el cielo azul y púrpura desplegué mis alas de plumas
blancas y él desplegó las suyas, esas alas oscuras y membranosas semejantes a
las de un murciélago y que él pretendía que eran parecidas a las de un dragón.
Sus alas habían sido restauradas y mejoradas con implantes mecánicos después de
que Vesphurs se las desgarrara a zarpazos y mordiscos la vez que se enfrentaron
en duelo.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Nos elevamos en el cielo en una cópula aérea. Sentí su energía
cargada de pasión emanando de la abertura de su pecho y su intención de hacer
lazos. El nido de mi pecho, en donde se están gestando las dos gemas que hemos
procreado, se abrió para recibir su energía que alimenta a nuestras gemas y correspondí
a su deseo entrelazando su lazo rojo con hilos azules que se extendieron
buscando la abertura de su pecho. Lo sentí estremecerse llegando al orgasmo y
su placer desencadenó en mí una deliciosa oleada de sensaciones.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Descendimos y nos quedamos tendidos sobre la hojarasca, estábamos
exhaustos pero satisfechos y complacidos por el nuevo lazo que habíamos creado.
Finalmente estábamos en paz.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— Creo que esta noche se celebra el cumpleaños de uno de tus
amigos — me comentó mirando el cielo en el que empezaban a aparecer unas
estrellas pálidas — ¿Te gustaría que fuéramos?</div><a name="_Hlk80218294"></a><div style="text-align: justify;"><a name="_Hlk80218294"></a><a name="_Hlk80218294">—</a> Sí — le respondí — será la
primera celebración en el Reino del Este.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Cuando llegamos encontramos una celebración sencilla pero
amena. Los carromatos de los cíngaros estaban dispuestos en un círculo y unidos
por cadenetas de telas coloridas y campanillas, supe que también era un hechizo
de protección. Leo estaba rodeado de sus amigos, vestido a la usanza de su clan
y su cabellera dorada cayendo como una cascada de rizos hasta su cintura, sonrió
al vernos y nos acercamos. Lo saludé con un abrazo y él me correspondió con un
sonoro beso en cada mejilla, luego le extendió la mano a Jeraseth. Sabía que se
me notaban las huellas que la mano de Jeraseth había dejado alrededor de mi
cuello y él tenía la marca de mi zarpazo sobre su mejilla.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¿Ya empezaron con la fase tóxica? — nos preguntó Leo con
una sonrisa divertida, pero en su mirada había una advertencia que Jeraseth
entendió.</div><div style="text-align: justify;">— ¡Brindemos! — exclamó César pasándonos una bota de vino.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Luego Jeraseth y yo dimos una vuelta por el lugar. Había una
mesa larga con bocadillos, varias fogatas, bailarinas, músicos y saltimbanquis
por doquier. Nos encontramos con Mordred quien estaba conversando con un grupo variopinto
de artistas circenses.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— Necesito hablar con ella por un momento — le dijo a
Jeraseth quien asintió, pero indicándome que no demorara demasiado.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Mordred me tomó de la mano y me llevó hasta la mesa, allí me
levantó la barbilla y examinó las huellas que Jeraseth me había dejado en el
cuello.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¿Esta vida fue la primera vez que le dijiste a Jeraseth que
no te quedarías con él? — me preguntó frunciendo el ceño, yo asentí — entiendo,
no está acostumbrado a que lo rechaces. Tuvieron suerte, las leyes de Gaia
evitaron que Jeraseth hiciera algo peor y Nergal arregló lo mejor que pudo el error
que cometió su hijo para evitar que su nombre se viera involucrado en un serio problema.</div>
<div style="text-align: justify;">— Ya estamos en paz, Mordred — le dije — no quiero volver a hablar
del asunto.</div><div style="text-align: justify;">— Entiendo, él recibió su castigo y no queda más que aceptar
como arreglaron el incidente — dijo Mordred — pero ¿sabes lo que hubiera hecho Jeraseth
en un mundo medieval? ¿te imaginas tu aldea arrasada por el fuego mientras que
él te llevaba a la fuerza en su caballo o tu castillo sitiado por sus tropas y
tu gente muriendo de hambre hasta que tú aceptaras entregarte a él?</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">No era necesario que me lo dijera, ya lo había pensado.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¿Ahora entiendes el recelo de mi madre por los segundos
consortes rojos? — me preguntó — los rojos son arrogantes y violentos, se
obsesionan con las azules.</div> <div style="text-align: justify;">— Jeraseth nunca se había comportado así — le refuté
intentando disculpar a mi segundo consorte.</div><div style="text-align: justify;">— Porque nunca lo habías rechazado — me refutó airado.</div><div style="text-align: justify;">— Jeraseth me ama — le respondí.</div><div style="text-align: justify;">— No lo dudo, te ama, pero también está obsesionado y los
celos pueden convertirlo en una amenaza — prosiguió — ya has visto cómo
reaccionó ante una negativa de tu parte: dile que no y verás tu ciudad asediada
por sus ejércitos, dile que no y verás tu mundo bombardeado por sus naves, dile
que no y verás el bosque celta ardiendo.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Sabía que Morrigan no aprobaba mi unión con Jeraseth, pero
nuestro matrimonio era una alianza con los anunnakis pactada por Killa y Nergal
desde antes de nuestros nacimientos. Incluso Nergal no se había enojado cuando
me presentaron a otros pretendientes rojos pues decía que su hijo y yo estábamos
hechos el uno para el otro. Hace un mes había escuchado a Morrigan conversando
con Nimué, ellas esperaban que yo pidiera la anulación de mi matrimonio con
Jeraseth para tomar a Lucien como primer consorte y a Mordred como el segundo, se
habían desilusionado al comprobar que mi deseo por Lucien solo era por el
cuerpo que él estaba ocupando y que nunca desposaría a mi hijo. En esos
momentos los músicos empezaron a tocar esa canción.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><span lang="EN-US" style="mso-ansi-language: EN-US;"><div style="text-align: justify;">Run for
your life</div></span><span lang="EN-US" style="mso-ansi-language: EN-US;"><div style="text-align: justify;">The empress
is here, torture and fear</div></span><span lang="EN-US" style="mso-ansi-language: EN-US;"><div style="text-align: justify;">Run for
your life</div></span><span lang="EN-US" style="mso-ansi-language: EN-US;"><div style="text-align: justify;">The beast
has appeared, the end is near</div></span><span lang="EN-US" style="mso-ansi-language: EN-US;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><div style="text-align: justify;">Había supuesto que el apuro de traer de otra realidad al
pequeño Merlín era una precaución ante una eminente amenaza de Sheithan, ahora
comprendía a quien llamaban la bestia.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><span lang="EN-US" style="mso-ansi-language: EN-US;"><div style="text-align: justify;">Merlin, son
of a fallen angel</div></span><span lang="EN-US" style="mso-ansi-language: EN-US;"><div style="text-align: justify;">Merlin, a
legend of the past</div></span><span lang="EN-US" style="mso-ansi-language: EN-US;"><div style="text-align: justify;">Foretold
the story of two dragons</div></span><span lang="EN-US" style="mso-ansi-language: EN-US;"><div style="text-align: justify;">Fighting
for the land</div></span><span lang="EN-US" style="mso-ansi-language: EN-US;"><div style="text-align: justify;">His name will
live forever</div></span><span lang="EN-US" style="mso-ansi-language: EN-US;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><div style="text-align: justify;">— No, Jeraseth no se volverá como Sheithan — le dije a Mordred,
pero la duda me amargó la boca y ensombreció mi corazón — él no es el hijo del
dragón.</div> <div style="text-align: justify;">— Cálmate, Lilith — me dijo acariciando mi mejilla —
Jeraseth no se volverá como Sheithan porque yo no lo permitiré, yo soy el hijo
del dragón.</div> <div style="text-align: justify;">— Entonces ¿serás tú quien incendies aldeas y asedies castillos?
— le pregunté.</div><div style="text-align: justify;">— No, yo soy el hijo del dragón que luchará para proteger las
tierras celtas — me respondió — ahora ve con él, pero recuerda, estaré
vigilándolo.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Jeraseth estaba conversando con el grupo de artistas
circenses, me dirigí a su encuentro, pero Morrigan se me interpuso.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><a name="_Hlk80207217"></a><div style="text-align: justify;"><a name="_Hlk80207217"></a><a name="_Hlk80207217">—</a> Debemos de hablar sobre tu
segundo consorte — me dijo Morrigan, sabía que tarde o temprano tendríamos esa
conversación y estaba preparada.</div><div style="text-align: justify;">— No te preocupes — le respondí — cuando mi hija Luana tenga
la edad y la experiencia necesaria para ocupar el Trono de la Luna abdicaré
entregándole la corona y el cetro, entonces me marcharé con Jeraseth a nuestra
villa en el bosque de otoño en el Reino del Eterno Ocaso. Hace tiempo tomé esa decisión,
además es lo que Luc quería que hiciera. </div><div style="text-align: justify;">— Tú no te puedes marchar ni abdicar, eres la reina de las
tierras celtas hasta que llegue tu tiempo de ascender — me dijo para mi
sorpresa — Lilith y Lucipher deben de estar juntos.</div> <div style="text-align: justify;">— Lilith y Lucipher son dos títulos que no volverán a usarse
— le respondí — Luc fue el último Lucipher, ese título murió con él. Y yo
renuncié al título de Lilith, subí al Trono de la Luna con mi verdadero nombre,
yo soy Lily Anne la gris.</div> <div style="text-align: justify;">— Puedes llamarte como quieras, pero sigues siendo Lilith —
me refutó — y mi hijo es…</div><div style="text-align: justify;">— ¡Tú hijo no puede recibir el título de Lucipher solo
porque un puñado de idiotas lo llamen así! — exclamé y me di cuenta que mi voz había sido
un graznido, mis manos se habían convertido en garras y mis alas, con plumas
afiladas como navajas de argento, estaban desplegadas. Morrigan dio un paso
atrás y bajó la cabeza.</div><a name="_Hlk80208438"></a><div style="text-align: justify;"><a name="_Hlk80208438"></a><a name="_Hlk80208438">—</a> Mi hijo es el hijo del dragón —
murmuró — y tú no puedes escapar de tu destino, te llames Lilith o Lily Anne la
gris… tú vislumbraste tu futuro cuando tomaste el cetro en el centro del laberinto,
te viste sentada en un trono en lo alto de una colina, estabas vestida de
blanco y tenías un cetro de plata coronado por un zafiro… a tu lado se alzaba otro
trono donde estaba sentado un guerrero vestido de negro, él llevaba la armadura
del dragón y empuñaba una espada de hielo llameante…</div><div style="text-align: justify;">— Es cierto — le respondí recordando esa visión — y yo llevaba
un anillo de oro con un rubí en el dedo anular, este mismo anillo que me dio Jeraseth
cuando nos casamos… vi una planicie, bosques, castillos y fortalezas en la
lejanía… el guerrero que estaba sentado a mi lado llevaba la armadura del
dragón, pero el cielo detrás de nosotros era azul y púrpura. Tal vez tengas
razón y ese guerrero sea tu hijo… entonces confía en el destino, los dos se
llevarán bien.</div> <div style="text-align: justify;">— Créeme que es lo que más deseo por el bien de todos — me respondió
Morrigan — si uno de los dos cede tal vez se lleven bien, pero mi hijo no será
quien…</div><a name="_Hlk80226413"></a><div style="text-align: justify;"><a name="_Hlk80226413"></a><a name="_Hlk80226413">—</a> No tienes que decirlo, Morrigan
— le respondí volviendo a mi apariencia habitual — yo me encargaré que sea Jeraseth
quien ceda. Y tú, toma a tu hijo y termina de criarlo, todavía se comporta como
un niño en el real. Jeraseth no agachará la cabeza ante un dragón de peluche.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Morrigan asintió y se retiró. Me dirigí a donde me esperaba
Jeraseth, noté que estaba a la defensiva y supe que había visto mi encuentro
con Morrigan y mi transformación.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¿Qué pasó? — me preguntó preocupado.</div><div style="text-align: justify;">— Pasó que le dejé en claro a Morrigan que tú eres mi
segundo consorte y nunca pediré la anulación de nuestro matrimonio — le expliqué
tratando de no exagerar el asunto.</div><div style="text-align: justify;">— ¿Por qué nuestro matrimonio es una alianza con los
anunnakis? — me preguntó.</div><div style="text-align: justify;">— Porque te amo — le respondí, le eché los brazos al cuello
y le di un beso.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Fuimos a sentarnos con el grupo de juglares rojos que solían
invitarse por iniciativa propia a todas las celebraciones que se hacían en el
astral azul, estaban conversando y bebiendo vino alrededor de una de las hogueras.
Un rato después Mordred se nos unió con una fuente de bocadillos.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><a name="_Hlk80230921"></a><div style="text-align: justify;"><a name="_Hlk80230921"></a><a name="_Hlk80230921">—</a> Eso no alcanzará para todos,
traeré otra fuente — dijo Jeraseth poniéndose de pie, supe que era un pretexto
para que Mordred pudiera hablar libremente conmigo.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Mordred se sentó a mi lado. Esperaba sus preguntas, advertencias
y reclamos, pero al parecer ya había hablado con su madre.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— Dame una oportunidad, te juro que no te defraudaré — me
dijo.</div><div style="text-align: justify;">— ¿Cuándo te convertirás en el dragón que empuña la espada
de hielo? — le pregunté.</div><div style="text-align: justify;">— Cuando tú te conviertas en Lily Anne la blanca — me
respondió.</div><div style="text-align: justify;">— ¿Tendré que caer a un abismo y luchar contra un balrog? —
le pregunté usando la referencia.</div><div style="text-align: justify;">— Ya caíste — me respondió — pero no es necesario que luches
contra el balrog, será suficiente con que lo domestiques.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Jeraseth regresó con una bandeja de jamones, salchichas y
quesos. Tomó un pedazo de salchicha bastante grande y se lo embutió en la boca
a Mordred quien no tuvo más opción que tragársela. Luego se sentó a mi izquierda
y me hizo lo mismo, aunque con más delicadeza.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¿No les parece extraño que Mortwuld no esté en la
celebración? — les pregunté para iniciar una conversación, pero ellos se
alzaron de hombros.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Pasamos un rato más conversando, bebiendo y comiendo con los
juglares. De vez en cuando miraba al resto de personas buscando a Mortwuld,
pero no lo encontré.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— Mi amor, ya es hora de que regresemos a la villa — me dijo
Jeraseth y luego se dirigió a Mordred quien estaba bastante ebrio — ¿vienes con
nosotros?</div><div style="text-align: justify;">— Ni loco — le respondió Mordred trastabillando al ponerse
de pie — la última vez que fui intentaste emborracharme con ese licor de bayas
rojas.</div><div style="text-align: justify;">— Te prometo que no volveré a hacerlo — le dijo Jeraseth
sujetándolo del brazo.</div><div style="text-align: justify;">— No confío en tu palabra — farfulló Mordred apoyándose en Jeraseth.</div><div style="text-align: justify;">— El licor de bayas rojas te cayó mal y fui yo quien tuvo
que limpiar todo tu vómito de la alfombra, no quiero repetir la desagradable experiencia
— le respondió Jeraseth — además ya estás borracho, no necesito darte de beber
más trago.</div><div style="text-align: justify;">— Tus argumentos son buenos, entonces los acompaño — aceptó Mordred
tambaleándose.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Llegamos a la villa prácticamente arrastrando a Mordred.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— Yo me hago cargo de ponerlo cómodo — me dijo Jeraseth
llevando a Mordred a nuestra alcoba y haciéndome un gesto indicándome que los
dejara solos por un momento — mientras tanto trae los cigarros que se quedaron en
la biblioteca.</div><div style="text-align: justify;">— ¿Estuviste leyendo? — le pregunté gratamente sorprendida.</div><div style="text-align: justify;">— No, tú los dejaste allí — me respondió — te digo que los
traigas ahora para que luego no me los estés pidiendo cuando ya estemos en la
cama.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Fui a la biblioteca por los cigarros, cuando calculé que Jeraseth
había tenido el tiempo necesario para convencer a Mordred, subí a nuestra
alcoba. Los encontré a ambos desnudos en la cama… y Mordred estaba
profundamente dormido.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¿Qué pasó, lo pusiste demasiado cómodo? — le pregunté a
Jeraseth tomando un cigarro.</div><div style="text-align: justify;">— Si, y se ha quedado dormido encima de mi brazo — me
respondió fastidiado.</div><div style="text-align: justify;">— Al menos no te vomitó encima — le dije encendiendo el
cigarro en la flama de una vela.</div> <div style="text-align: justify;">— ¿Y ahora que hacemos? — me preguntó Jeraseth sacando su brazo
de debajo de Mordred.</div><div style="text-align: justify;">— Pues échale una manta encima — le respondí dando una calada
— no le vaya a dar frío y luego tengas que limpiar aguas menores.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;"><b>Liliana Celeste Flores Vega – 18 de agosto del 2021</b></div><div style="text-align: justify;">Canción: Merlin - Legends for the Past - Freedom Call</div><div style="text-align: justify;">Imagen: Luis Royo</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p></div><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p>
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Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-24823778684976123522021-07-09T19:35:00.004-05:002022-12-24T21:20:55.681-05:00Los extraños sucesos de la casa de la locura <div style="text-align: left;"><div style="text-align: justify;"><span style="background-color: white;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhQ8lGgmSEal-NB9wHNAcfB7MEZksg5aalvtV8UpX_E9Ev8YBvmLuPZMJOoCvHi4ZlBmW0Q6Bwh1LLg51q94eJ5xGDlOdBklXkFzEYbak8uep3CJ_JIhK3DGUoacSw6DTed__Cu5_YZb58/s600/los+extra%25C3%25B1os.jpg" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="508" data-original-width="600" height="339" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhQ8lGgmSEal-NB9wHNAcfB7MEZksg5aalvtV8UpX_E9Ev8YBvmLuPZMJOoCvHi4ZlBmW0Q6Bwh1LLg51q94eJ5xGDlOdBklXkFzEYbak8uep3CJ_JIhK3DGUoacSw6DTed__Cu5_YZb58/w400-h339/los+extra%25C3%25B1os.jpg" width="400" /></a></div></span></div><span style="background-color: white;"><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Los amables lectores de mi blog recordarán los extraños sucesos que Damon y yo vivimos a finales del año 2012 y supongo que algunos se preguntarán que sucedió con los pacientes de aquella atípica casa de reposo que se encuentra en un lejano paraje en el norte del país. Yo misma sentía esa curiosidad y desconocía que había sucedido con ellos... hasta hace un par de semanas que Damon y yo volvimos a visitar el lugar. </div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;">Para aquellos que no han leído mi blog les
contaré brevemente los hechos que son el preámbulo a este relato y les
presentaré a los personajes protagonistas del mismo. No me extenderé en
detalles que no vienen al caso… sólo mencionaré que una noche Todd, Damon y yo nos
vimos involucrados en un confuso incidente que terminó con Todd recluido en
aquella casa de reposo y con Damon y yo en la enfermería del Museo con heridas
de cierta gravedad pues Todd, en aquél inexplicable episodio de locura, nos
agredió físicamente.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Pasados algunos días nos trasladaron de la
enfermería a una habitación en el edificio donde se aloja el personal del
Museo. Damon y yo estábamos recuperados físicamente pero mentalmente nos
encontrábamos al borde de un colapso porque durante las últimas noches habíamos
tenido sueños más extraños de los que acostumbrábamos tener y nos obsesionamos
con descifrar el significado arcano de los mismos. Salíamos de aquella
habitación sólo para ir al baño, incluso comíamos allí… primero fue por
evitarnos las miradas del personal del Museo a quienes nuestro amigo el
arqueólogo, a falta de una mejor explicación para lo sucedido, les había dicho
que la noche del incidente nosotros y Todd nos habíamos pasado con las drogas
(así que nos había hecho fama de depravados y drogadictos) y luego por la
obsesión que nos estaba consumiendo. Julio nos traía la comida y otras cosas
que necesitábamos. Nosotros dormíamos, desayunábamos, pasábamos la mañana en la
cama contándonos y comparando nuestros sueños, almorzábamos, pasábamos toda la
tarde exprimiéndonos el cerebro tratando de entender el significado o mensaje
de aquellos condenados sueños, cenábamos… y vuelta otra vez al enfermizo
círculo vicioso.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Durante las últimas noches los dos habíamos
soñado repetitivamente con un mundo con dos soles rojos y una luna opaca. El
mundo tenía dos continentes con zonas desérticas, zonas volcánicas, montañas
escarpadas y frondosas selvas. Los sueños que tenía Damon eran como una
película que pasaba aceleradamente, los míos se centraban en un hecho o
personaje determinado. Con la información reunida de los sueños de ambos
habíamos podido armar un poco de la historia de ése mundo… pero lo que nos
sacaba de quicio era que estábamos absolutamente seguros que esos sueños no
eran recuerdos de nuestras vidas pasadas, no sentíamos familiaridad con ése
mundo ni empatía con sus habitantes, a lo más nos recordaba mucho al mundo de
Conan el bárbaro… sabíamos que no éramos partícipes de aquella historia, sólo
unos espectadores… por lo tanto algo o alguien nos estaba mandando esas
visiones oníricas y quería que las descifráramos.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Damon había visto la evolución de la
humanidad nativa de ese mundo desde el estado de unos primitivos nómades hasta
que formaron clanes, reinos e imperios… y como todos estos habían sido
destruidos por guerras, pestes, desastres naturales y eventos sobrenaturales
inexplicables. Yo había visto los rituales de los chamanes tribales danzando
alrededor de un monolito gigantesco al son de unos tambores hechos con la piel
de un animal muy parecido al mamut, la construcción de unas enormes pirámides
escalonadas de piedra roja, la explosión de un colosal volcán que arrasó con
una próspera ciudad, la edificación de una ciudad subterránea… a un sacerdote
con una capa de piel de lobo sacrificando a un niño en un altar ante la estatua
de un dios con la apariencia de un reptil, a una mujer guerrera crucificada en
una plaza en medio de una multitud aullante, a una anciana ciega rezando
arrodillada frente a un ara, a un nigromante descifrando los jeroglíficos de un
pergamino en una biblioteca subterránea… en fin, todos eran personajes que aunque
reconocía como arquetípicos sabía que no tenían nada que ver con nosotros.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">La última noche soñé con una hechicera con el
rostro tatuado que estaba haciendo un ritual en un templo de apariencia sumeria
para invocar a un poderoso demonio… aunque algo debió de salirle mal pues lo
que respondió a su llamado fue un humo negro que emergió de un pozo y la
convirtió en piedra. Después vi como el mundo era invadido por naves espaciales
tripuladas por unos seres de apariencia reptiliana quienes, con sus armas de
avanzada tecnología, sometieron de inmediato a los de la raza nativa del mundo
de los dos soles rojos… me desperté asqueada por las escenas brutalmente
grotescas de matanzas, violaciones y sacrificios.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Fui al baño. Cuando regresé a la habitación
encontré a Damon sentado en la cama con un aspecto bastante desaliñado, no me
había dado cuenta de lo crecida que llevaba la barba y que hasta se le notaba
un poco crecido el cabello… pensé en el aspecto fatal que debería de tener yo
también pues hace días que después de bañarme sólo me pasaba el peine para
desenredarme el cabello y cuando se me secaba lo enroscaba en un moño
sujetándolo con un gancho.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Damon se puso de pie, tomó la cajetilla de
cigarros que estaba sobre la mesa, encendió uno y empezó a fumar nerviosamente…
me quedé atónita pues él no fumaba y se incomodaba cuando yo lo hacía. Noté que
la mano le temblaba. Cuando terminó el cigarro me dijo: “No podemos seguir así,
la obsesión por descifrar el significado de los sueños que tenemos cada noche
nos está haciendo daño, además son cosas de un mundo rojo que no nos incumben.
Debemos de alejarnos de este lugar, regresemos a Lima”.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Estuve de acuerdo con él y le pusimos punto
final al asunto de los sueños del mundo de los dos soles rojos. Nos vestimos
decentemente y buscamos al arqueólogo. Le dijimos que nos sentíamos bien, que
queríamos regresar a Lima pero antes deseábamos visitar a nuestro amigo Todd y le
preguntamos la dirección del hospital psiquiátrico en el que lo habían
internado. El arqueólogo nos respondió que precisamente al día siguiente iría a
visitar a Todd y que podía llevarnos.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Decidimos quedarnos una noche más. Luego del
almuerzo recorrimos el Museo. Cenamos, nos retiramos a la habitación y esa
noche nos permitimos una velada romántica escuchando música de Blackmore’s
Night y bebiendo una botella de vino que nos consiguió Julio.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Julio nos despertó temprano pero según el
arqueólogo era tarde y nos hizo desayunar con prisa. Subimos al asiento trasero
de la camioneta con nuestros equipajes porque pensábamos regresar a Lima esa
misma noche. El arqueólogo se acomodó en el asiento del copiloto, Julio se puso
al volante pero en lugar de dirigirse hacia la carretera que llevaba a la
ciudad tomó rumbo hacia el lado opuesto. Media hora después tomó un desvío
internándose por un paraje desolado hasta que el asfalto desapareció y fue
reemplazado por un camino de tierra… Julio se metió por varios recovecos… Damon
y yo notamos que habíamos pasado dos veces frente a un árbol bastante peculiar,
sin duda Julio estaba dando vueltas innecesarias para que nos desorientemos. Un
par de horas después divisamos un antiguo caserón de dos pisos.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Julio detuvo la camioneta. Entramos al
caserón, de inmediato nos dimos cuenta que el caserón no era un hospital
psiquiátrico ni una casa de reposo convencional. Nos recibió una señora de unos
cincuenta años, delgada y con cabello negro recogido en un moño alto. El
arqueólogo le preguntó cómo estaba Todd, la señora le respondió que seguía en
el mismo estado, aunque mas calmado. Luego llamó a un hombre de mediana edad de
aspecto rústico y fornido, con más aspecto de carcelero que de enfermero… éste
nos llevó hasta una puerta que llevaba a un sótano.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Damon tomó mi mano mientras bajábamos los
peldaños de madera casi podrida de la escalera, sentí que se me encogió el
corazón al pensar los días que Todd llevaba recluido allí. Luego de bajar la escalera
nos encontramos en un pasillo mal iluminado con un foco que daba una luz
amarillenta. Había varias puertas a ambos lados, unas de madera a la izquierda
y otras reforzadas con rejas a la derecha… el arqueólogo nos dijo que Todd se
encontraba en la habitación de la última puerta a la derecha y nos hizo un
gesto para que lo siguiéramos.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Cuando pasamos frente a una puerta de madera
escuchamos los sollozos de una mujer, detrás de la siguiente puerta oímos el
murmullo de la voz de un hombre recitando una plegaria repetitiva... dimos un
par de pasos más y nos sobresaltó un aullido que provino de detrás de una de
las puertas reforzadas con reja, luego escuchamos gruñidos y arañazos contra la
misma como si se tratara de un perro bastante grande encerrado. Damon le pidió
explicaciones al arqueólogo sobre el lugar y los que estaban recluidos allí, él
le respondió que era un asilo para aquellos casos que no podían mantenerse bajo
control en un hospital psiquiátrico convencional.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Finalmente llegamos a la última puerta, el
arqueólogo abrió la reja y luego descorrió la mirilla de la puerta de madera
para constatar el estado en el que se encontraba de Todd… nos dijo que primero
entraría él. Durante el tiempo que esperamos escuchamos que la persona o
criatura que estaba encerrado unas puertas más allá seguía gruñendo.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">El arqueólogo estuvo a solas con Todd
aproximadamente veinte minutos, luego abrió la puerta y nos dijo que podíamos
pasar. Era una habitación pequeña, casi una celda... el único mobiliario era
una sencilla cama de madera con una sábana y una cobija... en una esquina había
un inodoro con un lavabo encima como los que se ven en las celdas en las películas
de presidiarios. Todd estaba sentado sobre la mísera cama con las rodillas
recogidas contra su pecho y la mirada perdida en el vacío… nos conmovió verlo
en ese estado.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Nos acercamos pero Todd no se percató de
nuestra presencia. Notamos que estaba moviendo los labios pero no entendíamos
sus balbuceos... me acerqué más a él, le acomodé un mechón de cabello detrás de
la oreja y le dije parafraseando la serie de Stargate Atlantis: “Comandante,
debe de salir de su estado de hibernación, necesito que se haga cargo de la
nave nodriza”… le di un beso en la
mejilla, entonces pareció reaccionar por un momento, me miró y esbozó un amago
de sonrisa… luego señaló a Damon con un dedo, murmuró algo ininteligible y
volvió a sumirse en su estado casi catatónico.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">El enfermero con aspecto de carcelero nos
dijo que no era recomendable que nos quedáramos más tiempo con Todd y nos
indicó con un gesto adusto que subiéramos. Nos llevó hasta una sala de estar
donde estaba la señora que nos recibió sentada en un sillón leyendo un libro,
al vernos nos dijo que faltaba una hora para que sirvieran el almuerzo pero que
podíamos ir subiendo nuestros equipajes e instalándolos en las habitaciones del
segundo piso. El arqueólogo tenía planeado quedarse una semana pero nos dio a
elegir entre quedarnos una noche o que Julio nos lleve a la ciudad después del
almuerzo. Damon y yo decidimos quedarnos una noche para volver a ver a Todd al
día siguiente con la esperanza de hacerlo reaccionar.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">El arqueólogo y Julio tenían habitaciones
propias pues acostumbraban quedarse. La señora nos dijo que podíamos quedarnos aunque
sólo tenían habitaciones para pacientes con camas estrechas pero podíamos unir
dos… le respondimos que nos bastaba con dos colchones en el piso para no darles
molestias pero el arqueólogo le sugirió que nos instalara en “la habitación”…
la señora dudó un poco pero finalmente le indicó al enfermero con aspecto de
carcelero que nos llevara.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">El hombre, que se llamaba Alberto, nos indicó
que subiéramos la escalera y nos llevó hasta una puerta al final del pasillo,
cuando la abrió y nos hizo pasar a la habitación quedamos impactados, esperábamos
una habitación sencilla casi austera pero ésta parecía sacada de una película
de la época colonial: Una enorme cama con doseles de cortinajes de brocado
ocupaba el centro… el mobiliario lo completaban dos veladores, un ropero, una
cómoda, un tocador, dos sillones y un arcón de madera tallada. Alberto
descorrió la cortina y abrió el ventanal para airear la habitación que tenía un
intenso olor a humedad, se notaba que no la usaban con frecuencia… nos dijo que
ésa era la única habitación con una cama grande, había sido ocupada por los
abuelos y luego por los padres del actual dueño del caserón. Nos dejó para que
nos instaláramos, Damon y yo sacudimos las sábanas y colchas… luego nos
avisaron para que bajáramos a almorzar.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Durante el almuerzo la señora, que se llamaba
Francisca, nos contó una breve historia del lugar: El caserón tenía casi un
siglo de antigüedad, había sido construido por un italiano que se asentó en el
lugar con su esposa y frecuentemente hacía reuniones con sus amigos que
practicaban el espiritismo. La esposa tenía una salud muy frágil, condición que
heredaron sus hijos, la mayoría de los cuales murieron antes de llegar a
cumplir los dos años. Sólo sobrevivió una hija que luego se casó con un
comerciante y tuvieron un hijo, años después ella se suicidó ahorcándose en un
árbol de manzano que había en el huerto por motivos que nunca se aclararon… el
comerciante dejó la casa intacta bajo el cuidado de un guardián y se fue a
vivir a Lima con su hijo. Este hijo, el actual dueño del caserón, conoció al
arqueólogo y accedió cederle el caserón con la condición que mantuviera intacta
la habitación que ocuparon sus abuelos y sus padres. Nadie había dormido allí
desde ese entonces, sólo la limpiaban de vez en cuando.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Terminado el almuerzo nos invitaron a pasar
al despacho biblioteca que conservaba algunos de los muebles de época. El
arqueólogo tomó asiento en el escritorio, doña Francisca le entregó unos folders
y se sentó en una butaca, Damon y yo nos sentamos en un sofá cerca de una
ventana. Doña Francisca tomó una cajetilla de cigarros que estaba sobre una
mesita, noté sus dedos largos y nudosos, sus uñas eran muy largas y estaban
manchadas de nicotina... y llevaba un hermoso anillo de plata quemada y
turquesa en el anular. Nos ofreció un cigarro… yo acepté, Damon se negó.
Permanecimos en silencio mientras que el arqueólogo revisaba los folders, luego
nos dio un breve resumen de los casos de las personas recluidas.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Teresa era el nombre de la mujer que habíamos
escuchado sollozando. Era hija de una señora amiga de la madre de Julio. Una
vez fue de campamento al bosque de algarrobos con sus amigos y desapareció… los
amigos dijeron que ella salió de la carpa a medianoche para orinar y no
regresó, la buscaron por los alrededores hasta el amanecer, al no encontrarla
regresaron y dieron aviso a sus padres. Teresa había tenido problemas con sus
padres por causa de un muchacho pandillero con quien salía y pensaron que se
había fugado con él… investigaron al fulano pero se comprobó que él ni siquiera
había ido al campamento y que la noche en la que desapareció Teresa él había
estado en un bar con sus amigotes de la pandilla… a pesar de todo el pandillero
la quería y fue con los muchachos de su pandilla al bosque en donde la buscaron
hasta debajo de las piedras, averiguó con otros pandilleros y hasta con unos
tratantes de chicas que conocía pero no pudo ubicarla. Todos la buscaron
infructuosamente.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Unos meses después Teresa apareció en el
bosque de algarrobos en un estado lamentable, la encontraron unos turistas
quienes la llevaron a una caseta policial. Luego la llevaron a un hospital
donde los doctores la examinaron y dijeron que a la muchacha posiblemente la
habían raptado y mantenido cautivo violándola consecutivamente hasta que quedó
embarazada y le hicieron un aborto… afortunadamente físicamente estaba bien,
sólo desnutrida y obviamente traumada por la experiencia pasada. Pero la
historia que la psicóloga logró sacarle fue que había sido abducida por unos
extraterrestres de apariencia reptiliana, ellos la habían fecundado, extraído
el bebé y luego la dejaron en el bosque. La psicóloga les dijo a los padres de
Teresa que esa era su forma de asimilar el trauma y que con un tratamiento
adecuado podría recuperarse.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Pero la pobre muchacha insistía con que los
extraterrestres le habían dejado unos implantes en el cuerpo y desesperadamente
se cortaba intentando sacárselos. Fue entonces que Julio se interesó en el
caso, la llevó con un doctor de confianza y luego de hacerle varios exámenes y
unas radiografías detectaron que verdaderamente tenía un objeto extraño en un
brazo, era del tamaño de una cápsula… se lo extrajeron y luego de analizarlo
llegaron a la conclusión que la pequeña cápsula era de un metal desconocido con
un bajo nivel radioactivo.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Julio investigó y averiguó que por las fechas
en las que Teresa había desaparecido algunos pobladores de la zona habían visto
luces extrañas, incluso hasta consiguió un video grabado por un aficionado en
donde se veían unas luces que formaban un triángulo. Fue a la zona en donde
había desaparecido Teresa con un fanático ufólogo y encontraron una zona
quemada en donde no crecía la hierba y detectaron vestigios de radioactividad.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Julio le comentó el caso al arqueólogo y éste
convenció a los padres de Teresa de llevarla a un lugar donde recibiría el
tratamiento adecuado. Llevaba dos años internada allí… cuando ingresó la
alojaron en una de las habitaciones del segundo piso. Se pasaba los días viendo
las telenovelas y talkshows que trasmitían los cuatro canales de señal nacional
que eran los únicos que captaba el televisor en aquél recóndito lugar o leyendo
las novelas de moda que le traía su madre.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Parecía estar recuperándose hasta que empezó
a quejarse de terribles dolores de cabeza y terminó dándose cabezazos contra la
pared. Teresa explicó que los extraterrestres se estaban comunicando con ella y
le mostraban imágenes del mundo en el que vivían, éste era un mundo con un
sistema binario de soles y enormes pirámides escalonadas de piedra rojiza… ella
no quería ver esas imágenes y por eso se golpeaba la cabeza. Le hicieron más
pruebas y encontraron que tenía otro objeto extraño en el cerebro imposible de
retirar. También empezó a caer en unos estados de trance durante los cuales
garrapateaba fórmulas, ecuaciones de matemática avanzada y física cuántica que
luego no sabía explicar. La encerraron en la celda del sótano un par de meses
atrás cuando, sin motivo aparente, atacó a una de las enfermeras con un
tenedor.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">El arqueólogo nos preguntó nuestra opinión
sobre el caso… ¿creíamos que podría tratarse de un caso verdadero de abducción
o no?... Damon y yo nos miramos, ambos creíamos que existía vida inteligente en
otros mundos y que este mundo había sido visitado por extraterrestres… pero la
mayoría de los casos de abducciones que habíamos leído o visto en esos
documentales tan de moda en la televisión no nos convencían.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">El caso de Teresa tenía puntos a favor… al
menos no decía que había sido abducida desde su casa mientras dormía en su
cama, había sido abducida en el bosque de algarrobos, un lugar que era conocido
como escenario de sucesos sobrenaturales. Lo de la fecundación por
extraterrestres era un cliché pero había un informe médico que confirmaba que
le habían practicado un aborto… aunque tal vez Teresa estaba embarazada, se lo
dijo al tipo con quien salía, éste se negó a hacerse responsable, ella huyó, se
prostituyó, se hizo el aborto y regresó inventando lo de la abducción (aunque
era muy inocente de su parte pensar que le creerían)… pero ¿porqué inventaría
que los extraterrestres le habían puesto implantes en su cuerpo y se haría daño
por quitárselos?... tal vez por culpa y la necesidad de auto castigarse por
haber abortado… aunque le habían encontrado un objeto extraño en el brazo y
tenía otro en el cerebro, además estaban sus visiones (que describían un mundo
bastante parecido al mundo de los dos soles rojos con el que Damon y yo
habíamos soñado recientemente) y las fórmulas que garrapateaba.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">El arqueólogo prosiguió con el siguiente
caso. Mauricio era el nombre que le habían dado al hombre que habíamos
escuchado murmurando la salmodia repetitiva, lo habían encontrado vagando
desnudo en las pampas de Nazca y lo habían llevado a un hospital. El informe
del médico que lo había atendido resumía que el individuo ingresó en un estado
crítico de deshidratación y desnutrición por lo que le pusieron suero, se recuperó,
pero se negaba a consumir alimentos excepto gelatina sin saborizantes… parecía
sufrir de demencia pues solo balbuceaba palabras ininteligibles por lo que fue
derivado a un hospital psiquiátrico. No tenía documentos y no había reportes de
desaparición que coincidieran con su descripción, pero uno de los psiquiatras
se hizo cargo de su tratamiento por lo curioso de su caso.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Según el informe que les había entregado
aquél psiquiatra cuando el paciente ingresó solo repetía una extraña salmodia
en un idioma desconocido y estaba en un estado de pánico pasivo. Poco a poco se
ganó su confianza, el paciente se tranquilizó y empezó a hablar en español…
entonces le preguntó cuál era su nombre pero como le respondió con una palabra
en el idioma desconocido le dio un lápiz y un papel, el paciente escribió que
su nombre era “M4U51C10” (por lo cual empezó a llamarlo Mauricio). El paciente
aseguraba ser de otro mundo y mostraba como prueba sus manos y pies cuyos dedos
estaban unidos por una membrana de piel… sin duda era un caso de sindactilia
agudo. Como suele suceder en esos casos también tenía otros defectos congénitos
en el cráneo y la cara, lo que le daba una apariencia bastante extraña que
seguramente le había causado un trauma desde la niñez que lo había llevado a
creerse de origen extraterrestre. Sus órganos internos y su metabolismo eran
normales. Finalmente empezó a comer alimentos variados aunque rechazaba la
carne, prefiriendo las frutas y verduras crudas.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Mauricio era de carácter pacífico y
naturaleza bondadosa, se volvió bastante comunicativo y le gustaba charlar con
el psiquiatra sobre el mundo del que creía ser nativo. Lo describía como un
mundo con tecnología muy avanzada aunque carecía de atmósfera pues ésta había
sido destruida hace mucho tiempo atrás por un desastre de origen desconocido
pero había domos que cubrían algunas zonas haciéndolas habitables
defendiéndolas de la radiación del sol rojo. Era gobernado por una élite de
seres superiores a los que describía como unos humanoides altos, sin cabello,
ojos negros sin pupilas y piel fosforescente. Decía que él era de la raza
nativa de aquél mundo y explicaba que siglos atrás, cuando sucedió aquél
desastre que destruyó la atmósfera, llegaron esos seres superiores en naves
espaciales y los salvaron construyendo los domos… desde entonces los de su raza
los habían reverenciado casi como dioses.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">El era un obrero que trabajaba en las minas
de donde extraían el mineral que servía para hacer funcionar las máquinas y
naves espaciales. Lo que sorprendía al psiquiatra era el conocimiento que tenía
Mauricio, un hombre aparentemente de origen humilde y que no había tenido
acceso a mucha educación ya que sus padres no lo habían tratado del defecto
congénito con el que había nacido, sobre las máquinas y naves espaciales que
describía.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Contaba que a pesar de que aquellos seres
superiores casi habían esclavizado a los de su raza no eran malvados ni
crueles. Los de su raza eran tratados bien, vivían en lo que describió como un
complejo de edificios rectangulares de paredes metálicas divididos en celdas,
los hombres eran obreros y las mujeres eran destinadas a la reproducción que
era por vía artificial y a la crianza de aquellos hijos. Tenían un horario de
trabajo estricto pero la vida era llevadera, hasta les permitían seguir con
algunas de sus costumbres y tradiciones.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Un día aciago el Sumo Sacerdote de los seres
superiores anunció un terrible evento interestelar que abriría una puerta
dimensional por la cual regresarían los Dioses sin Nombre trayendo la
destrucción… entonces aquellos seres superiores empezaron a sacrificar a los de
su raza en un intento de calmar la ira y el hambre de los Dioses sin Nombre.
Todos los días hacían ceremonias en las que el Sumo Sacerdote recitaba una
plegaria mientras que decenas de la gente de su raza eran obligados a entrar a unos
hornos gigantescos.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Mauricio y otros obreros robaron lo que
describió como unos trajes que protegían de la radiación y daban mantenimiento
vital fuera de los domos protectores y huyeron. Llegaron hasta unas ruinas
milenarias que según las leyendas de la gente de su raza habían sido
construidas por los Dioses Olvidados, un portal de piedra y una estela con
jeroglíficos aún se mantenían en pie, si las leyendas que contaba el anciano chamán
de su gente eran ciertas ese portal los llevaría a otro mundo… pero sus compañeros dudaban y no quisieron
cruzar.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Mauricio, quien era aprendiz del chamán,
descifró algunos de los jeroglíficos grabados en la estela de piedra, narraban
la historia de los Dioses Olvidados que conocían un ritual para confinar a los
Dioses sin Nombre en una prisión mística… éste era un ritual que sólo podía ser
realizado por los hijos de aquellos Dioses Olvidados. La energía de los trajes
que les daba soporte vital se agotaba, entonces él prefirió arriesgarse antes
de morir y cruzó el portal… de allí sólo recordaba haberse despertado en una
especie de pozo con una escalinata de piedra tallada, subió por ésta y se
encontró en un desierto bajo un límpido cielo azul… el traje ya no le servía y
se lo quitó… entonces vagó sin rumbo hasta que lo encontraron unos hombres.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Mauricio empezó a trabajar haciendo labores
de limpieza en el hospital psiquiátrico. Según el psiquiatra mostraba una
increíble adaptación al “mundo al que había llegado cruzando el portal”, su
demencia era inofensiva y si le hacía feliz creerse extraterrestre no tenía
motivos inmediatos para forzarlo a enfrentarse con la realidad… mas bien lo
incentivaba a escribir sobre su mundo y la maravillosa tecnología de los seres
superiores. Tuvo la idea de entregarle a Mauricio algunos libros de medicina
que trataban de malformaciones congénitas como la que él sufría y otros de
relatos de ciencia ficción parecidos a lo que él contaba con la intención de
que poco a poco reconociera su realidad pero fue contraproducente. Mauricio se
ensimismó demasiado en la lectura, cayó en un estado febril y empezó a delirar…
decía que los Dioses sin Nombre vendrían a este mundo, que él había descifrado
las señales inequívocas de su retorno y que tenía que encontrar a los hijos de
los Dioses Olvidados.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Días después un terremoto destruyó la ciudad
de Pisco y el hospital psiquiátrico quedó en ruinas. La mayoría de los
pacientes fueron trasladados a otros centros de salud mental pero el psiquiatra
quiso quedarse con Mauricio pues se sentía responsable por él y le interesaba
mucho su caso. Lo había observado por mas de cinco años, sabía que era
perfectamente controlable y su demencia no representaba un peligro tácito para
la población… al contrario, Mauricio demostró tener cierta intuición o sexto
sentido para ubicar a muchos heridos enterrados bajo los escombros.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Fue entonces que la casualidad quiso que Todd
y Bartholomew fueran a Pisco como voluntarios para construir casas para los
damnificados… escucharon el peculiar caso del “extraterrestre” que había ayudado
a rescatar a varias personas gracias a un sexto sentido para encontrar heridos
bajo los escombros y sintieron curiosidad de conocerlo. Luego de conocer los
detalles de su caso Todd contactó de inmediato con el arqueólogo quien se
comunicó con el psiquiatra que cuidaba de Mauricio y le dijo que tenían un
lugar en donde podían hacerse cargo de él.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Mauricio llevaba allí varios años, desde que
ingresó demostró ser muy comedido y agradecido, se encargaba de la limpieza y
hasta se hizo cargo de cuidar a varios perros callejeros… pero hacía un par de
años había recaído en ese estado febril, empezó a garrapatear símbolos en un
cuaderno y a recitar esa extraña salmodia en un idioma desconocido. Una noche
de luna llena mató a sus perros intentando hacer un ritual invocando a los
Dioses Olvidados, le administraron sedantes y lo recluyeron bajo llave en su
habitación del segundo piso… lo encerraron en la celda del sótano por atacar a
mordiscos a Alberto cuando éste quiso obligarlo a tomar su medicina.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">El caso de Mauricio era fascinante, fuera su
historia real o producto de su mente desquiciada. El arqueólogo nos preguntó:
“¿Qué opinan, Mauricio vino de otro mundo a través de un portal o es un
chiflado con una imaginación asombrosa?... en ese caso ustedes son un par de
locos porque también son de otro mundo”.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Nos reímos… Damon y yo le respondimos que
efectivamente no éramos nativos de éste mundo pero no decíamos haber venido
cruzando un portal, éramos almas viejas y errantes nativas de un mundo azul y en
ésta vida habíamos nacido en éste mundo… pero el viajar de un mundo a otro a
través de portales no era extraño para nosotros, lo recordábamos de muchas
vidas pasadas… volvimos a reírnos, la explicación que estábamos dándole al
arqueólogo era como para ganarnos estadía indefinida en una celda en el sótano…
al lado de la que se merecía él por su teoría más disparatada que la de los
alienígenas ancestrales.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">El siguiente caso se trataba de un licántropo
tal como Damon y yo lo suponíamos por los aullidos y gruñidos que habíamos
escuchado. El arqueólogo nos contó el caso de José Luis, un mexicano que sufría
de hipertricosis y había llegado hace muchos años atrás a Perú como parte de un
circo en donde se presentaba como un hombre lobo. Yo recordé la publicidad de aquel
circo. José Luis sabía que su condición se debía a una enfermedad y simplemente
le sacaba provecho. Hicieron varias presentaciones en el país. En Trujillo
conoció a una mujer, se enamoraron, él dejó el circo y se casaron. Durante años
vivió feliz con su esposa trabajando como mecánico y tuvieron dos hijos que
afortunadamente no heredaron su enfermedad.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Era un hombre muy querido por sus vecinos,
bromeaba diciendo que las noches de luna llena sentía que su sangre hervía y se
iba a tomar unos tragos con sus amigos al billar. Su esposa no se preocupaba
que se fuera de juerga cada noche de luna llena y regresara ebrio al día
siguiente, era una vez al mes, él era un hombre trabajador y tenía derecho a
divertirse. Hasta que empezó a notar un cambio en el carácter en su esposo,
cuando se acercaba la luna llena se ponía nervioso y malhumorado… se iba de
juerga y regresaba al día siguiente muy sucio.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Entonces ella empezó a averiguar con los
amigos de su esposo, ellos le dijeron que él iba al billar, tomaba un par de
tragos y se iba... sin embargo regresaba a su casa al día siguiente. Su esposa
sospechó que tenía una amante, así que le pidió a su hermano que lo siguiera…
lo que contó el hermano era digno de una película de terror. El hermano esperó
que José Luis saliera del billar y subiera a su camión… lo siguió en su carro y
lo vio detenerse en una calle de mala reputación en donde recogió a una
prostituta y con ella se dirigió a un descampado.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">El hermano decidió acercarse al camión para
enfrentar a su cuñado… pero entonces la prostituta se bajó precipitadamente del
camión, semidesnuda y pidiendo socorro a gritos… José Luis bajó tras ella
persiguiéndola, le dio alcance, la tumbó sobre el suelo y empezó a atacarla
brutalmente a mordiscos. El hermano de la esposa de José Luis tomó una
herramienta que llevaba en su carro y se acercó para auxiliar a la pobre
mujerzuela… José Luis huyó hacia el descampado.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Encontraron a José Luis dos días después
completamente loco creyéndose verdaderamente un hombre lobo, necesitaron ayuda
de la policía para capturarlo. El caso corrió de boca en boca, tenían a José
Luis encerrado en una carceleta de la comisaría sin saber que hacer con él,
dudando entre llevarlo a prisión o a un hospital psiquiátrico. El arqueólogo se
enteró del caso e hizo los papeleos para trasladar a José Luis al caserón. Se
encontraba allí hace un año.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Había más pacientes en las habitaciones del
segundo piso pero eran tranquilos. Una anciana que habían recogido mendigando
en la plaza y decía ser la reencarnación de una sacerdotisa mochica, Todd la
recogió mas por humanidad para darle un techo seguro y comida… pero hablando
con la anciana había descubierto que era una mujer muy sabia y era muy
interesante conversar con ella.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Había otra mujer que era otro supuesto caso
de abducción y un hombre autista con obsesión por los rompecabezas y la cábala.
Reconocimos que todos éramos unos chiflados (¿o iluminados?) lo único que hacía
la diferencia que estuviéramos sentados allí y no encerrados en una celda del
sótano era que todavía no le habíamos hecho daño a otros… Todd había cruzado esa
línea.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">El arqueólogo nos dijo que ya tenía algunas
sospechas con Todd por aquellos incidentes con sus amigos que había llevado a
su habitación y con los que supuestamente se les había pasado la mano en
sesiones de BDSM… había querido creer que verdaderamente esos accidentes habían
sido consecuencia de exceso de drogas y alcohol hasta el incidente sucedido con
nosotros. Le debía al tío de Todd hacerse cargo de él y así lo haría… y
nosotros le ofrecimos nuestro apoyo.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Durante la cena conocimos a doña Teodora, la
anciana que Todd había recogido mendigando en la plaza. Era una anciana pequeña
y encorvada, de rostro afable y muy humilde pero la sabiduría ancestral se
reflejaba en su mirada… desde el primer momento no dejó de mirarnos a Damon y a
mi como si quisiera decirnos algo.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">En el caserón también se encontraba el padre
Miguel, un sacerdote español renegado de la iglesia católica que se hacía cargo
de los casos de supuesta posesión diabólica y realizaba exorcismos sin el
permiso del Vaticano, yo lo había conocido años atrás la primera vez que viajé
al norte con Luis cuando fuimos al Museo para conversar con el arqueólogo… en ése
momento se encontraba recluido como paciente en una celda ubicada debajo de la
pérgola del jardín después de ofrecerse como receptáculo y prisión de un
demonio que había poseído a un inocente niño… su historia es muy interesante
pero larga de contar y no viene mucho al caso de éste resumen, aunque para los
que deseen conocerla podrán encontrarla relatada en una entrada de mi blog.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Para no alargar mucho este resumen diré que
el padre Miguel logró liberarse del poder de ese demonio (o recuperarse de su
episodio de esquizofrenia) el asunto es que se recuperó y volvió a hacerse
cargo de los casos de supuesta posesión diabólica que extrañamente habían
aumentado. También añadiré que, antes de regresar a Lima, Damon y yo pedimos
permiso a doña Francisca para visitar a Mauricio en su celda y ella accedió… efectivamente
su aspecto físico era peculiar pero explicable con los síntomas de su condición
de sufrir de sindactilia aguda. Mauricio nos recibió amablemente, nos dijo que
había estado esperándonos y nos entregó el cuaderno donde había escrito sus
visiones y las señales que había vislumbrado sobre el inequívoco retorno de los
Dioses Olvidados. Todd también se recuperó y volvió a sus actividades
cotidianas como ayudante del arqueólogo en el Museo.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Y así pasaron dos años hasta que Damon y yo volvimos
a viajar y visitamos a nuestro amigo el arqueólogo en el Museo. Es aquí donde
comienza el relato que deseo contarles. Durante la cena nuestra curiosidad nos
llevó a preguntarle al arqueólogo por el estado de los peculiares pacientes del
caserón, entonces él nos contó que un par de meses después de nuestra visita al
lugar había sucedido un incidente muy trágico.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">El arqueólogo no conocía los detalles del
lamentable incidente porque se encontraba en el Museo cuando sucedió. Julio se
había quedado con los pacientes especialmente para seguir el caso de Mauricio
quien mostró una notable mejoría después de hablar con nosotros, lo trasladaron
a una de las habitaciones del segundo piso y volvió a hacerse cargo de dos
perros callejeros. En general todos los pacientes mostraban una mejoría
incluidos el hombre licántropo a quien algunas noches sin luna le permitían
salir a tomar aire en el patio y preguntaba por su esposa e hijos. Teresa ya no
sufría de aquellos delirios que la atormentaban y la llevaban a lastimarse,
estaba atravesando una fase de locura pasiva y le contaba muy entusiasmada a
las enfermeras que en sus sueños era visitada por un alien muy amable y
caballeroso al que describía bastante parecido a los wraiths de la serie
Stargate Atlantis y que éste le decía que la había elegido para que sea su
mujer y que muy pronto vendría a llevársela en su nave y recorrerían juntos el
cosmos.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">La casa de la locura se había convertido en
el hogar de unos locos felices… hasta que sucedió aquél fatídico incidente. Según
lo que posteriormente le contaron el padre Miguel y el enfermero Alberto una
noche hubo un incendio de origen misterioso, doña Francisca falleció victima
del fuego en su habitación, esa misma noche Mauricio huyó del caserón, Teresa
desapareció de su celda cerrada sin explicación razonable y Julio, quien había
ido tras Mauricio, fue encontrado unos días después más allá de los bosques de
algarrobos en una zona quemada en donde no crecía la hierba en un estado de
shock tan grave que se habían visto en la necesidad de confinarlo en una de las
celdas del sótano… el arqueólogo no ahondó más en el tema pero nos ofreció
llevarnos al caserón para que el padre Miguel, quien ahora se encontraba dirigiendo
el caserón y haciéndose cargo de los pacientes, nos contara con detalles lo
sucedido.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Al día siguiente fuimos al caserón con el
arqueólogo. El aspecto del caserón no había cambiado mucho a pesar del incendio
pero la pérgola del patio trasero no existía y el jardín era un terreno yermo y
quemado en el que no crecían ni las hierbas silvestres. El padre Miguel nos
recibió en la biblioteca y nos contó los detalles del fatal incidente ocurrido
a finales del 2012. En aquellos días los pacientes que por dos meses habían
mostrado una notable mejoría empezaron a alterarse por la profecía maya del fin
del mundo, ellos habían intentado calmarlos diciéndoles que la profecía no
hablaba del fin del mundo sino del fin de una era marcada por la violencia y el
comienzo de otra era más próspera y afortunada. El día 21 de diciembre doña
Francisca sugirió preparar una cena para celebrar el Solsticio y alegrar a los
pacientes, hicieron una parrillada en el patio trasero del caserón y llamaron a
un chamán del pueblo quien hizo un ritual de florecimiento. El personal y los
pacientes participaron de la cena y disfrutaron de un agradable momento. El padre
Miguel reconoció que el chapucero ritual del chamán contribuyó bastante en
sosegar los ánimos alterados de los pacientes. La mas entusiasta fue Teresa
quien se hizo una corona de flores y le anunció a todos que esa noche su galán
extraterrestre vendría por ella.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Luego llevaron a los pacientes a sus respectivas
habitaciones y celdas de confinamiento, después el personal continuó con la
celebración tomando vino en la biblioteca y pasada la medianoche se retiraron a
descansar en sus respectivas habitaciones del segundo piso. El se acercó a la ventana
para cerrar la cortina antes de irse a la cama y entonces vio a Mauricio cruzando
rastreramente el patio trasero con el claro propósito de escaparse, de
inmediato le dio aviso a Julio y al enfermero Alberto quienes fueron tras
Mauricio quien ya había conseguido escalar el muro de piedra y se dirigía
corriendo velozmente hacia el bosque de algarrobos.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">El padre Miguel regresó al caserón, revisó a
los demás pacientes del segundo piso y para prevenir otra fuga cerró con llave
las puertas de sus habitaciones. No revisó a los pacientes recluidos en el
sótano pues Alberto se había encargado de llevarlos y encerrarlos en sus
celdas. Después fue a la biblioteca para llamar por teléfono al jefe de los ronderos
para pedirle apoyo en la búsqueda de Mauricio pero la línea telefónica estaba
averiada, solo se escuchaba un sonido de interferencia… entonces sintió un
extraño temblor semejante a la onda expansiva de una explosión pero sin ruido y
a través de las cortinas de la ventana vio un gran resplandor fosforescente que
lo encegueció y cayó desvanecido en el suelo.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Cuando se recuperó y pudo ponerse de pie salió
al patio trasero para averiguar el origen de aquel extraño resplandor fosforescente
que había visto a través de las cortinas de la ventana y encontró la pérgola ardiendo
en llamas… pero ése no era el extraño resplandor fosforescente que él había
vislumbrado antes de desmayarse, el fuego que consumía la pérgola era de un peculiar
color azulado y empezó a extenderse rápidamente por los matorrales del jardín… de
inmediato tomó la manguera para apagar el fuego con la ayuda de dos enfermeras
que también se habían percatado del incendio y acudieron a auxiliarlo pero el
fuego se resistía al agua y las llamas crepitaban tomando formas malignas y
parecían sisear una maldición en el lenguaje del Diablo… entonces él recordó
que bajo ésa pérgola se encontraba la celda donde estuvo recluido durante el
tiempo que se ofreció a ser el receptáculo de un demonio y dedujo que el
demonio se había quedado prisionero en aquella celda protegida por los símbolos
cabalísticos tallados en el techo de madera de la pérgola que estaba siendo
destruida por ése fuego… empuñó su rosario, recitó una plegaria y el fuego infernal
empezó a disminuir.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Ni bien habían controlado el fuego y se
tomaban un minuto de descanso una de las ventanas del segundo piso de la casona,
la correspondiente a la habitación que ocupaba doña Francisca, estalló… él vio
las llamaradas, también de un color azulado, saliendo por la ventana… dejó a
las enfermeras haciéndose cargo de lo que quedaba del incendio del patio trasero
y volvió a la casona para auxiliar a doña Francisca y poner a salvo a los
pacientes que estaban encerrados con llave en sus habitaciones del segundo piso
y a los que se encontraban recluidos en el sótano.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Cuando llegó a la habitación de doña
Francisca y abrió la puerta recibió una gran bocanada de humo con olor a azufre
y supo que era imposible que ella estuviera viva en medio de ése horno infernal
de malignas llamaradas azules que crepitaban y parecían sisear maldiciones… sólo
atinó a arrojar su rosario al fuego y murmurar una plegaria por el alma de doña
Francisca, entonces una lengua de fuego se alzó como si tuviera vida propia, lo
alcanzó y prendió su sotana, él se la arrancó y la pisoteó… de inmediato se
apresuró a liberar y poner a salvo a los aterrados pacientes del segundo piso y
luego regresó por los pacientes que estaban recluidos en el sótano. Liberó al
hombre licántropo quien aullaba terriblemente y salió corriendo hacia el patio ni
bien abrió su celda, luego abrió la celda donde se encontraba Teresa pero la
encontró inexplicablemente vacía y envuelta en un extraño resplandor
fosforescente, el mismo resplandor que él había vislumbrado a través de las
cortinas de la ventana de la biblioteca a la par que fue golpeado por esa onda
expansiva sin sonido… sólo quedaba la corona de flores de la muchacha sobre la
cama… en ése momento no pudo razonar y corrió velozmente a la biblioteca para
rescatar los documentos importantes seguro que el caserón terminaría convertido
en cenizas por el fuego infernal… luego salió al patio y reunió a los pacientes.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Extrañamente el incendio del caserón no se
propagó, se consumió a si mismo y afectó solo la habitación de doña Francisca. Al
amanecer llegaron los ronderos y les ayudaron a limpiar los escombros. Cuando
subieron y entraron a la habitación de doña Francisca encontraron su cuerpo
completamente calcinado sobre los restos quemados de su cama de madera en una
postura que indicaba que ni había intentado levantarse mientras se quemaba, pero
su brazo y su mano derecha, donde llevaba su anillo de plata con una turquesa,
estaban intactos… ni siquiera sus largas uñas amarillentas por la nicotina se
habían quemado.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Según las investigaciones que hicieron los ronderos
el incendio del patio trasero se había iniciado por un carbón mal apagado de la
parrilla sobre la que habían caído algunas hojas secas de las enredaderas de la
pérgola y el fuego en la habitación de doña Francisca había sido causado por un
cigarro que ella había estado fumando en su cama cuando se quedó dormida y las favilas habían caído sobre las colchas…
la explicación era razonable pero ellos no habían visto que en ambos fuegos las
llamaradas eran de un peculiar color azulado.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">En la mañana regresó Alberto cojeando y con
un feo golpe en el pómulo, según lo que contó Julio y él lograron darle alcance
a Mauricio y él consiguió someterlo pero Mauricio se resistió con una fuerza
sobrehumana balbuceando que “los seres superiores estaban esperándolo en el
bosque de algarrobos”… logró zafarse, le dio un brutal puñetazo en la cara y
huyó… al intentar ir tras él se tropezó con una rama saliente, se torció el
tobillo y Julio fue tras Mauricio. Los ronderos fueron a buscar a Julio y
Mauricio, regresaron al atardecer trayendo a Julio en un estado de shock muy
grave… lo habían encontrado en el bosque de algarrobos en una zona de terreno
baldío que parecía quemado balbuceando incoherencias sobre una nave espacial
que había aterrizado en aquel lugar y sobre unos extraterrestres de aspecto humanoide
altos, sin cabello, ojos negros sin pupilas y piel fosforescente que se habían
llevado a Mauricio.</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Damon y yo intercambiamos miradas… ¿Teresa
había sido abducida de su celda cerrada por su galán extraterrestre?... ¿los
seres superiores se habían llevado a Mauricio en una nave espacial?... ¿un
demonio había causado el incendio de la pérgola para huir de su prisión y luego
había intentado apoderarse del cuerpo de doña Francisca y al no conseguirlo la
había matado… o ésta había muerto en un extraño episodio de combustión
espontánea?</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">El padre Miguel nos sirvió dos copas de pisco
y nos ofreció unos cigarros, yo acepté uno, Damon rechazó su ofrecimiento educadamente…
el padre Miguel me ofreció fuego, noté con cierto sobresalto que la llama que
producía el encendedor era azulada. Miré los ojos del sacerdote renegado,
aquellos ojos oscuros de mirada profunda que hacían que me pareciera la viva
imagen del seminarista de los ojos negros y demoré mi mano sobre la suya que
sujetaba el encendedor más tiempo del necesario mientras encendía mi cigarro…
Damon protestó por eso… el padre Miguel le devolvió una pícara sonrisa, la
misma que años atrás había causado los celos de Luis y le hizo una propuesta
indecorosa… los tres nos reímos.</div> </span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Tomé una de las botellas de macerado de pisco
que el arqueólogo guardaba en el armario y serví tres vasos, el alcohol ayudaría
a convencer a Damon de aceptar la picaresca propuesta del sacerdote renegado…
no viene al caso que cuente con detalles lo que hicimos esa noche, el lector
seguramente lo imagina. Me desperté antes de que rayara el alba y fui al baño,
luego me senté en un sofá y encendí un cigarro mientras observaba a Damon y al
padre Miguel durmiendo en la cama. Damon se despertó y con un gesto somnoliento
me indicó que el olor del humo le molestaba… abrí la ventana para airear el
ambiente… entonces me pareció ver una
sombra azulosa arrastrándose en el terreno yermo del jardín hasta el lugar que
había ocupado la pérgola y desaparecer en la ergástula que ahora era un
depósito de desechos… ¿sería el demonio regresando a su madriguera?</div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES-MX"><div style="text-align: justify;">Nota final: Ha pasado un año más de aquella
visita… algunas veces pienso en los extraños sucesos de la casa de la locura,
luego fumo un cigarro y me alzo de hombros… hay cosas que no tienen una
explicación razonable y no es prudente seguir indagando.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><b>Liliana Celeste Flores Vega - 2015</b></div><div style="text-align: justify;">Imagen: Google</div></span></span></div>
Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-2307924220144669302021-06-30T21:40:00.001-05:002021-06-30T22:34:43.374-05:00La Lechuza en el Laberinto<div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjGsEiBqUu_WgxGbdqszzbci1TW1Qp4s4dnEIcAIzfPbNbZOZGuorudQKOphDd72VCGAa6CbiWBdWFd9Tqt3eqhNTHzbGd3H3tp6W-LFi9ma368T77YyGxfNNQr0kuzR83O3-iiJHMmdYg/s480/00+la+lechuza+en+el+laberinto.jpg" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="479" data-original-width="480" height="319" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjGsEiBqUu_WgxGbdqszzbci1TW1Qp4s4dnEIcAIzfPbNbZOZGuorudQKOphDd72VCGAa6CbiWBdWFd9Tqt3eqhNTHzbGd3H3tp6W-LFi9ma368T77YyGxfNNQr0kuzR83O3-iiJHMmdYg/w320-h319/00+la+lechuza+en+el+laberinto.jpg" width="320" /></a></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: inherit;">LA LECHUZA EN EL LABERINTO</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: inherit;">Novela de fantasía onírica y erótica.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: inherit;"><br /></span></div></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">Ya ha pasado un año
desde cuando Lucipher se marchó para cumplir con la profecía que decía que su
destino era sentarse en el Trono Dorado y gobernar sobre el Universo, nadie nos
dijo que su magnífico reinado duraría una eternidad efímera. Cumpliendo esa engañosa
profecía se inmolaron múltiples Soles. Y yo, Lilith, la Luna azul, quedé viuda…
perdí al que fue mi hermano y mi esposo, perdí la luz que me iluminaba y me
hacía brillar en el cielo nocturno. Y siento la pérdida… me falta su cálido
aliento, su amor, su pasión y su deseo. <o:p></o:p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><br /></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;">CAPÍTULOS</p></span></div><div style="text-align: left;"><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2021/04/tienes-que-ser-el-hombre-que-ella-desea.html">Tienes que ser el hombre que ella desea</a></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><div>Estrella y Lucero</div><div><br /></div><div>Serás Luzbel</div><div><span style="font-family: inherit;"><br /></span></div><div><span style="font-family: inherit;">Cenizas</span></div><div><span style="font-family: inherit;"><br /></span></div></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2021/04/cuando-la-luna-necesita-un-abrazo-de.html">Cuando la luna necesita un abrazo de sombras</a></span></div><div style="text-align: left;"><br /></div><div style="text-align: left;"><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2021/04/en-alas-del-deseo.html">En alas del deseo</a></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;">El seductor de sirenas</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;">Las cadenas de la luna</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;">El retorno de Pendragon</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;">Tinuviel</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;">Es un anhelo</span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;">Los funerales del Sol</span></div><div style="text-align: left;"><br /></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2021/04/una-caida-fantaso.html">Una caída a Fantaso</a></span></div><div style="text-align: left;"><br /></div><div style="text-align: left;">Morrigan</div><div style="text-align: left;"><br /></div><div style="text-align: left;">Excalibur</div><div style="text-align: left;"><br /></div><div style="text-align: left;">Los hijos del Jaguar</div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2021/05/otra-visita-fantaso.html">Otra visita a Fantaso</a></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><br /></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: inherit;"><br /></span></div>Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-64896739821825865792021-06-18T21:36:00.005-05:002021-06-18T21:38:27.522-05:00Memorias de un harén<p style="text-align: justify;"></p><div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjbMNREhOCCrnoKL1lPkhQUSWugEPp92XQYLfcxEzghkfzUzl7YD2warcz0iOFXMgXWV6wHDG3oI27O4o4h0dfE5XDVAVe8ymcGSZqJulznkV36LtnUvIX7bMWwoEbVq2cumoRELjua7qI/s912/05+memorias.jpg" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="912" data-original-width="876" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjbMNREhOCCrnoKL1lPkhQUSWugEPp92XQYLfcxEzghkfzUzl7YD2warcz0iOFXMgXWV6wHDG3oI27O4o4h0dfE5XDVAVe8ymcGSZqJulznkV36LtnUvIX7bMWwoEbVq2cumoRELjua7qI/w384-h400/05+memorias.jpg" width="384" /></a></div><div style="text-align: justify;">Lucía era una flor rara arrancada de tierras lejanas y
plantada en un invernadero oriental pero nunca quiso contarme de dónde venía ni
como había llegado al harén… nunca hablaba de su infancia. Compartíamos una
habitación del serrallo y dormíamos juntas sobre una mullida alfombra entre
almohadones de terciopelo… mudos testigos de inocentes caricias que
compartíamos en silencio mientras nos dejábamos envolver por las volutas de
incienso.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Cuando el amo llamaba a una de nosotras a su alcoba la otra
se quedaba como una felina enjaulada dando vueltas en aquella celda de
terciopelo y oro… cuando una volvía la otra no le decía nada, ya tenía
preparada la tinaja llena de agua tibia y aceite de benjuí… una se despojaba de
la bata y de inmediato se metía a la tinaja mientras la otra tomaba la esponja
y le refregaba el cuerpo quitándole de la piel el olor de aquél hombre moreno y
sádico, borrando esos besos y caricias infames.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Lucía olía a harén, en los momentos tristes la abrazaba y me
embriagaba con el perfume de rosa y bergamota que yacía en su cuello delgado y
grácil… no podía evitar que mis labios se deslizaran por su piel tersa y
bronceada… entonces ella reía y su risa era un arpegio como una cascada de oro…
ella me besaba en la boca, miel y naranjas era el sabor que tenía su paladar… y
éramos felices en ése infierno.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Me gustaba verla despertarse cada mañana estirándose como
una felina, me deleitaba contemplando sus pechos generosos, su cintura estrecha
y sus caderas cinceladas… Lucía tenía el sol en la piel y el cielo azul en la
mirada. Me gustaba cepillar su cabello dorado que desprendía aroma de patchulí…
y ella se convirtió en mi todo en medio de la nada.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><b><div style="text-align: justify;"><b>Liliana Celeste Flores Vega (Lileth) - 2015</b></div></b><div style="text-align: justify;">Imagen: Dibujo Fee Absinthe</div></div><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p>
<p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><div style="text-align: justify;"><br /></div><p></p>Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-2164944167006305512021-06-16T19:34:00.000-05:002021-06-18T20:21:34.211-05:00Bardo<div style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiAaStUKap2QZh4vevilDEmvSnpY5hSF2KHvHQ9-1krfaOl4GKFnHg3CdrPE4_-9wHOqr7VQEKoi5JeNA3riz-Lzm7bdaL5UfpaWyA0Vn9eq-sJXCvI11MeSG4gKSLG3Rjq5JoCKtoaUoo/s500/04+bardo.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="334" data-original-width="500" height="268" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiAaStUKap2QZh4vevilDEmvSnpY5hSF2KHvHQ9-1krfaOl4GKFnHg3CdrPE4_-9wHOqr7VQEKoi5JeNA3riz-Lzm7bdaL5UfpaWyA0Vn9eq-sJXCvI11MeSG4gKSLG3Rjq5JoCKtoaUoo/w400-h268/04+bardo.jpg" width="400" /></a></div>Lo conocí una tarde, en una de mis infantiles
correrías buscando la tierra de las leyendas. Sus azules ojos de poeta
presagiaban las tristezas que cantaría su arpa de viento en las madrugadas
inciertas de amores. Yo me había escapado del Palacio de Invierno, cansada de
fregar pisos de día y vestir seda de noche, tomé un atado de ropas y hui, allende
hacia las tierras de occidente donde decían que existían ricas y soleadas
viñas.<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><o:p> <br /></o:p></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;">Cansada de caminar toda una jornada, me senté en la
hierba para comer unos panecillos de manteca mientras pensaba si aventurarme
caminando durante la noche o esperar la caravana de los elfos y pedirles
amparo. Entonces escuché los cascos de un caballo quebrando la seca hojarasca, me
puse de pie y sacudí mis ropas aldeanas, decidida a pedirle a un elfo que me
llevara con él como sierva en las tierras de la bella gente que todo era
preferible a seguir siendo cortesana.<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><o:p> <br /></o:p></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;">Blanco era el esbelto corcel, lujosos los arreos y
el joven que lo montaba, aunque no era un elfo, era tan hermoso como ellos: Ropajes
de príncipe, rubios los cabellos, azul la mirada y una infinita tristeza
nublando su alma. Se apeó como todo un caballero, hizo una reverencia y me
preguntó si yo era un hada, negué con la cabeza, sorprendida de que llevando tan
humildes ropajes de aldeana, me confundiera con una grácil criatura encantada.<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><o:p> <br /></o:p></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;">Le dije que era huérfana y que me encontraba
desamparada, me ofreció llevarme al palacio de su padre y me ayudó a montar a
la grupa de su caballo. Bendecía mi suerte soñada cuando tras de nosotros rugió
el cuerno y un tropel nos alcanzaba. Ebiliss, jinete en brioso corcel negro, desmintió
mi pobreza y diciendo que yo era una princesa un poco tronada de la cabeza, refrenó
la brida del blanco corcel, me obligó a apearme y a regresar con él. Asiéndome
a la capa de Ebiliss, regresé al Palacio de Invierno con mis sueños rotos mientras
que el joven príncipe, desconcertado por tan extraño encuentro se debatía entre
una interrogante y una sonrisa.<br /> </span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><o:p> <br /></o:p></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;">Noches más tarde, resignada a mi destino, me
arreglaba frente al espejo pues Aradia me había dicho que un noble capitán
había solicitado mis servicios para su joven hijo que muy pronto se iba casar, terminé
mi tocado y bajé al salón. Adramelech me esperaba al pie de la escalera, me
tomó de la mano y me llevó a la mesa donde el noble capitán y su hijo
esperaban... aquél joven que estupefacto me clavaba su azul mirada era el joven
príncipe del blanco corcel.<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><o:p> <br /></o:p></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;">El noble capitán jaló la silla y me invitó a
sentarme, sonrió y nos dejó solos en la mesa acompañados por una botella de
champagne, haciendo alarde de mi sangre fría serví las copas intentando que las
manos no me temblaran. El joven príncipe debió de atar cabos y comprender
inmediatamente los motivos de la princesa fugitiva, pero mi dignidad se puso
careta de desmemoriada y lo invité a subir a la alcoba.<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><o:p> <br /></o:p></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;">La alcoba convidaba a la molicie, amplio y mullido
el lecho de doseles, los pebeteros suspiraban volutas azuladas de embriagadoras
fragancias y las velas dibujan claroscuros mientras que yo me desvestía tras el
biombo. Aligerada de ropajes, desvestida a medias me acerqué a él, quien
hundido entre los almohadones del lecho más parecía una víctima en el cadalso que
debutante de los placeres carnales por los que su padre había pagado con
diamantes.<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><o:p> <br /></o:p></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;">Y mis manos se deslizaron suavemente al desvestirlo,
desnudos los dos, sentados en el lecho, él se limitaba a acariciar mis rizos
con embeleso, sus ojos azules no se atrevían a recorrer la desnudez de mi
cuerpo velados por sus pestañas con gotas de rocío. No pude sostener por más
tiempo mi careta de carnaval y las lágrimas corrieron por mis mejillas, entonces
él me abrazó rompiendo también en llanto, con el abrazo nuestros pechos se
unieron y nos arrastró un mar de besos y caricias azules.<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><o:p> <br /></o:p></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;">Sin palabras fue nuestro juramento de amarnos, pues
el amor no las necesita cuando se expresa con el silencio de dos almas
enamoradas, el inexperto en lujuria me enseñó con su inocencia la ciencia
sagrada de hacer el amor. En la alborada, confundidos aún en un solo latido nuestros
corazones, me confesó que él no quería casarse ni seguir la carrera de las
armas como lo pretendía su padre, que había nacido bardo… ¡y que solo deseaba
ser un poeta!</span></div><div style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><b>Liliana Celeste Flores Vega - mayo 2015<br /></b></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;">Imagen: Pixabay</span></div>
Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-74592382806178490952021-06-11T20:43:00.002-05:002023-02-15T16:35:13.665-05:00Vándalo<div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Bookman Old Style", serif; text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgTfjlFfCK9-WgdfHbYcdh_cIlJhvEeOFFh9PMvHsqFkYeIfp_WTmlWersWgLK0TjnkODyXD6xqK10vWoOFUiYkwJYiRJL1QB1t4nsolO0kI1-F3WT7UtKISZsjiJ-kpbmyzTud27afd0A/s640/03+vandalo.jpg" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="640" data-original-width="640" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgTfjlFfCK9-WgdfHbYcdh_cIlJhvEeOFFh9PMvHsqFkYeIfp_WTmlWersWgLK0TjnkODyXD6xqK10vWoOFUiYkwJYiRJL1QB1t4nsolO0kI1-F3WT7UtKISZsjiJ-kpbmyzTud27afd0A/w400-h400/03+vandalo.jpg" width="400" /></a></div>Rojos como el fuego sus desgreñados cabellos, azules
como el cielo sus vivaces ojos de aventurero. Me invita a escaparme del
Palacio de Invierno para que lo acompañe al bosque de abetos en sus correrías
de niño travieso. Juntos crecemos... él es libre como el viento, inculto y
salvaje como un caballo indómito que sólo desea correr en el páramo, intrépido como un vikingo que sólo anhela hacerse a la mar.<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><o:p> <br /></o:p></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;">Reniega de mi destino que me hace cortesana, detesta
los bailes y banquetes en los que mis caricias se subastan, odia a los ricos
nobles que pueden comprarlas y maldice su origen sin casta. Aquellas noches
infames huye del palacio… al día siguiente, por la mañana, entra a mi alcoba con
un ramo de brezos y los ojos enrojecidos por las lágrimas, la indignación
inflama su pecho al verme ultrajada.<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><o:p> <br /></o:p></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;">Me jura que se hará fuerte para cruzar los mares, que
regresará con su barco cargado de tesoros con los cuales comprará mi libertad, que
matará con su espada a esos nobles depravados, que me hará su esposa y me llevará al
Palacio de Cristal. Me consuela, me acompaña al lago para que me bañe, cierra
los ojos mientras dejo mis ropas en la orilla, cuando escucha mi chapoteo en el
agua los abre, sonríe al verme nadar y me dice que soy la sirena de sus mares.<br /></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><o:p> <br /></o:p></span><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;">Y mientras se hace fuerte para cumplir con su
promesa, intenta borrar con sus besos y caricias las marcas de lujuria que
aquellos nobles degenerados dejaron sobre mi piel. Es un vándalo que sin partir
a lejanas tierras opulentas comete pillaje robándome amor.</span></div><div style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><b><br /></b></span></div><div style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;"><b>Liliana Celeste Flores Vega - mayo 2015</b></span></div><div style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Bookman Old Style",serif;">Imagen: Pixabay</span></div>
Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-65050603192600980172021-05-05T19:28:00.002-05:002021-05-05T19:28:17.537-05:00La muerte del sol<div style="text-align: left;"><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgabRMS_sVAYyi0jkwUC4e59yrcoJA-S2AeEZLveAIUMAAB49Oxqfg_FLIIAHycZ3NOVB_t5wIEr17M2xzialVIb8URv1joc8MTw2eEkS5SMEqc17mHvmLivAugRietwUhX4Ig_dHvsRaQ/s589/14+la+muerte+del+sol.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="589" data-original-width="415" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgabRMS_sVAYyi0jkwUC4e59yrcoJA-S2AeEZLveAIUMAAB49Oxqfg_FLIIAHycZ3NOVB_t5wIEr17M2xzialVIb8URv1joc8MTw2eEkS5SMEqc17mHvmLivAugRietwUhX4Ig_dHvsRaQ/w281-h400/14+la+muerte+del+sol.jpg" width="281" /></a></div>Lo miré a los ojos y en ese momento descubrí
que sus ojos azules y luminosos se habían tornado grises y opacos… entonces lo
entendí.</div><span lang="ES"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;"> — Ya sé
cuál es el motivo de la tristeza que me embarga — le dije — es tan lógico y
simple… cuando el sol se apague la luna dejará de brillar. Tal vez deba de
aceptar que mi destino está unido al tuyo y esperar el ocaso sentada a tu lado.</div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;">Él me abrazó contra su pecho que percibí
apenas tibio y supe que nunca volvería a sentir el calor que me había dado en
las noches invernales. También noté que el antes vigoroso tamborileo de su
corazón ahora era débil, como el tic tac de un desvencijado reloj que amenaza
con detenerse en cualquier momento.</div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;">— No, no tiene por qué ser así — murmuró — otro
sol puede iluminar a la luna. No permitiré que te conviertas en una dama gris condenada
a deambular en los senderos incoloros del valle del olvido por mi ausencia. Quiero
que cuando nuestros hijos asciendan al trono que les corresponde por herencia
te retires con él a vuestra cabaña en el bosque de otoño, él te amará y te
protegerá… y tú serás feliz amándolo y danzando descalza sobre la hojarasca al atardecer.</div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;"> Sabía
bien a quién se refería.</div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;">— Pero… esa cabaña ya no existe — le recordé.</div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;">— ¿No han construido otra para vuestros
pasionales encuentros clandestinos? — me preguntó algo incrédulo.</div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;">— No — le respondí.</div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;">Él acarició mi cabello y algunos mechones se
quebraron como paja seca bajo el roce de su mano.</div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;">— Y éstas son las consecuencias de no encontrarte
con él — dijo contemplando aquellos mechones quebrados y resecos que se
quedaron en su mano — construyan otra cabaña y vuelve a verlo antes de que
empiecen a caerse las plumas de tus alas y se opaque el brillo de tu mirada. Ya
no debes de tener lazos conmigo, mi enfermedad te está debilitando… debemos de
cortar los lazos que nos unen lo más pronto posible.</div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;">— No, aún no — le respondí aferrándome a él…
pero añoraba los momentos vividos en aquella cabaña y deseaba danzar descalza sobre
la hojarasca al atardecer.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><br /></div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;"><b>Liliana Celeste Flores Vega – 14 de noviembre
2016</b></div></span><span lang="ES"><div style="text-align: justify;">Imagen: Anne Stokes</div></span></div>
<p class="MsoNormal"><span lang="ES">
</span></p>
<p class="MsoNormal"><br /></p>Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-77804413096898188822021-05-03T20:52:00.006-05:002021-05-07T21:03:38.269-05:00Otra visita a Fantaso<div style="text-align: left;"><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbC6BBthrYFhV6iZsT4yIjkeXb_URpxZ6-dO8sSlTgFdBNjUCLYVvzIKeNuQLNaTlGOA5x6Sv1GjLPfdS51Otfl1kb0x5S2Jnwpu66LRjXc33hAp_xflpJdjA3cibrwgOOEFqgTRyr74M/s1000/ciudad+universitaria.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="623" data-original-width="1000" height="249" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbC6BBthrYFhV6iZsT4yIjkeXb_URpxZ6-dO8sSlTgFdBNjUCLYVvzIKeNuQLNaTlGOA5x6Sv1GjLPfdS51Otfl1kb0x5S2Jnwpu66LRjXc33hAp_xflpJdjA3cibrwgOOEFqgTRyr74M/w400-h249/ciudad+universitaria.jpg" width="400" /></a></div>No podíamos hacer mucho por Luzbel pues él necesitaba
energía solar masculina, cualquier otro elemento podía contaminarlo. Entonces
Mordred y yo decidimos investigar lo que pasaba en el reino de Fantaso, tomamos
nuestras formas de cuervo y lechuza, cruzamos las sendas astrales hasta el
plano de la fantasía y descendimos en medio de una plaza moderna rodeada de
edificios altos de paredes blancas, grandes ventanas de vidrio polarizado y
techos metálicos. Cuando nos miramos nos dimos con la sorpresa que estábamos
con nuestra apariencia que tenemos en el real.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Esperamos que nos recibiera quien controlaba el lugar y se
nos acercó una atractiva mujer de unos cincuenta años, vestía un traje sastre color
azul marino con blusa blanca y zapatos negros de tacón, llevaba el cabello
recogido en un moño y gafas de carey.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— Bienvenidos a la ciudad universitaria — nos dijo
amablemente — soy la directora y los llevaré a la residencia para los estudiantes
nuevos.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">La directora nos llevó a un edificio de cuatro pisos con
amplios ventanales. En la recepción se encontraba una señorita quien nos
informó sobre los cursos que dictaban en aquella universidad: criptozoología,
arqueoastronomía, ufología, angelología, lenguas muertas, religiones
comparadas, elaboración de grimorios, etc. Mordred eligió arqueoastronomía y yo
elegí criptozología, nos dieron nuestros carnets de estudiantes y nos indicaron
el número de nuestras habitaciones.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Subimos las escaleras hasta el tercer piso. Entré a mi
habitación usando el carnet como llave, Mordred entró a la suya que se encontraba
al lado. Observé que la distribución era similar a la de la casa andaluza de
hospedaje: a la derecha había una kitchenette, a la derecha la zona de estudio
y al fondo una cama y un closet.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Me acerqué a la zona de estudio, constaba de un escritorio
con una laptop y un estante con libros y útiles de escritorio. Revisé los
títulos de los libros, trataban sobre criaturas de leyenda y mitos urbanos,
títulos como La criatura del lago Ness, La bestia de Devonshire, El reino de
las hadas, El hombre polilla, El chupacabras… nada que llamara especialmente mi
atención. Luego examiné la zona del dormitorio, la cama era moderna con cajones
abajo, abrí el closet y encontré ropa común y corriente como jeans, blusas y
casacas.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Salí de la habitación y toqué la puerta de Mordred, él salió
con un libro grueso con tapas de cuero bajo el brazo. Me describió una habitación
similar, los títulos de los libros de arqueoastronomía no le habían llamado
mucho la atención excepto ese que llevaba y encontró sobre el escritorio, me lo
mostró y vi que en la portada tenía un símbolo parecido al auryn de la película
Fantasía.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Fuimos a la cafetería, pedimos café y tartaletas. Vimos a
otros estudiantes que también se reunían para comer y conversar. Mordred puso
el libro sobre la mesa, lo tomé para darle otro vistazo y noté que el símbolo
de su portada había cambiado a uno parecido al nudo de bruja, lo abrí y vi que
sus hojas estaban en blanco.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— Tal vez todos los libros están en blanco — le comenté.</div><div style="text-align: justify;">— Revisé algunos de los libros de arqueoastronomía, si
tenían letras y dibujos — me respondió tomando el libro — pero éste es especial…
¿no lo reconoces?... es el libro de Fantasía.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">En ese momento vi que el símbolo volvió a cambiar a la
apariencia del auryn.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— Fue lo que pareció cuando lo vi bajo tu brazo — le respondí
— pero cuando yo lo tomé el símbolo cambió al nudo de bruja y ahora que lo
tienes tú ha vuelto a ser el auryn.</div> <div style="text-align: justify;">— ¿Ves?... te dije que era especial, es mágico — me dijo con
una sonrisa infantil — cambia según quien lo tenga entre sus manos, está en
blanco porque es uno quien debe de crear la historia.</div><div style="text-align: justify;">— Punto para ti, mi querido druida — le respondí — ahora
vamos a investigar el lugar.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Salimos del edificio y nos dirigimos hacia la plaza,
entonces el cielo se nubló y vimos que se estaba formando una especie de
nebulosa roja y azul, la nebulosa empezó a girar volviéndose morada y a
extenderse como si fuera a abrirse un portal interdimensional.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¡Oh, no! — exclamé aferrándome a su brazo — ahora seguro
salen unos tentáculos de ese hueco o se aparecen los aliens para abducirnos.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Nos quedamos mirando el cielo que se había oscurecido, se
encendieron unas luces blancas en los faroles de las calles y bajo las cornisas
de los edificios. Se habían formado dos nebulosas más, la gente señalaba el
cielo y empezaba a correr buscando refugio.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¡Ya van a caer! — exclamó una chica que pasó corriendo a
nuestro lado.</div><div style="text-align: justify;">— ¡Tenemos que buscar refugio antes de que caigan! —
exclamaron un grupo de muchachos que nos empujaron a una librería.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Ya estábamos en la librería cuando escuchamos un ruido
semejante al que hace el granizo al caer, nos asomamos a la ventana y vimos que
estaban cayendo meteoritos, algunos eran pequeños y se deshacían en el impacto,
pero otros eran más grandes y llegaban a dañar el pavimento. La gente que
estaba reunida en la librería había recuperado la tranquilidad y se entretenía
viendo los libros. Entendimos que ese era el motivo por el que las
edificaciones tenían techos metálicos con aleros que protegían las aceras.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— Es la lluvia — nos dijo un muchacho con gafas — dura unos minutos,
no se preocupen.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Empezamos a revisar los libros que había en las estanterías,
entonces me pareció ver a mi primo.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— El chico de allí se parece mucho a un primo mío — le dije
a Mordred señalando a un muchacho que llevaba una polera de Star Wars — acércate
y fíjate que libros está mirando.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Mordred se acercó y luego regresó a mi lado.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— Está viendo libros de teología y religiones comparadas — me
respondió.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Vimos que la gente compraba libros pagándolos con los
créditos de sus carnets de estudiantes, nos preguntamos cómo se ganaban los
créditos. La lluvia cesó y la gente empezó a salir de la librería. El cielo
había vuelto a la normalidad, observamos innumerables agujeros humeantes en la calzada,
pero a la gente no parecía importarle, simplemente caminaban esquivando los
escombros. Estaba anocheciendo y unos altavoces anunciaron las charlas que iban
a empezar en los centros culturales invitando a los estudiantes a asistir para
ganar créditos.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— Bueno, creo ya no tenemos nada más que ver aquí — le dije.</div><div style="text-align: justify;">— Podemos ir a mi habitación para pasar un buen rato — me
insinuó con una sonrisa y mirada pícara a la vez que pasaba su brazo sobre mis
hombros.</div><div style="text-align: justify;">— No — le respondí — para eso vamos a nuestra mansión en el
astral.</div><div style="text-align: justify;">— Entiendo, no te parezco atractivo con mi apariencia del
real — me reclamó con un mohín.</div><div style="text-align: justify;">— No seas tonto — le dije — es que no me parece un lugar apropiado.</div><div style="text-align: justify;">— ¿Un beso? — insistió — mira, hay varias parejas besándose
bajo los faroles.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Accedí, él me tomó entre sus brazos y me besó
apasionadamente. Los altavoces habían dejado de anunciar las charlas y emitían una
música romántica mientras que unos pequeños robots parecidos a las aspiradoras
roomba reparaban los agujeros causados por la lluvia de meteoritos.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¿Y el libro que tenías? — le pregunté al notar que estaba
con ambas manos libres.</div><div style="text-align: justify;">— ¡Ups! — exclamó — creo que lo dejé en la librería.</div><div style="text-align: justify;">— No importa — le dije — de todas maneras hubieras tenido
que dejarlo para que podamos salir de este lugar, creo que no podemos llevarnos
nada del reino de Fantaso al plano astral, yo tuve que soltar la amatista que
me dieron en el concurso de belleza.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Caminamos entre las parejas que paseaban por la avenida y los
grupos de estudiantes que salían de los centros culturales para dirigirse de
regreso a la residencia universitaria hasta que llegamos a una calle solitaria,
tomamos nuestras formas de cuervo y lechuza y volamos de regreso a nuestra mansión en el Reino del Oeste.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><b>Liliana Celeste Flores Vega - 02 de mayo del 2021</b></div><div style="text-align: justify;">Imagen: Google</div>
<o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p></div><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p>
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Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-55600354253645090622021-04-28T19:46:00.001-05:002021-04-28T20:01:24.676-05:00Una caída a Fantaso<div style="text-align: left;"><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjinKptQoCJQNo6lIijRO_UUW4Je5JnyFZ6TFUEew7aSxFJ0f6pYlbgtuzzZ8t41wCKSzQZRTT2vYVNRgVva2u930ZgDOjr0DD6-K4LC2Oj4WyM9CtgHAvSwnZP5EsppAPC6fIYcE_FQ1Y/s894/fantaso.jpg" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="894" data-original-width="894" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjinKptQoCJQNo6lIijRO_UUW4Je5JnyFZ6TFUEew7aSxFJ0f6pYlbgtuzzZ8t41wCKSzQZRTT2vYVNRgVva2u930ZgDOjr0DD6-K4LC2Oj4WyM9CtgHAvSwnZP5EsppAPC6fIYcE_FQ1Y/w400-h400/fantaso.jpg" width="400" /></a></div>Me quedé dormida, pero por alguna razón desconocida no pude
llegar al plano astral. Me encontré en medio de una plazoleta de ladrillos
rojos rodeada de casonas de estilo español. De pronto mi amiga Lucy apareció a
mi lado saludándome como si hubiéramos quedado de encontrarnos allí. En eso
vimos que se acercaban varias personas vestidas de manera variopinta.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¡Viene el Rey! — exclamaron esas personas con algarabía
señalando un lugar.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Entonces reparamos en un palacete con las puertas de madera abiertas,
de allí salió un hombre de unos cincuenta años, de tez blanca, cabello y barba rubios,
estaba ataviado con un traje principesco de color azul con galones dorados y
saludaba a todos con un rostro afable y benévolo.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Las personas a nuestro alrededor se arrodillaron al paso del
rey y nosotras hicimos lo mismo para no llamar la atención. El rey pasó acompañado
de dos oficiales saludando a todos con una sonrisa, las personas se fueron
poniendo de pie y se retiraron poco a poco. Nosotras nos habíamos quedado de
rodillas desconcertadas, entonces se nos acercó un hombre de cabello negro y
tez morena, llevaba un traje negro con emblemas rojos.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— De pie, hermosas señoritas — nos dijo con un gesto cortés
— bienvenidas al reino, síganme, les indicaré vuestros alojamientos.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Nos llevó a una de las casonas, esta tenía una distribución
en U con un patio estilo andaluz con una fuente en el centro, jardines, bancas
y faroles. Había varias puertas alrededor y nos indicó una habitación a cada
una. Ingresé a la mía, estaba decorada al estilo shabby chic… de entrada, al lado de una ventana, había una
mesita redonda con dos sillas… al otro lado había un rincón de lectura con un estante
con los libros de la colección Gótica de Valdemar, un sillón y una lámpara de
pie… al fondo, pegada a la pared, había una cama primorosa con una lámpara y
una cajita musical, al frente había una cómoda tocador con cofrecitos y
perfumes, en el espacio entre la cama y la cómoda había una puerta, la abrí
pensando que sería el baño pero era un closet con vestidos medievales y
estantes llenos de accesorios. Me quedé pensando que era todo lo que me gustaría
tener, como si me hubieran hecho un escaneo para fabricarme una habitación en
la que estuviera a gusto.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Salí de esa habitación y toqué a la puerta de la habitación
de mi amiga Lucy. La habitación tenía una distribución similar, pero en lugar
de un rincón de lectura había un rincón de labores con una estantería llena de
lanas e hilos, ella estaba sentada en el sillón tejiendo amigurumis y rodeada
de gatos parecidos a su gato Munki, pero eran de diferentes edades, había
gatitos pequeños jugando y gatos adultos acomodados en las sillas.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— Tenemos que salir de aquí — le dije alarmada — es el reino
de Fantaso.</div><div style="text-align: justify;">— ¿Y qué? — me respondió — no siento que haya algo malo, es
bonito… aquí puedo tejer tranquila, también encontré una colección de los
discos del Calamar y Camila.</div><div style="text-align: justify;">— Por eso mismo — le insistí — nuestras habitaciones tienen
todo lo que nos gusta y queremos tener porque es una trampa, quieren que nos quedemos aquí.</div><div style="text-align: justify;">— Ay, Lilith — me replicó — haces mucho drama, nos podemos
despertar cuando queramos.</div> <div style="text-align: justify;">— Voy a averiguar como podemos salir de aquí y regresaré por
ti — le dije.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Salí de la habitación, crucé el patio y, aunque las puertas
estaban abiertas no pude salir a la plaza, había una barrera invisible que me
impedía pasar. Entonces regresé a mi habitación, me puse uno de los vestidos
medievales e intenté salir, esa vez si puede pasar.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Estaba en la plaza buscando una salida cuando me vi rodeada
de una muchedumbre, el tropel me empujó hasta un estrado muy ornamentado con telas
y flores.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¡Ya empieza el concurso de belleza! — decía la gente — la
dama que gane cenará y bailará con el rey esta noche.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Un guardia me tomó de la mano y me puso en una fila en la
que también estaban otras mujeres con vestidos hermosos y tocados de fantasía, también
estaban las princesas de los cuentos clásicos como la Cenicienta, Blancanieves y
Ariel con sus vestidos característicos y apariencia humana. Nos repartieron unas
piezas de cuarzo que supuestamente eran nuestros números para el concurso,
examiné la que me dieron, era un pedazo de amatista, pero no vi ningún número
grabado en ella.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Las candidatas empezaron a subir al estrado ornamentado mostrando
sus habilidades y gracias, algunas danzaban, otras cantaban. Me dije que no me quedaba
de otra que participar en el concurso y luego vería como salir de allí.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¡Tinúviel, Tinúviel! — escuché como fondo la voz de
Mordred buscándome.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Entonces llegó mi turno, me subieron al estrado. Desde lo
alto contemplé a la muchedumbre, entre las personas había criaturas fantásticas
como sátiros, mujeres ciervo y hadas.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— Muéstrenos su gracia, bella dama — me dijo el maestro de
ceremonias.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Seguía escuchando la voz de Mordred llamándome, supe que su
voz podía guiarme para salir de allí… entonces tomé mi apariencia de lechuza y me
elevé despojándome del vestido que cayó sobre el estrado. Batí mis alas con todas
mis fuerzas siguiendo su voz, me di cuenta que tenía la pieza de amatista entre
mis garras, la solté y seguí elevándome.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">— ¡Tinúviel! — insistía Mordred llamándome.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p><div style="text-align: justify;">Finalmente pude salir del plano de Fantaso y me encontré con
Mordred, quien bajo su apariencia de cuervo, estaba esperándome en las sendas
astrales.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><b>Liliana Celeste Flores Vega - 28 de abril del 2021</b></div><div style="text-align: justify;">Imagen: Candra</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p></div><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p>
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Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-36710716475468489022021-04-24T16:17:00.001-05:002021-04-24T16:17:10.609-05:00En alas del deseo<div style="text-align: left;"><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiydjqaKUZM_4cigoaIFMEhXrtjyb7fISEXOyjd0iAZxBQtjYWTs1LMDehWiP3LvEqUnfyGBY1Sy4XtYAmiarDZB-LomfJ7MAS4rO0_O3oHao5O0Tpv-0CLfdf8wcVR2LbNjDXlEji1Jg0/s774/blaww.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="774" data-original-width="564" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiydjqaKUZM_4cigoaIFMEhXrtjyb7fISEXOyjd0iAZxBQtjYWTs1LMDehWiP3LvEqUnfyGBY1Sy4XtYAmiarDZB-LomfJ7MAS4rO0_O3oHao5O0Tpv-0CLfdf8wcVR2LbNjDXlEji1Jg0/w291-h400/blaww.jpg" width="291" /></a></div>Estaba desconsolada,
después de todo lo que Vesphurs y yo habíamos hecho y aún teníamos que hacer
para poder estar juntos las obligaciones de ser los emperadores del astral azul
nos ubicarían en reinos diferentes. Recordé que Lucipher y yo tampoco habíamos
querido esa responsabilidad. En un principio nuestros hermanos mayores Sumaq,
la bella resplandeciente, y Kukul, el que cantaba como las aves, estaban
destinados para ser los herederos que ocuparían los tronos del Sol y de la Luna
respectivamente. Luc, que ese era el nombre de mi hermano antes de recibir el
título de Lucipher, estaba destinado a un matrimonio que crearía una alianza
con el astral amarillo, y yo, que en ese entonces llevaba el nombre de Lily,
contraería nupcias para forjar una alianza con el astral rojo. </div><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Pero el orden del
astral azul se vio trastocado cuando Sheithan, el segundo consorte de nuestra
madre, la convenció de unir el astral azul con el astral rojo de manera
definitiva creando un único astral morado gobernado por ambos. Para eso
decidieron el matrimonio de Sumaq con Petrus, el hijo de Sheithan. Tenía
recuerdos borrosos de aquella vida en la que caminamos sobre un mundo cuya
geografía era parecida al altiplano andino. Killa era nuestra madre y Xiuel ocupaba
el lugar de nuestro padre Xuqui quien llevaba varios siglos desaparecido. Luc
también estaba perdido y yo había hecho lazos de unión con Mortwuld, no lo amaba,
pero él había sido mi consuelo desde que mi hermano había desaparecido, como
luna sin sol me había refugiado en la oscuridad, llevaba mi duelo de la mano
con la muerte.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Recordaba cuando
llegó Sheithan acompañado de su séquito. Estaba con Mortwuld en el mirador,
siempre oteaba el horizonte con la vana esperanza de algún día ver volver a
Luc, Mortwuld entendía mi tristeza y siempre estaba a mi lado como una sombra
que me cobijaba. Entonces divisamos la comitiva que se acercó hasta el portal
del castillo de piedra, Sheithan encabezaba la marcha y detrás cabalgaba
Petrus, su hijo. Era un guerrero de porte altivo y largo cabello negro, al
sentirse observado levantó la cabeza y nuestras miradas se encontraron, algo en
mi vibró en una frecuencia mágica, él era Sol… sonreí por primera vez en
siglos, él me devolvió la sonrisa y en sus ojos color esmeralda vi que él
también había sentido esa vibración mágica al percibir que yo era Luna. Corrí
con una nueva esperanza naciendo en mi corazón a avisarle a mi madre que habían
llegado los visitantes que esperábamos.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Durante la cena
hablaron de un matrimonio para reforzar la alianza que teníamos con los rojos.
Por primera vez yo había dejado mis ropajes grises y me había ataviado con un
vestido azul y llevaba una corona de flores blancas, Petrus estaba vestido como
un príncipe e intercambiábamos miradas esperando que decidieran nuestro
compromiso, era lo lógico, Sumaq era Sol y se casaría con Kukul que era Luna
para ocupar el lugar de nuestros padres cuando llegara el tiempo. Yo estaba
destinada a un enlace con un Sol rojo. Grande fue nuestra sorpresa y decepción
cuando mi madre y Sheithan dijeron que Sumaq se casaría con Petrus. Kukul se
levantó airado reclamando que Sumaq era por derecho su prometida. Empezaron a
discutir, Mortwuld me tomó del brazo y me sacó de la sala.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Empezaron los
preparativos para la boda. Caí enferma y me llevaron unos días a los
manantiales curativos. Me recuperé apenas lo necesario para asistir a la
ceremonia. Cuando llegué, del brazo de Mortwuld, me extrañó no encontrar a
Kukul. Le pregunté a mi madre dónde estaba mi hermano y ella me respondió que
él se había marchado… y supe que él no volvería como no había vuelto Luc ni
nuestro padre. Entonces Sumaq se puso de pie en medio de la sala y empezó a
cantar, su canto era como un trino de aves, como la voz de Kukul… sentí un
escalofrío y supe que habían hecho algo abominable: Lo habían sacrificado y
ella había devorado su gema. </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Trastornada al conocer
el destino fatal de mi hermano salí de la sala, me derrumbé en el jardín y
rompí en llanto. Entonces Petrus se acercó a mí y me abrazó… me dijo que se
había enamorado de mí en el momento que nuestras miradas se cruzaron, que él
deseaba casarse conmigo, pero tenía que obedecer a su padre, se casaría con
Sumaq pero encontraría un pretexto para no consumar las nupcias astrales.
Escuchamos a Mortwuld buscándome, Petrus me besó y me dejó en el jardín. Vi a
Mortwuld acercándose y corrí con todas mis fuerzas hasta llegar al acantilado,
abajo rugía el mar y me lancé a sus aguas.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Me limpié una
lágrima. Petrus ya no estaba, él también había encontrado la muerte cuando fue
su turno de sentarse en el Trono Dorado… Vesphurs y yo habíamos asistido a sus
exequias en las que colocaron el cofre que guardaba los restos de su gema en
una hornacina en el Templo del Dragón. Entonces caí en cuenta que nosotros no
habíamos hecho exequias para Luc, nos negábamos tanto a aceptar su pérdida que conservábamos
el cofre que guardaba los restos de su gema en un altar en la Torre Estelar de
nuestra mansión y cuando hablábamos de él seguíamos llamándolo Lucipher como si
aún estuviera presente y llevando el título de Emperador del astral azul. Entonces
deduje que teníamos que realizar las exequias para que Vesphurs pudiera recibir
el título.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Era una situación
excepcional para nosotros. El primero en llevar el título de Lucipher había
sido nuestro abuelo Khun, quien lo estableció en memoria de su padre Lugh
cuando se unificaron todos los reinos del astral azul bajo un único gobierno después
del conflicto contra el Gran Terror Rojo. Khun le entregó el título a Xuqui
cuando ascendió, y de la misma manera Xuqui le otorgó el título a Luc cuando
ascendió. Nunca habíamos realizado funerales para un Emperador del astral azul.
No había un protocolo a seguir, pero Luc había ocupado el trono del Templo del Sol
del Reino del Sur, decidí que su funeral sería como los que se hacían para los
gobernantes de Huaca Sian.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">El cofre que
guardaba los restos de su gema debería de ser depositado en una hornacina del
Templo del Sol en una ceremonia en la que sacrificaría a sus jaguares para que
sean los guardianes de su tumba. Luego el Templo del Sol sería sellado.
Vesphurs no ocuparía ese trono, así como yo había abandonado el trono del
Templo de la Luna del Reino del Norte para marcharme al Reino del Oeste él
debería de… y volví a quebrarme porque siguiendo esa lógica él debería de
marcharse al Reino del Este pues renacería como un nuevo Sol… y el sol nace en
el este.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">El destino se
empeñaba en separarnos, cerré los ojos y me quedé dormida. Crucé las sendas
astrales y llegué a mi mansión. Mordred me estaba esperando en el balcón de la
alcoba, me recibió con una sonrisa seductora, estaba con una bata de baño con
el cabello aún húmedo y había preparado una mesita con una botella de vino y
dos copas.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¿En serio crees
que tengo ánimos para una velada romántica? — le reproché.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Lo siento, no
quise que lo malinterpretaras — me respondió — estoy aquí para escucharte y
darte mi apoyo en todo lo que pueda.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Me refugié entre sus
brazos y lloré… lloré por todo lo que no había llorado: por la pérdida de Luc y
la muerte de todos los Soles que se inmolaron en el Trono Dorado, por las
infidelidades de Jeraseth, por el distanciamiento de Mortwuld, por la
indiferencia de los hassassins y los guerreros del norte, por todas las traiciones,
las mentiras y los secretos que había descubierto… y por el incierto destino
que me esperaba con Vesphurs. Mordred me abrazó estrechándome dulcemente contra
su pecho… me dejó llorar y gritar, incluso soportó estoicamente que le clavara
las uñas en el brazo y lo golpeara en el pecho mientras soltaba todo el dolor
contenido.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Cuando me hube
calmado me hizo sentarme en una de las sillas de mimbre, se arrodilló a mis
pies y secó mis lágrimas con el dorso de su mano. Le dije que teníamos que
hacer los preparativos para las exequias de Luc y le expliqué que había llegado
a la conclusión de que Vesphurs no debería de ocupar el trono del Templo del
Sol en el Reino del Sur y que le correspondería instalarse en el Reino del
Este.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Cálmate — me dijo sirviéndome
una copa de vino y arrodillándose otra vez a mis pies — Luc tendrá un funeral
magnífico, digno del Emperador del astral azul que fue: el hijo del Dios Jaguar
que fue exiliado y olvidado, que sufrió traiciones y torturas pero, aun
teniéndolo todo en contra, se alzó como un Sol que trajo la luz a un astral
hundido en el caos y la oscuridad, un guerrero valiente, un héroe que se inmoló
en el Trono Dorado y un hombre que te amó durante milenios y luchó en nombre de
ese amor hasta conseguir que lo amaras. Yo mismo me ocuparé de los preparativos,
él se merece más que el sacrificio de sus jaguares, haremos un extraordinario torneo
en su nombre, los juglares cantarán himnos a sus hazañas y brindaremos en su
memoria… pero sin lágrimas, porque él nunca quiso que te convirtieras en una
luna menguante oscurecida por los velos luctuosos de un eterno duelo, él te
dejó a Vesphurs para que brillaras en el cielo nocturno con toda la
majestuosidad de una luna de plata.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Sellaremos el
Templo del Sol — le dije conmovida — y el título de Lucipher morirá con él… nadie
más merece llevar ese título.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— No, nadie más lo
merece — me confirmó tomando mis manos — porque nunca habrá nadie más digno y
porque nadie más merece llevar esa carga. Yo también había llegado a la
conclusión de que Vesphurs no debería de quedarse en el Reino del Sur, pero
tampoco debe de quedarse en el Reino del Este. Precisamente estuve leyendo el
libro que te dejó… antaño el astral azul estuvo divido en cuatro reinos
principales: Scandia en el Norte, Huaca Sian al sur, Céltica al oeste y Sindhu
al este. Después que el Gran Terror Rojo arrasó con los astrales se suscitaron
muchos cambios, el astral rojo y el astral amarillo se reorganizaron en reinos que
asimilaron a los dioses sobrevivientes de los panteones que habían quedado destruidos.
Pero en el astral azul habían quedado muy pocos dioses, todo el panteón de
Sindhu fue aniquilado y los otros panteones quedaron incompletos, entonces se
unieron en un solo reino.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Si — le corroboré <a name="_Hlk69699492">—</a> un solo reino bajo el gobierno de un Emperador y una Emperatriz,
aunque se mantuvieron las tradiciones y costumbres de cada reino original en
sus respectivos territorios. La sede se levantó en el centro, se construyó un palacio
con dos tronos, Sol y Luna respectivamente. El abuelo Khun con el título de
Lucipher y la abuela Shia con el título de Lilith fueron los primeros que
asumieron la responsabilidad como Emperadores del astral azul.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Después de la
ascensión de Xuqui y Killa al plano primigenio, Luc y tú se instalaron en el
palacio y ocuparon los dos tronos respectivos — prosiguió siguiendo el hilo de
los acontecimientos — luego recibieron
la advertencia de un ataque inminente y el palacio fue destruido, entonces Luc se
fue al Reino del Sur y tú al Reino del Norte, pero he visto que en el Reino del
Sur frente al Templo del Sol hay un Templo de la Luna… ¿por qué no se fueron
juntos al sur para ocupar esos tronos?</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Si lo habíamos
hecho, pero luego terminamos nuestra relación de pareja en el real y cada uno
tomó su camino.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Si lo hicimos — le
respondí — pero por algún motivo no pude enlazarme adecuadamente con el trono
del Templo de la Luna. Y además la relación de pareja que teníamos en real se
había vuelto demasiado tóxica, decidimos separarnos y mantener nuestro
matrimonio solo a nivel astral para cumplir con nuestras obligaciones. Luc
ocupó el trono del Templo del Sol en el Reino del Sur y yo regresé al Reino del
Norte, que era el lugar en donde había vivido la mayor parte de mi existencia,
y ocupé el trono de la Luna en el Palacio de Invierno.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¿Sabes por qué no
pudiste enlazarte adecuadamente con el trono del Templo de la Luna en el Reino
del Sur? — me preguntó, le devolví la pregunta con la mirada porque sabía que
él tenía la respuesta — porque desde que empezaste a ejercer como shamana en
esta vida has tomado como orientación el lugar de tu nacimiento y no tu
verdadera esencia almática. Tú has nacido en un país bajo la influencia mágica
de Huaca Sian pero tu esencia vibra en la frecuencia del Reino del Oeste, anoche
Vesphurs dijo que heredaste tus alas de lechuza del abuelo Khun quien es hijo
de Lugh y Ariadna, tu esencia almática es céltica. De la misma manera que la
esencia almática de tu mejor amiga, quien también ha nacido en el mismo país
que tú, es mexica.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Ya lo había pensado antes
pues, aunque amaba las tierras en las que había nacido, siempre había sentido una
atracción por la cultura celta. En los sueños de mi infancia y en mis primeras
visiones en el espejo aparecían los castillos, los bosques y los círculos de
piedra de Hispania y Britannia, pero había creído que era producto de mi memoria
atávica por la mezcla de sangres que llevo y las historias que contaban en mi
familia sin reconocer que era la memoria de mi esencia almática.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Pero yo soy hija
de Killa — reflexioné — es correcto que naciera en ese país.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Si — me confirmó —
y también es correcto que nacieras con la mezcla de sangres que tienes, te
prepararon para estas épocas de cambio. El país en el que naciste es un reflejo
de Huaca Sian, te enviaron a nacer allí porque como hija de Killa primero tenías
que desempeñarte como su shamana pues ella es una diosa y ya no puede encarnar,
tú fuiste su herramienta para que ella pudiera hacer los rituales que tenía que
hacer en el real para cerrar un ciclo.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Si, sé que durante
esos años fui su herramienta — le dije recordando — nunca tuve problemas para
realizar aquellos rituales en el real y además astralmente podía enlazarme
perfectamente con el trono del Templo de la Luna en el Reino del Sur.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Deduzco que parte
de la herencia genética de tu contexto carnático te sirvió para poder realizar aquellos
rituales en esas tierras, aplicaste intuitivamente la magia de sangre — me
respondió — y astralmente podías enlazarte perfectamente con el trono del
Templo de la Luna porque tenías un vínculo que te hacía una con Killa, pero
cuando ella ascendió empezaste a tener problemas para vibrar en la misma
frecuencia del trono ¿verdad?</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Tenía razón. Después
de que Killa y Xuqui ascendieron noté una diferencia. Las Huacas ya no me
hablaban como antes y empecé a tener dificultades de sintonía mágica, pensaba que
se debía a un bloqueo ocasionado por todos los problemas que tenía con Luc.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Siente tu esencia
almática — me dijo mirándome a los ojos — perteneces a un grupo de recreación
medieval… lo que te llama son los castillos medievales, los bosques encantados,
las gestas de caballeros y los cuentos de hadas… te sientes auténtica cuando te
pones tus vestidos de princesa y recorres el castillo que se alza junto al mar,
lo he notado en tus fotografías, ese brillo en tu mirada. Tienes afinidad con
el Reino del Norte porque su vibración mágica es muy parecida a la del Reino del
Oeste. Por eso tú deberás de ocupar el trono de la Luna del Reino del Oeste, el
que se encuentra en medio del bosque encantado y fue el trono de Ariadna. </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Sé cuál es el
lugar que debo ocupar, lo sentí de inmediato cuando me instalé en este reino —
le dije con convicción — fue como volver a los sueños de mi infancia, me siento
en paz por haberme reencontrado con mi esencia almática y con la explicación
que me has dado no me quedan dudas de que es aquí a donde pertenezco… pero lo
que me entristece es que Vesphurs no se quede a mi lado, levantamos esta
mansión con la intención de que fuera nuestro hogar.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Después de todo lo
que hemos hablado — prosiguió — ¿tú crees que Vesphurs, ya convertido en
Luzbel, vibrará en la misma frecuencia que el trono del Templo del Sol en el
Reino del Sur?</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— No, no lo creo —
le respondí — él no es un jaguar de Huaca Sian como Luc, aunque llegó a hacer
su ritual de iniciación en el Amazonas.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Mordred me había
quitado un zapato y se entretenía acariciándome el pie, yo lo dejaba hacer
porque su toque delicado y acompasado me relajaba. Hizo un movimiento y la bata
se le deslizó por los hombros brindándome la vista de sus pectorales, me sonrió
con picardía… pensé que tal vez debería de dejarme llevar y olvidar las
preocupaciones entre sus brazos, beber el delicioso vino que me daba con cada
beso… pero sería un olvido y una embriaguez que me aliviarían solo por un
momento, me despertaría con una sonrisa que en el transcurso del día se
desvanecería.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Luc era como nuestro
padre y como nuestra abuela, Shia, la leona de los dientes de sable — dije retirando
mi pie de sus manos y recogiendo mis piernas contra mi pecho encerrándome
nuevamente en mi dolor — la misma esencia salvaje e indómita. Vesphurs es
diferente… por eso decidí que él no ocuparía el trono en el Templo del Sol y
llegué a la conclusión de que, cuando renazca como un nuevo Sol, deberá de instalarse
en el Reino del Este.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¿Cuál es el animal
totem de Vesphurs? — me preguntó sentándose cruzando las piernas.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Se convierte en un
felino blanco con alas de plumaje nevado — le respondí.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Una variante del
grifo — murmuró para sí mismo — pero eso es ahora que tiene una naturaleza dual,
el felino blanco ha de ser la manifestación femenina y lunar.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Me quedé
desconcertada por su razonamiento. Ya había imaginado a Vesphurs como una
pantera blanca con pelaje suave y ojos azules.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Pienso lo
contrario — le refuté — sus alas han de ser la manifestación femenina y lunar.
Cuando procedamos con lo que debemos de hacer seguramente será una pantera
blanca.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— No — dijo Mordred
con seguridad — ¿alguna vez, por deseo propio, te ha hecho suya montándote como
un felino salvaje?</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">No, por deseo propio
nunca lo había hecho, un par de veces Luc lo forzó a montarme de esa manera y
Vesphurs obedeció, pero no tenía ese salvajismo natural… él era apasionado y
tierno cuando me hacía el amor, le gustaba hacerme suya mirándome de frente, me
cubría con delicadeza y gracia como si fuera… como si fuera un ave.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Vesphurs es el ave
— dijo Mordred haciendo eco a mis pensamientos — él te envía mensajes con colibríes,
puede controlar a las aves… además canta y le gusta anidarte entre sus brazos.
Es fiel, siempre dice que tú eres y serás su única mujer, por esa fidelidad tal
vez sea un cisne o una paloma, por su voz podría ser un gorrión… aunque yo creo
que por su elegancia es un pavo real. Y la esencia almática de Vesphurs también
es céltica, eso se nota a leguas… por eso él debe de quedarse en el Reino del
Oeste ocupando el trono que fue de Lugh.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¡Entonces Vesphurs
se quedará con nosotros! — exclamé emocionada.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Si, él se quedará
con nosotros en el Reino del Oeste — me confirmó — ¿ahora entiendes por qué
había preparado una celebración?</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Salté de la silla y
lo abracé y besé con tanto ímpetu que lo hice tambalearse en la postura en la
que se encontraba, pero él pudo mantener el equilibrio apoyando las manos en el
suelo, aunque faltó poco para que termináramos tumbados sobre los adoquines de
ladrillo… y nos reímos con una risa sincera y fresca llena de esperanzas.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Cuando nos calmamos
nuestras miradas se encontraron, yo había quedado a horcajadas sobre él, pude
ver el deseo en sus ojos… me tomó de la cintura y se mordió los labios, una
apasionada súplica de hacerme suya… y yo también sentí el deseo de hacerlo mío
pero tuve miedo, miedo de empezar a quererlo de la manera en la que alguna vez quise
a Mortwuld… me recordé que estábamos juntos por las circunstancias y me dije
que toda esa marea de sensaciones se debía a la energía egregórica, cuando ya no
fuera necesario que él me diera esa energía para sostenerme ambos dejaríamos de
sentir esa atracción. Me recompuse poniéndome de pie, me senté en la silla y
con un gesto le reclamé que mi copa estaba vacía. </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Nosotros regiremos
el Reino del Oeste — dije mientras Mordred llenaba mi copa de vino — además
restauraremos el orden del astral azul como fue en un principio. Serán cuatro
reinos, cada uno con dos gobernantes, sus esencias almáticas deben de
corresponderse con el reino que regirán para que puedan ocupar los tronos
respectivos de Sol y Luna en armonía mágica.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Mordred se sirvió
una copa de vino y se sentó en la silla frente a mí, aún sentía su mirada de
deseo. Teníamos que reorganizar los panteones. El problema lo encontraba en el
Reino del Este pues todos los dioses del panteón de Sindhu habían sido
aniquilados en las épocas que el Gran Terror Rojo asoló los astrales, pero encontramos
en el libro unas referencias sobre un panteón secundario que también se había
ubicado en esos territorios astrales: los dioses que en Gaia habían sido
conocidos como los griegos y que, durante el reinado de Sheithan como segundo
consorte de Killa, habían bebido la sangre del Dragón transmutando su esencia
azul a roja. Entre copas de vino y lujuriosas miradas furtivas, conseguimos elaborar
un plan a seguir. </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Entonces
¿renunciarás al título de Emperatriz del astral azul? — me preguntó.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Si, gobernar todo
un astral es mucha responsabilidad — respondí.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¡Salud por eso, mi
reina! — exclamó y me besó.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Bebí de su boca ese
licor que me embriagaba más que el vino. Y ya no pude controlar más el deseo
que sentía por él, me puse de pie y me despojé de mi vestido, él se deshizo de la
bata y me recibió entre sus brazos… me senté sobre sus piernas, intercambiamos
besos y caricias… y el resto lo hizo la pasión acrecentada por nuestros intentos
de controlarnos durante la velada.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Tenía su hombría
dentro de mí, subía y bajaba en acompasado vaivén mientras él me sujetaba de la
cintura. Mi mirada clavada en sus ojos oscuros mientras enlazaba mis brazos
alrededor de su cuello, las piernas me temblaban pero lo estaba disfrutando
tanto… entonces volvimos a besarnos, cerré los ojos cuando Mordred insufló en
mí esa energía a la cual me había hecho adicta, mis alas de lechuza se
desplegaron y mis manos se volvieron garras sobre sus hombros… sentí unas ansias
de volar hacia el cielo nocturno en una cópula aérea pero yo no tenía las
fuerzas suficientes para levantarnos en vuelo… pero el lazo que nos unía hizo
que él sintiera el mismo vehemente deseo, Mordred se puso de pie sujetándome entre
sus brazos, rodeé sus caderas con mis piernas y sentí que desplegó sus alas… abrí
los ojos y vi sus alas de plumas negras como las de un cuervo.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Y unidos levantamos
el vuelo hacia la inmensidad de la noche. Nuestras bocas unidas en un beso,
volví a cerrar los ojos mientras batía mis alas y sentía el batir de las suyas
imaginándome que era Lucipher quien me sostenía entre sus brazos, rememorando aquel
vuelo que hicimos en la isla que emergió de las profundidades del mar para ser
el escenario del juicio de los Primigenios, aquella última vez que nos unimos en
una cópula ritualística como shamanes de Killa y Xuqui… el vuelo místico que
impulsó a nuestros padres a ascender al plano primordial.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¡Lucipher! —
exclamé estremeciéndome en un orgasmo de destellos azules.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¡Lilith! — exclamó
él agitándose al derramar su deseo dentro de mí.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Nos quedamos
suspendidos en la bóveda etérea, nuestros cuerpos vibrando en la misma sintonía,
nuestros pechos unidos reforzando el lazo íntimo que habíamos creado la noche
anterior… entonces escuchamos la música de las esferas y un resplandor de luz
blanca nos envolvió… abrimos los ojos, miramos hacia arriba y vimos una brecha
abierta en el techo del cielo. Mordred estaba deslumbrado contemplando la luz
que nos empezó a succionar, pero yo pude reaccionar a tiempo.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¡Hacia abajo! — grité
forzándolo a descender luchando contra esa fuerza que quería elevarnos.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Nos precipitamos en
una caída libre llevándonos de por medio golpes y rasguños contra el frondoso
ramaje de los árboles milenarios hasta que aterrizamos accidentadamente sobre
la hojarasca en algún lugar del bosque. Nos quedamos durante un buen rato
maltrechos y atontados, nos habíamos protegido mutuamente con nuestras alas
para amortiguar el impacto. Miré hacia arriba y pude ver que la brecha se
estaba cerrando.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¿Qué fue eso? — me
preguntó Mordred poniéndose de pie y sacudiéndose las hojas secas.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Abrimos una brecha
hacia el plano primordial — le respondí conmocionada.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¿Qué hubiera
pasado si la cruzábamos? — me preguntó ayudándome a ponerme de pie.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Hubiéramos
ingresado al plano primordial — le contesté sintiendo un escalofrío.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¿Eso hubiera tenido
consecuencias? — me preguntó quitándome unas ramitas del cabello.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— No en el astral —
le respondí — simplemente nos hubieran enviado de regreso a este plano. Pero
pudo haber tenido consecuencias fatales en el real, si el cordón que nos une a
nuestros cuerpos se rompía. Nunca debemos de repetir lo que hemos hecho esta
noche.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Entiendo — dijo
abrazándome — pero fue tan hermoso volar contigo.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Empezamos a caminar
de regreso a la mansión.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¿Puedes transformarte
en cuervo? — le pregunté reparando en nuestro estado — sería incómodo que
lleguemos a la mansión desnudos y con tantos rasguños.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Mordred asintió tomando
la apariencia de un cuervo y yo tomé mi forma de lechuza. Sobrevolamos el
bosque y divisamos el lugar en el que se encontraba el trono que había ocupado
Ariadna, también vimos el lugar donde se alzaba el trono que había sido de
Lugh. Llegamos a la mansión e ingresamos a la alcoba por el balcón.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><b>Liliana Celeste Flores Vega - 09 de abril del 2021</b></div><div style="text-align: justify;">Imagen: https://www.deviantart.com/jdelnido</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span></div>
Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-9546037380091379002021-04-16T21:58:00.001-05:002021-04-18T22:03:00.699-05:00Cuando la luna necesita un abrazo de sombras<div style="text-align: left;"><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgjTuNRREnbHqfgdYq6ESH-NmHA2ZPGRLSeeFMohwifyceqXkjaBGnUFEXnYFpodDCWVqrZ1G3p6G6z9vi6wAG2yuptjGOhqKRaKMQdlK-T9S8cLpnKfvGVW-dWZS0shvDce_l9xDa7sFI/s800/ln.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="800" data-original-width="562" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgjTuNRREnbHqfgdYq6ESH-NmHA2ZPGRLSeeFMohwifyceqXkjaBGnUFEXnYFpodDCWVqrZ1G3p6G6z9vi6wAG2yuptjGOhqKRaKMQdlK-T9S8cLpnKfvGVW-dWZS0shvDce_l9xDa7sFI/w281-h400/ln.jpg" width="281" /></a></div>Tres días después de
recibir aquel beso del hijo de Morrigan volví a sentir aquella debilidad.
Estaba escribiendo mis memorias cuando de pronto me sentí cansada y mareada, el
frío y la oscuridad me envolvieron nuevamente… tuve que recostarme para descansar.</div><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Me quedé dormida.
Cuando llegué a mi mansión onírica en el Reino del Otoño encontré a Mordred
esperándome en el saloncito de estar.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><a name="_Hlk69245485"></a><div style="text-align: justify;"><a name="_Hlk69245485"></a><a name="_Hlk69245485">—</a> Vesphurs me pidió que estuviera al pendiente
por si te sentías débil de nuevo — me dijo, tomó mis manos y examinó mi semblante
— estás fría y pálida, creo que necesitas que lo hagamos todas las noches.</div><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Iba a pedírtelo —
le respondí.</div> <o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Mordred me acompañó
a la alcoba y nos sentamos en el lecho, era una situación inusual y un poco
incómoda. Los cortinajes del ventanal estaban cerrados, la tenue luz de las
lámparas creaba una atmósfera de intimidad, se percibía un ligero aroma a
incienso de rosa y sándalo, en la mesa había dos copas y una botella de vino
dorado casi vacía… supe que Vesphurs y Niq habían estado juntos la noche
anterior.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">No sabía si
recostarme en el lecho para que Mordred pudiera proceder como lo hizo la noche
pasada o permanecer sentada. Pensé que si me acostaba pasivamente él podría
interpretarlo como una invitación a algo más, así que me quedé sentada y él se
sentó a mí lado… nos quedamos un rato en silencio contemplando los brocados de
los cortinajes, ambos sentíamos lo forzado de la situación y no sabíamos cómo
empezar.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">El silencio se hizo
incómodo, escuchábamos el tic tac del reloj de pie que estaba en una esquina de
la alcoba como si estuviera apurándonos para que lo hiciéramos. Finalmente, Mordred
acarició mi cabello propiciando un aproximamiento más natural… acercó su
mejilla a la mía, sentí la excitante aspereza de su barba crecida. Recordé que
Lucipher, las pocas veces que se mostraba cariñoso, solía hacer el mismo gesto
y rasparme la mejilla con su barba. </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">La tensión que había
entre nosotros empezó a ceder. Mordred tenía los ojos oscuros, pero sus ojos no
tenían esa oscuridad de abismo insondable que tienen los ojos de Mortwuld… tenía
una mirada dulcemente seductora, sin esa malicia pérfida que tienen los ojos de
los hijos de Thanatos. Rozó mis labios con los suyos, percibí un ligero sabor a
vainilla, intercambiamos unos besos tímidos hasta que adquirimos confianza...
entonces me abrazó con delicadeza acercándome a su cuerpo y me besó… su boca
unida a la mía mientras que me insuflaba esa energía que hacía que se alejaran
el frío y la oscuridad.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Me gustaba la
sensación que me producía esa energía, era tan reconfortante… y adictiva. La
tibia luz que Mordred me transfería había desplazado al frío y a la oscuridad,
me envolvía una dulce sensación placentera. Entonces, al sentir que me había
recuperado, él dejó de canalizarme energía… pero yo quería más, mordí sus
labios suavemente como un reclamo.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Dame más — le
demandé sentándome sobre sus piernas y enlazando mis brazos alrededor de su
cuello.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Sentí sus manos
posándose sobre mis caderas con firmeza, lo besé e introduje mi lengua en su
boca saboreando su paladar, quería más de esa energía... él me correspondió apasionadamente
canalizando la energía que yo deseaba con tantas ansias, acaricié su nuca y sus
hombros sin dejar de besarlo. Sentí su cálida erección entre mis piernas, su
excitación hacía la energía más deliciosa, casi embriagadora. Lo estimulé
realizando un ligero vaivén con mis caderas, él arremangó las faldas de mi
vestido para acariciar mis piernas… poco a poco me fue tumbando sobre el lecho
buscando una posición más cómoda.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Mordred jadeaba sobre
mí, con la mano derecha estrujaba uno de mis pechos y con la izquierda se
apoyaba manteniendo el equilibrio para no cargarme con todo su peso… no puedo
negar que yo también estaba excitada, aunque era más por la embriaguez que me
causaba esa deliciosa energía que por sus caricias… pero cuando sentí su
miembro viril buscando el camino entre mis muslos reaccioné y me desperté.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">No pude estar
tranquila durante el resto del día, necesitaba más de esa energía especiada con
su excitación, se me había quedado como miel en los labios… también me pregunté
cómo sería sentirlo dentro de mí… ¿Podría llenar, al menos por un instante, el
vacío que me había dejado Lucipher? ¿Podría reemplazarlo?</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Si, podría
reemplazarlo por un mes, no más. Lo que Mordred me daba era energía
"egregórica" como él mismo la había nombrado, la había acumulado
durante años, pero al paso que íbamos se agotaría pronto. Solo Vesphurs podría
reemplazar a Lucipher de manera permanente, teníamos que hacer el ritual para
que él se convirtiera en Luzbel… pero yo tenía miedo que, aún después de
someterlo a aquella transmutación, falláramos creando lazos de pareja entre
nosotros.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Sentí nostalgia,
extrañaba tanto a Lucipher. Entre lágrimas me quedé dormida. Cuando llegué a mi
mansión onírica Mordred estaba esperándome en la alcoba a media luz.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><a name="_Hlk69257797"></a><div style="text-align: justify;"><a name="_Hlk69257797"></a><a name="_Hlk69257797">—</a> Lamento mucho lo sucedido esta tarde — le
dije pidiéndole disculpas por la manera intempestiva en la que lo había dejado
y reconociendo que era mi culpa el haberlo provocado hasta llevar nuestro
encuentro a una situación equivocada.</div><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div><o:p><div style="text-align: justify;">Como respuesta
Mordred me tomó entre sus brazos y me besó apasionadamente, me dejé llevar por
su vehemente arrebato tan parecido a los que tenía Lucipher cuando nos
encontrábamos. Me llevó al lecho, entre besos y caricias nos despojamos de
nuestras vestimentas hasta quedarnos desnudos. Sin duda él estaba deseoso de culminar
lo que habíamos empezado esa tarde… y yo también. Me reproché sentir ese deseo,
había llegado arrepentida de haber causado esa situación con Mordred, pero hace
tantas lunas que no me sentía tan deseada por un hombre.</div></o:p></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Si, estaba Vesphurs
que me amaba y me deseaba… pero en nuestros encuentros siempre faltaba algo: la
chispa adecuada… él no tenía esa esencia netamente masculina que era lo que me
atraía de Lucipher, ahora sabía que se debía a su naturaleza dual y que ese era
el motivo por el cual no habíamos podido crear lazos de pareja cuando lo
intentamos la noche pasada… yo necesitaba un hombre que emanara ese olor de macho
en celo y despertara mis deseos lujuriosos, un hombre como Mordred… pensé que si
conseguía crear lazos de pareja con Mordred quedaría demostrado que el problema
era la condición de Vesphurs.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Espera — le dije
recordándole que la decisión era mía — quiero verte.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Mordred se incorporó
quedando de rodillas sobre el lecho. Tenía los mismos rasgos faciales varoniles
que tiene en el real excepto por una ligera diferencia en el arco de las cejas.
Su cabello era igual de oscuro, pero lo llevaba largo y le caía en mechones
desordenados hasta los hombros. Contemplé la definida musculatura de su pecho y
sus brazos, mi mirada recorrió su anatomía y se detuvo en su desafiante
erección, era un hombre bastante atractivo… se mordió los labios, le complacía
que lo examinara como si fuera un esclavo que se compra para satisfacer deseos
lascivos, tenía el cuerpo perfecto para fustigar con un látigo… entonces noté
que no tenía cicatrices de guerra ni marcas de ritual. Morrigan y Thur Pendragon
no lo habían reconocido, él debería de llevar la imagen del dragón en la
espalda y los anillos celtas en los brazos.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Percibí su
nerviosismo, estaba a la expectativa esperando mi veredicto… si, era un hermoso
y brioso semental, asentí con una sonrisa dándole mi aprobación… entonces Mordred
se inclinó sobre mí y me besó, la energía que me dio con ese beso fue como un
sorbo del mejor vino, definitivamente el añadido de su excitación la volvía
embriagadora. Siguió lamiendo mi cuello y besando mis hombros, se entretuvo con
mis pechos, bajó hasta mi vientre y se acomodó entre mis piernas. Lamió mi sexo
y estimuló mi clítoris arrancándome gemidos de placer que tuve que moderar para
no levantar las sospechas de mis doncellas de servicio.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Luego me tomó de las
caderas y me penetró, centímetro a centímetro me consultaba con la mirada
temeroso de que mi cuerpo no pudiera albergar toda su hombría, al llegar a
cierto punto lo detuve, no por incomodidad ni dolor, lo hice porque Lucipher me
llenaba hasta allí... no sé si Mordred lo entendió o solo pensó que esa era la
medida que me complacía, me embistió respetando la pauta que le había dado… rodeé
su cintura con mis piernas, era una postura bastante cómoda que a él le
permitía sujetarme firmemente para mantener un ritmo acompasado y a mí me
permitía admirar su cuerpo… y por primera vez, desde la muerte de Lucipher y mi
separación de Jeraseth, me permití disfrutar del placer que me podía dar un
amante.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Entonces sucedió… el
ventanal se abrió empujado por el viento, la luz de la luna entró a la alcoba
llenándola de su luz azul argento creando una escena fantasmagórica… los
preludios encantados que preceden a una unión mágica. Sentí que en mi pecho se
abría aquella hendidura que es el nido en donde se forman las gemas almáticas y
la fuente de donde nacen los lazos mágicos… contemplé a Mordred, en su pecho
también se había abierto aquella hendidura… de mi pecho surgió un lazo de luz
azul argento con esencia de luna y de su pecho un lazo oscuro con esencia de
noche… y los lazos nos unieron creando un vínculo mágico.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">El deseo nos había
unido, luz de Luna y oscuridad de Muerte. Un vínculo semejante al que tuve con
Mortwuld durante el tiempo que Lucipher estuvo perdido en los mundos amarillos
y que me convirtió en la Luna de la Muerte, la portadora del cirio que nunca se
apaga, el fanal funeral con el que guiaba a los einherjers… un vínculo que me
daba el poder de manejar la magia oscura. Mordred tomó mis manos y me levantó
acercando su pecho al mío, me sujetó firmemente de la cintura y yo enlacé mis
brazos a su cuello, nos besamos… la unión estaba consumada. Y sosteniéndome en
ese abrazo se levantó del lecho, me apoyó contra la pared y siguió
embistiéndome apasionadamente… nuestras bocas seguían unidas, me insufló esa
energía a la que ya me había hecho adicta… cerré los ojos, esa tibia luz azul
me llenaba y me envolvía.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¡Lucipher! —
exclamé, él se detuvo y se retiró de mi cuerpo.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Me dejó de pie en el
suelo, quedamos frente a frente pero las sombras cubrían su rostro, no podía
ver su expresión… por un instante creí que se había molestado que lo llamara
con un nombre que no era el suyo, aunque lo usurpara involuntariamente…
entonces me empuñó del cabello y me arrastró al lecho, me empujó de bruces
sobre los almohadones y me montó mordiéndome el cuello y los hombros como lo
hacía Lucipher… deduje que ese detalle solamente se lo había podido haber comentado
Vesphurs suponiendo que, tarde o temprano, terminaríamos en esa situación.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Mordred me penetró
nuevamente con un solo movimiento brusco, pero sin olvidar la pauta que le
había marcado… me embistió salvajemente y yo volví a cerrar los ojos imaginando
que era Lucipher quien me hacía suya. Mientras él me presionaba contra los
almohadones sentí que la hendidura de mi pecho volvía a abrirse como un nido
preparándose para recibir la energía masculina fecundante y, en el momento
culminante, sentí su energía fecundadora derramándose sobre mi espalda… luego
me di cuenta que si hubiéramos estado frente a frente hubiéramos procreado una
gema.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Después de nuestro pasional
encuentro nos quedamos dormidos arrullados por las lejanas notas musicales de
una flauta y un tambor, aún quedaban invitados a mi matrimonio con Niq
acampando en los jardines y, habiéndose corrido el rumor de mis nupcias con
Vesphurs, se habían quedado a la espera de la celebración.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Cuando nos
despertamos encontramos a Vesphurs sentado en el sillón al lado de la chimenea,
tenía en la mano un libro con cubiertas de cuero y estaba vestido con el mismo
traje azul con ribetes de plata que había usado durante la ceremonia del Equinoccio.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><a name="_Hlk69524678"></a><div style="text-align: justify;"><a name="_Hlk69524678"></a><a name="_Hlk69524678">—
</a>¿Pudieron crear lazos?
— me preguntó con una mirada
escudriñadora, no supe cómo responderle — madre, digo, Lilith… no tienes que
darme explicaciones ni disculpas por lo que han hecho, yo esperaba que lo
hicieran… de hecho fui yo quien propició aquellas situaciones que parecían una
mala broma que la magia absurda les jugaba.</div><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¿Por qué lo
hiciste? — le pregunté intrigada y molesta recordando todas esas situaciones
que me habían puesto en un escenario comprometedor con Mordred.</div> <o:p><div style="text-align: justify;">— Porque después de
la muerte de mi padre yo esperaba que te acercaras a mí y me vieras como su
reemplazo — me respondió — pero en lugar de buscar el consuelo entre mis brazos
te alejaste de mí y te encerraste en tu dolor… además quería que rompieras los
lazos que tenías con Mortwuld, nunca me ha inspirado confianza y me enteré que había
sido él quien te convenció que me vieras como un hijo y que la posibilidad de
contraer nupcias conmigo era una aberración. Entonces se me pasó por la cabeza
que Mordred te podría servir de consuelo por la pérdida de mi padre y de paso
también podría alejarte de Mortwuld, aunque no funcionó porque lo rechazaste
todas las veces que yo causé una situación para que estuvieran juntos… luego
tuve ese presentimiento de que Mordred jugaría un papel más importante y era
necesario tenerlo cerca, por eso hace unos días te sugerí que hicieras lazos
con él, pero tampoco lo hiciste… así que me vi forzado a cortar tus lazos con
Mortwuld y con todos aquellos que no considero dignos de mi confianza.</div></o:p></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Un reproche tembló
en mis labios. Me había resistido aquella noche que Vesphurs utilizó la tijera
de plata para cortar mis lazos con los hassassins y los guerreros del norte, aquellos
que fueron mis compañeros, hermanos y amantes durante innumerables vidas… pero
reconocí que su decisión había sido la correcta.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¿Pudieron crear
lazos? — insistió Vesphurs esta vez dirigiéndose a Mordred.</div></span><a name="_Hlk69534277"></a><div style="text-align: justify;"><a name="_Hlk69534277"></a><a name="_Hlk69534277">—</a> Si, pudimos crear lazos de unión — le
respondió Mordred.</div><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Bien, entonces queda
comprobado que yo soy el del problema — reflexionó Vesphurs.</div><o:p><div style="text-align: justify;"> </div></o:p></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Se puso de pie y
dejó el libro sobre la cómoda haciéndome un gesto de tienes que leerlo. </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Mordred, tienes mi
consentimiento para tener intimidad con Lilith hasta que yo contraiga nupcias
con ella el primero de mayo — le dijo Vesphurs con un tono de voz veladamente
amenazante — espero que aproveches la oportunidad que, en otras circunstancias,
jamás hubieras tenido.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Mordred bajó la
mirada, había captado la amenaza y la sutil ofensa.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Entonces nos das
carta blanca por veintitrés días — le dije a Vesphurs con suspicacia — mismos
días que supongo piensas aprovechar con Niq de la misma manera que, al parecer,
aprovecharon la noche pasada.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Le señalé la mesa en
la que aún estaban las dos copas y la botella de vino casi vacía.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Nos encontramos
aquí hace dos noches — me respondió — pero solo conversamos. No te niego que
Niq quería continuar con lo que dejamos inconcluso la noche que Jeraseth nos
interrumpió, pero yo no quise, es algo que debo de dejar de hacer si quiero
convertirme en el hombre que deseas tener como esposo.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Vesphurs abrió el
baúl, tomó una maleta y empezó a guardar su ropa y otras pertenencias.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¿Qué haces? — le
pregunté intrigada.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Pasaré estos días
en el Templo del Sol ocupando la alcoba que era de mi padre — me respondió sin
dejar de doblar y guardar sus prendas.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Esa es la misma habitación
que está ocupando Niq — le hice notar con cierta picardía.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Ya no más — me
respondió — anoche, cómo supuse que te encontrarías aquí con Mordred, fui a
visitar a Niq al Templo del Sol. Hablamos seriamente sobre esta situación. Me
dijo que no esperaba que ocupar el trono sería tan complicado, que lo estaba
haciendo solamente por el bienestar y la estabilidad del astral azul, pero
ahora que existe la posibilidad que yo pueda ocupar el trono como reemplazo
efectivo de Lucipher desea presentar su renuncia. También está esperando la
anulación de vuestro matrimonio. Y además rechazó cualquier puesto en el
ejército o en el consejo que, como hijo de Xuqui, le pueda corresponder.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¿Renunció a todo
sin pedir ningún beneficio? — le pregunté incrédula.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— No, obviamente
pidió un beneficio — me respondió — me solicitó el puesto de guardián del Faro
del Mar de la Eternidad, supongo que no tienes ningún inconveniente.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— No, ningún
inconveniente — le dije pensando que en otros tiempos se lo hubiera dado a Leo.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Entonces desde
esta noche Niq ocupará el Faro y yo el Templo del Sol — concluyó.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">Vesphurs se acercó
al lecho y me besó… un beso ya no tan dulce como los que siempre me daba, un
beso casi tan rudo como los que me daba Lucipher. Estaba cambiando aún antes de
hacer el ritual, seguramente porque por primera vez reconocía su esencia
masculina solar. Luego se arrodilló y tomó mis manos, sus ojos estaban húmedos.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Madre — me dijo —
perdón, sé que ya no debo llamarte así… quiero que sepas que todo lo que he
hecho ha sido para quedarme a tu lado, pero lo que me unirá a ti como tu esposo
también nos separará… cuando yo tome el lugar de Lucipher deberé de ocupar el
trono en el Templo del Sol, mi residencia estará en el Reino del Sur.</div> </span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Entonces me iré al
Reino del Sur contigo — le dije.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— No, tú deberás de
permanecer en el Reino del Oeste — me respondió — te sentarás en el trono de la
Luna, el que se encuentra en el centro del bosque. Lucipher me dijo que heredaste
tus alas de lechuza del abuelo Khun quien es hijo de Lugh y Ariadna, antes de
que recibieras el título de Lilith tu nombre era Lily Anne y te llamaban la
Gris, la dama del laberinto de piedra… tuyo es el disco de plata, el poder de
guiar las almas de los muertos y el don de manejar las mareas.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— ¿Tanto esfuerzo
para estar juntos y terminar separados? — le pregunté sintiendo que las
lágrimas resbalaban por mis mejillas — me quedaré sola en el Reino del Oeste.</div></span><span style="mso-bidi-font-size: 10.0pt;"><div style="text-align: justify;">— Estaremos unidos
por lazos mágicos y yo te visitaré las noches de luna llena — me respondió sin
poder ocultar sus lágrimas — no te quedarás sola, Mordred se quedará contigo,
será el caballero de la reina. Recuerda que lo nuestro será un gobierno de
regencia, no será por tanto tiempo, solo hasta que Luana y Luxor tengan la edad
suficiente para hacerse cargo. Después estaremos juntos.</div><div style="text-align: justify;"><br /></div><div style="text-align: justify;"><b>Liliana Celeste Flores Vega - 08 de abril del 2021</b></div><div style="text-align: justify;">Imagen: Anne Stokes</div></span></div>
Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-29208087441155081342021-04-08T11:48:00.003-05:002021-04-18T21:54:30.765-05:00Tienes que ser el hombre que ella desea<div style="text-align: left;"><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEid5iQxCv_SdjmBPA3RMnHeWnERNH6sY7RwpOfhLjQ00x1JnuBNnbmC0_dK72SOMstF2utAs5vqEbgAIm6Ctw_k3FwAK3tOZnMxQTYUlaInip-hx5xJHzZ-jhCDq59vVCorbv95pXBW7Lo/s480/20+tienes+que+ser.jpg" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="480" data-original-width="451" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEid5iQxCv_SdjmBPA3RMnHeWnERNH6sY7RwpOfhLjQ00x1JnuBNnbmC0_dK72SOMstF2utAs5vqEbgAIm6Ctw_k3FwAK3tOZnMxQTYUlaInip-hx5xJHzZ-jhCDq59vVCorbv95pXBW7Lo/w376-h400/20+tienes+que+ser.jpg" width="376" /></a></div><div>Ya ha pasado un año
desde cuando Lucipher se marchó para cumplir con la profecía que decía que su
destino era sentarse en el Trono Dorado y gobernar sobre el Universo, nadie nos
dijo que su magnífico reinado duraría una eternidad efímera. Cumpliendo esa engañosa
profecía se inmolaron múltiples Soles. Y yo, Lilith, la Luna azul, quedé viuda…
perdí al que fue mi hermano y mi esposo, perdí la luz que me iluminaba y me
hacía brillar en el cielo nocturno. Y siento la pérdida… me falta su cálido
aliento, su amor, su pasión y su deseo.<br /> <o:p> <br /></o:p>Mi destino era
marchar hacia el Oeste y convertirme en la Luna menguante. Ya lo había
vislumbrado en sueños: Me había visto sentada en el trono del Reino del Otoño
en compañía de mi segundo consorte, contemplando los bosques oscuros bajo un
cielo azul y púrpura. Mi segundo consorte, Jeraseth, es un Sol rojo del
Inframundo, su luz hubiera podido iluminarme, pero convirtiéndome en una Luna
morada. Era la solución que pensaron los sabios del Tribunal de los Arcanos que
conocían el trágico destino de Lucipher. Por eso mi madre, Killa, nos
comprometió desde niños.<br /> <o:p> <br /></o:p>Y yo hubiera sido la
reina del eterno ocaso que danza descalza sobre la hojarasca en el claro del
bosque otoñal en compañía de los elfos y las hadas al son de las flautas celtas…
unida a Jeraseth por la magia de un anillo de oro, encontrándonos para amarnos
en nuestra cabaña al pie de la montaña y a orillas del lago de aguas plateadas
en cuyas profundidades reposa la estrella dorada que cayó de los cielos al
inicio de los tiempos. Yo hubiera aceptado ese retiro prematuro cediéndole mi
lugar a otra Luna azul, más joven y más bella… poco a poco hubiera vuelto a
sonreír y tal vez hasta hubiera podido ser feliz si Jeraseth no me hubiera sido
infiel… fue un sueño que pudo ser, pero no fue. Y Lucipher lo sabía.<br /> <o:p> <br /></o:p>Dudo que al Universo
le hubiera importado si yo hubiera encontrado el consuelo y la felicidad en el
refugio del pecho de Jeraseth o si me hubiera apagado poco a poco entre sus
brazos… después de todo tantos Dioses mueren en el olvido y el Universo
permanece inmutable. Pero hay un problema mayor, uno que si le importa al
Universo pues pone en peligro su delicado balance mágico: En estos momentos no
tenemos otro Sol ni otra Luna azules que puedan ocupar los tronos que Lucipher y
yo hemos dejado. Si, están Luana y Luxor, nuestros hijos y herederos, pero
ellos aún no están preparados para asumir esa responsabilidad. Si hubiéramos
tenido más tiempo para preparar a nuestros hijos ellos hubieran podido ocupar
nuestros lugares y mantener la estabilidad mágica, pero con ambos tronos vacíos
la magia del astral azul languidece y las consecuencias rebotan sobre la
realidad causando la destrucción de los mundos azules. No puedo retirarme, debo
de seguir ocupando el lugar de la Luna azul. Y Lucipher lo sabía.<br /><o:p> <br /></o:p>Como medida
desesperada Vesphurs ocupó el trono en el Templo del Sol. Deliberamos y la
única solución que encontramos fue establecer un gobierno de regencia
transitorio: Yo debería de seguir ocupando el trono en el Templo de la Luna y
alguien más debería de ocupar el trono en el Templo del Sol hasta que Luana y
Luxor estuvieran preparados para hacerlo. Gracias a las pistas que nos dejó
Lucipher encontramos a Niq, hermano nuestro por parte de Xuqui, nuestro padre,
lo que le daba esencia de Sol, pero también tenía esencia de Mar por herencia
de Nili, su madre.<br /> <o:p> <br /></o:p>Durante el
equinoccio pasado contraje nupcias con Niq para legitimar su derecho de ocupar
el trono en el Templo del Sol pues la ascensión de nuestro padre al Plano
Primordial hace imposible su reconocimiento de la manera tradicional y no
teníamos tiempo para empezar un engorroso proceso de reconocimiento
extraordinario. Ha funcionado a medias, lo suficiente para evitar que el
invierno y las tinieblas destruyan la vida de los mundos azules. Niq tiene que
dar toda su energía solar para mantener la estabilidad del astral azul, él no
puede darme la luz que necesito… y aunque pudiera hacerlo, entre nosotros no ha
surgido la mágica alquimia amorosa que une a las parejas. Y Lucipher lo sabía… por
eso, desde el inicio de los tiempos preparó a Vesphurs para mí.<br /><o:p> <br /></o:p>Vesphurs es nuestro
hijo, la estrella que aparece en el ocaso precediendo a la luna y la acompaña
durante su paseo nocturno, el lucero que saluda al sol cuando nace el alba. Es
el primogénito que procreamos al inicio de esta era cuando nos amábamos con un
amor inocente e impoluto, cuando el odio que surgió entre nuestro padre y
nuestra madre no nos había contaminado con su veneno. Un hijo que por las
trágicas circunstancias que acontecieron durante la vida en la que lo
concebimos no pude sostener entre mis brazos, un hijo que lamentablemente él no
pudo recibir en el momento del alumbramiento por encontrarse ausente, un hijo
que falleció a los tres días de haber nacido… pero cuya gema inmortal fue
conservada en un ánfora sagrada en el invernadero del jardín de la vida,
dormido y suspendido en el tiempo durante siglos… hasta que en esta vida
Lucipher, sin duda anticipando su trágico destino, lo despertó de su sueño y lo
hizo renacer como su hermano gemelo. Nacieron como gemelos del vientre mortal
de una hechicera, gemelos como también lo son el lucero del alba y la estrella
de la tarde, como el sol en el reflejo del espejo de la luna.<br /> <o:p> <br /></o:p>Lucipher lo preparó
en secreto para ocupar su lugar y me lo ofreció como un maravilloso obsequio
una noche embrujada. Un obsequio que, en un principio, no reconocí como nuestro
hijo y acepté como una ofrenda de paz cuando él se presentó para reclamar sus
derechos y trastocó mi reino. Desde entonces Vesphurs ha sido mi amante y mi
amado, el que me recibía en su lecho cada noche de luna negra en la que el
frenesí vampírico que es mi don y maldición, me hacía buscar la miel de sus
labios y la leche de su deseo.<br /> <o:p> <br /></o:p>Una noche de
preludios quebrados en la que los tres compartíamos el lecho Lucipher nos dijo
que si algún día partía lo esperáramos durante un año y que, si no regresaba,
nos desposáramos. No lo tomamos en serio, ignoramos el presagio de la muerte en
su mirada. Sin embargo, era cierto que él tenía muchos enemigos y a sus
espaldas tomé precauciones, recité encantamientos y conjuré a los vientos para
que lo guardaran. Pero mi magia no pudo evitar que su destino, escrito en el
libro de piedra, se cumpliera.<br /> <o:p> <br /></o:p>La fatalidad llegó
por donde no la esperábamos. Lucipher se despidió de mí una mañana clara que no
presagiaba desgracias respondiendo al llamado que se hizo a los Soles
principales de todos los astrales. Vesphurs lo acompañó seguro que regresarían
juntos, tal vez tendría que sostenerlo del brazo, conocíamos algunos pormenores
del ritual que se llevaría a cabo, Lucipher regresaría con su luz debilitada y
sus fuerzas menguadas, ordené a las acllas que prepararan las estancias para
que él pasara una temporada en los manantiales curativos. Y llegó la noche,
Vesphurs regresó con un cofre de madera que depositó en mi regazo.<br /> <o:p> <br /></o:p>Con manos
temblorosas abrí el cofre y contemplé su gema resquebrajada, de inmediato le
ordené a Vesphurs que la llevara a la fuente de la vida, pero esta se había
secado después de que los Caídos se bañaron en ella. Sin embargo, Vesphurs
colocó la gema, que aún emitía débiles destellos azules, en una hornacina. Ya
llovería, la fuente volvería a llenarse. Sostuvimos el astral azul con nuestra
esperanza esperando un milagro, hasta que la gema emitió un último fulgor y se
apagó. Entendimos que Lucipher no regresaría. Sin embargo, en respeto a su
memoria, esperamos un año.<br /> <o:p> <br /></o:p>Ya no podíamos
esperar más, yo me estaba debilitando y el astral azul se estaba cayendo a
pedazos. Esta noche Vesphurs y yo nos
encontramos en la alcoba que hace dos semanas compartimos en la mansión que
hemos levantado en el Reino del Oeste, lugar que ahora es nuestra morada desde
que el Fimbulwinter llegó al Reino del Norte y tuvimos que abandonar el Palacio
de Invierno. Primero hicimos un ritual en el que renunciamos a nuestros lazos
de madre e hijo, un requerimiento para que pudiéramos desposarnos. Luego nos
unimos en un íntimo abrazo esperando que los lazos que creamos con esa unión
reemplazaran los lazos que yo tenía con Lucipher… pero no sucedió. <br /> <o:p> <br /></o:p>Después de vanos
esfuerzos me envolvió una melancólica somnolencia. Estaba acostada en nuestro
lecho, mi cabeza reposaba sobre una almohada y Vesphurs me había cubierto con
una colcha de hilo. Escuchaba el crepitar de los leños en la chimenea y la
serenata de los grillos, percibía el aroma del incienso de rosa, jazmín y
sándalo. Vesphurs creía que me había quedado dormida, pero no era así.
Simplemente me sentía demasiado cansada para abrir los ojos y tan débil que ni
siquiera podía moverme. Tocaron tímidamente a la puerta, Vesphurs se levantó
para atender al visitante. Era Niq.<br /><o:p> <br /></o:p>— ¿Hicieron el
ritual? — preguntó Niq.<br />— Si, lo hicimos —
respondió Vesphurs y lo invitó a pasar.<br />— ¿Y funcionó? — preguntó
Niq acercándose al lecho.<br />— No, no funcionó —
respondió Vesphurs con tristeza.<br />— ¿Por qué? — preguntó Niq con curiosidad.<br />— Creo que en
nuestra unión no hubo suficiente amor y deseo — respondió Vesphurs.<br />— Pero tú la amas,
incluso quisiste evitar mis nupcias con ella — dijo Niq.<br />— Si, yo la amo y la
deseo como no tienes idea — respondió Vesphurs sentándose al borde del lecho y
acariciando mi cabello — el motivo de mi existencia es amarla.<br /> — Y ella también te
ama — dijo Niq — antes de contraer nupcias conmigo declaró frente a los sabios
del Tribunal que nuestro enlace sería solo para legitimar mi derecho de ocupar
el trono en el Templo del Sol y que quería quedarse contigo porque te había
elegido como compañero.<br />— Si, exactamente —
confirmó Vesphurs — me ha elegido como su compañero, como el hombro sobre el
cuál llorar, como el pecho que puede darle refugio las noches en las que siente
frío y soledad. Ella me ama con un amor dulce y sereno, pero ya no está
enamorada de mí ni me desea con el ímpetu con el que una mujer desea a un
hombre.<br />— Lilith ni siquiera
quería a Lucipher — dijo Niq.<br />— ¿Eso crees? — le refutó
Vesphurs — ella lo amaba más de lo que imaginas, solo que nunca lo admitió ni
lo reconoció. En esta vida parecía que se odiaban, hasta llegaron a agredirse
físicamente, pero simplemente era pasión contenida que no sabían cómo expresar
hasta que encontraron una manera de hacerlo. Ella lo amaba y lo deseaba, yo fui
testigo de su ímpetu. Cuando ellos se unían estremecían al universo, juntos
creaban tanta magia que ni podían llamarse por sus nombres en el real, solo lo
hacían durante los rituales. El amor y el deseo que se profesaban eran tan
fuertes que lograron que Xuqui y Killa se reconciliaran y ascendieran. Me
extraña que no te hayas dado cuenta, dijiste que viviste muchas vidas con Xuqui
como padre y con Lucipher como hermano mayor, reconociste que varias veces lo
ayudaste a raptar a Lilith.<br />— Si, lo recuerdo — respondió
Niq — ella luchaba, lloraba y gritaba desesperadamente cuando él la arrastraba
lejos de su hogar y del hombre con quien estaba compartiendo esa vida. Por eso
llegó un momento en el que ya no quise ayudarlo, me parecía un abuso.<br />— Ella se resistía
por dignidad y orgullo, porque le habían enseñado a odiarlo — dijo Vesphurs —
dime, después que Lucipher la hacía suya ¿alguna vez te pidió ayuda para
escapar?<br />— No — respondió Niq
rememorando — la recuerdo sentada en la entrada de la tienda con los hombros
magullados y con los ojos llorosos, pero por el dolor de los golpes. Muchas
veces, cuando él salía a cazar, me dejaba haciendo guardia y yo fingía estar
entretenido cortando leña o haciendo la siesta para darle la oportunidad de
escapar, pero ella no lo hacía, siempre creí que era porque tenía miedo de
encontrarse con los esclavistas con quienes hubiera corrido peor suerte. Un par
de veces pensé en huir con ella para acompañarla de regreso hasta su pueblo,
pero nunca se lo propuse porque la lealtad hacia mi hermano era más fuerte. En
una ocasión la acompañé al río para que lavara sus vestidos, entonces pasó una
caravana de gitanos, pero ella siguió lavando y no les pidió ayuda, en esa vida
se instalaron en una aldea y tuvieron dos hijos. Tienes razón, ella se quedaba
con Lucipher hasta que los hassassins o los guerreros del norte venían a
rescatarla.<br />— Pues allí lo
tienes — dijo Vesphurs — ellos hubieran sido felices si los malditos hassassins
y los guerreros del norte no se hubieran entrometido.<br /><o:p> <br /></o:p>Guardaron silencio.
Y yo recordé las veces en las que le expresaba mis caricias a Lucipher con un
látigo en la mano y él me manifestaba su ternura copulándome salvajemente. Si,
esa era la manera que habíamos encontrado para amarnos después que sembraron el
odio entre nosotros y nos arrebataron los sueños que tuvimos en los albores del
tiempo.<br /> <o:p> <br /></o:p>— Lilith necesita
algo que la motive para salir de este estado de apatía en el que se encuentra —
dijo Vesphurs — algo que le haga volver a sentir pasión y deseo. Te confieso
que quise evitar tus nupcias con ella porque sentí celos… además tú jugaste
sucio, te infiltraste en su guardia personal para seducirla aprovechándote que
tu esencia de Sol azul se parece a la de Lucipher y conseguiste que ella se
ilusionara contigo.<br /><o:p> <br /></o:p>Recordé que Vesphurs
también había jugado sucio en un intento de evitar mis nupcias con Niq. Lo hizo
la noche que fui al Templo del Sol para poner las cosas en orden para cuando
Niq se instalara y me sedujo precisamente aprovechándose de su esencia de Sol
azul haciéndome creer que Lucipher había dejado un hechizo de burbuja como un
obsequio de despedida. Y fue precisamente Niq quien, al entrar a la habitación,
me hizo ver la verdad. Todavía no perdonaba a Vesphurs por aquel engaño, estuve
a un paso de enviarlo al exilio, pero no pude hacerlo, no quería quedarme sola.
Niq soltó una carcajada, pero no mencionó el incidente.<br /><o:p> <br /></o:p>— Yo no jugué sucio,
solamente seguí órdenes — aclaró Niq — o tal vez debería de decir que me
convencieron de seguirlas, me aleccionaron que debería de obedecerla en todo,
incluso si ella me ordenaba hacer algo que no me pareciera correcto. Dudé
cuando Lilith me pidió que me desnudara y me invitó a su lecho, es hermosa,
pero yo siempre la había respetado como la mujer de mi hermano mayor. En ese
instante me sentí presa de un arrebato que acabó con mis escrúpulos y me dejé
llevar por el placer… cuando la hice mía no me sentía yo mismo, ella murmuró su
nombre y no me importó, ahora me avergüenzo tanto de eso.<br /> — ¿Ella te confundió
con Lucipher? — preguntó Vesphurs.<br />— Creo que si llegó
a confundirme con él — respondió Niq — estoy seguro que en un principio ella
creía que yo era un simple guardia pues me trató como tal, aunque ahora sé que
los que urdieron este plan se aseguraron que mi apariencia le recordara su
apariencia en el real. Tal vez todo empezó porque ella quiso creer que yo era
él y luego mi esencia de Sol azul la confundió.<br /><o:p> <br /></o:p>Niq estaba en lo
correcto. Cuando lo vi su apariencia me recordó la apariencia que Lucipher
tenía en el real y, llevada por la nostalgia, lo invité a mi lecho. Luego me
dejé llevar y hubo un momento en el que llegué a confundirlo con Lucipher.<br /><o:p> <br /></o:p>— Cuando nos
presentaron formalmente nos sentimos atraídos inexplicablemente — dijo Niq —
además estaba la alegría por haber encontrado a un heredero de Xuqui y todos
tenían la esperanza que nuestra unión podría estabilizar el astral azul. Tal
vez Lilith se ilusionó por un momento… soy Sol, pero también soy Mar… ella me
contó que cuando Lucipher se despidió aquella mañana le dijo que si no
regresaba encontraría consuelo en el mar.<br /> <a name="_Hlk69426077">—</a> Lo sé — dijo Vesphurs — Lilith me lo contó,
pero esas palabras no tenían sentido para mí porque precisamente antes de
ingresar al salón del Trono Dorado él me recordó que nos había dicho que si
algún día partía y no regresaba yo debería de ocupar su lugar y contraer
nupcias con ella.<br />— Tal vez quiso
dejar dos opciones — respondió Niq — si uno fallaba en crear lazos con ella,
quedaría el otro… o sabía que uno solo no podría mantener el trono y sostener a
Lilith al mismo tiempo.<br /><o:p> <br /></o:p>Recordé que
efectivamente cuando Vesphurs ocupó el lugar de Lucipher sentándose en el trono
en el Templo del Sol todos esperábamos que pudiera reemplazarlo, incluso se
contempló la posibilidad de una dispensa extraordinaria para que yo me
desposara con él otorgándole el título de Emperador del astral azul, pero
cuando realizamos el ritual del Solsticio no pudo cumplir con las expectativas.
Pensé que tal vez Lucipher había elegido a Niq para reemplazarlo en el trono,
seguramente a eso se había referido cuando me dijo que encontraría consuelo en
el mar… consuelo, podía interpretarlo como alivio, una ayuda para sostener la
carga… pero había preparado a Vesphurs para mí.<br /><o:p> <br /></o:p>— ¿Si yo asumo la
responsabilidad del trono para sostener el astral azul crees que algún día
Lilith y tú puedan llegar a amarse y funcionar como una pareja? — preguntó
Vesphurs, pude sentir el temor de perderme en el temblor de su voz.<br /><o:p> <br /></o:p>No, se estaba
equivocando. Vesphurs había fallado en el ritual del Solsticio que hicimos el
año pasado, su esencia de Luna le había jugado en contra en una ceremonia
completamente solar, la esencia de Mar sería más compatible para aquél ritual.
Y además yo no quería a Niq, estaba segura que nunca podría llegar a amarlo. Yo
lo quería a él, seguramente habíamos hecho algo mal cuando intentamos crear
lazos como pareja, tal vez debimos de dejar pasar unos días después de haber
renunciado a nuestros lazos de madre e hijo, teníamos que volver a intentarlo…
intenté protestar, pero no pude.<br /><o:p> <br /></o:p>— No, no lo creo —
respondió Niq — reconozco que yo no sería un fiel y devoto esposo para ella,
además me dejaste en claro que la amas.<br />— Pero acabas de
reconocer que se sintieron atraídos mutuamente — insistió Vesphurs.<br />— Si — admitió Niq —
pero cuando estábamos planificando nuestras nupcias, nos dimos cuenta que
estábamos siendo víctimas del hechizo de obnubilación que suelen aplicar cuando
una pareja que no ha compartido vidas pasadas juntos tiene que contraer nupcias
para beneficio del astral. Lilith y yo estuvimos de acuerdo en que no queríamos
casarnos bajo esas influencias, si lo teníamos que hacer por el bienestar del
astral lo haríamos, pero sin manipulaciones. Hemos cumplido y cumpliremos con
los rituales que debamos de hacer por el bienestar del astral azul, nada más.<br /> — Entiendo — murmuró
Vesphurs — creí que de verdad ella sentía una atracción por ti, hasta estaba
pensando invitarte a compartir el lecho con nosotros.<br />— Ella es mi esposa,
creo que el invitado serías tú — dijo Niq — es una broma, sé que mi matrimonio
con Lilith es solo una formalidad, seguramente cuando yo pueda hacer el ritual
para ser reconocido como hijo de Xuqui ella me pedirá el divorcio para contraer
nupcias contigo y yo se lo daré. Respecto a tu invitación la aceptaría con
gusto, aunque sospecho que ella se levantaría del lecho molesta por mi
presencia y nos dejaría a los dos solos. Precisamente la otra noche le comenté
que sentía que el trono me drenaba mucha energía, entonces ella me respondió
que eso me pasaba porque todavía no he aprendido a canalizar mi energía solar
separándola de mi esencia de Mar y me sugirió que follara contigo sobre el
trono para que entre los dos canalizáramos más energía solar.<br />— ¿Lo harías? — preguntó
Vesphurs — ¿me follarías sobre el trono?<br />— ¿Eh? — dijo Niq
incómodo — ¿lo dices en serio?<br /> — Yo haría cualquier
cosa para complacerla — respondió Vesphurs — a ella le gustaría que…<br />— Entiendo lo que
sugieres — dijo Niq — me han contado lo que ustedes acostumbraban hacer, quieres
que me haga pasar por Lucipher y te folle sobre el trono porque crees que eso
le puede levantar el ánimo… pues no, es una pésima idea, Lilith se enojaría con
los dos porque lo tomaría como un insulto a la memoria de Lucipher.<br /> <o:p> <br /></o:p>Niq tenía razón.
Escuché sus pasos dirigiéndose a la mesa para servirse un trago y bebérselo de
un sopetón. Vesphurs me abrazó desde atrás, apartó mi cabello, deslizó los
tirantes de mi camisón y empezó a besarme el cuello y los hombros… quise
corresponderle, pero seguía sintiéndome tan débil que no pude girarme para
buscar sus labios.<br /> <o:p> <br /></o:p>— ¡Malditos sean los
caprichos de la Luna, pero todo sea por ella! — exclamó Niq, lo sentí acercarse al lecho y jalar a Vesphurs con
violencia para besarlo apasionadamente — tal vez tu idea funcione, pero sin
hacerme pasar por Lucipher.<br /><o:p> <br /></o:p>Sentí cuando Niq
tumbó a Vesphurs sobre el lecho y empezó a quitarle la ropa, escuché sus jadeos
mientras intercambiaban caricias… quise que funcionara, me concentré en los
jadeos de Vesphurs pero por lo bajo escuchaba el canto de las sirenas y era un
canto triste, casi un lamento… eran los lazos que tenía Niq con las hijas del
Mar, sus hermanas y amantes que sentían aquella infidelidad, me sentí culpable…
intenté incorporarme para detenerlos pero el quejumbroso cántico cesó, Niq
había bloqueado los lazos.<br /> <o:p> <br /></o:p>Después de unos
vaivenes que hicieron que unos almohadones cayeran al suelo, Vesphurs buscó mi
mano y enredó sus dedos con los míos, era un gesto que solía hacer buscando mi
complicidad cuando Lucipher lo hacía suyo, tuve la fuerza suficiente para
estrechar su mano.<br /><o:p> <br /></o:p>— ¿Quieres que lo
haga o no? — preguntó Niq.<br />— Si, hazlo — respondió
Vesphurs.<br /><o:p> <br /></o:p>Vesphurs apretó mi
mano con más fuerza. Siempre se tensaba antes de la penetración hasta que
Lucipher le daba un par de nalgadas para obligarlo a ceder, obviamente Niq no
conocía ese truco, los escuché bregar un buen rato. Finalmente abrí los ojos,
me encontré con la mirada de Vesphurs y me sonrío con esa sonrisa que me
encantaba. Levanté la mirada, Niq estaba montado sobre él acariciándole la nuca
para relajarlo, se percató que estaba observándolos.<br /><o:p> <br /></o:p>— Solo lo estoy
haciendo por ti, Lilith — me dijo con una sonrisa, pero era obvio que no le
disgustaba lo que estaba haciendo.<br /><o:p> <br /></o:p>Entonces tocaron a
la puerta. Identifiqué su energía roja de inmediato, era Jeraseth. Un
intercambio de miradas con Niq y Vesphurs me confirmó que ellos también habían
identificado su presencia. Mi segundo consorte no tenía permitido la libre
entrada a nuestra mansión, alguien le había permitido el ingreso. Niq me
dirigió una mirada interrogativa sobre cómo proceder.<br /><o:p> <br /></o:p>— Ignora a quien
está tocando la puerta — le dije.<br /><o:p> <br /></o:p>En ese momento
Jeraseth abrió la puerta. Niq se puso de pie de inmediato para impedirle la
entrada a la habitación, pero Jeraseth lo empujó y se acercó al lecho
furibundo. <br /> <o:p> <br /></o:p>— ¡Eres un puto! –
exclamó Jeraseth dirigiéndose a Vesphurs.<br />— ¡Tú no tienes permitido
el ingreso a nuestra mansión! – le espetó Vesphurs incorporándose.<br />— Mordred me
permitió pasar – explicó Jeraseth – estaba preocupado por Lilith, vine para
preguntar si el ritual de lazos contigo había funcionado y te encuentro
protagonizando esta deplorable escena.<br />— Tú no tienes
derecho de juzgarme – respondió Vesphurs poniéndose de pie para enfrentarlo –
todo lo que yo hago es por mi madre. Retírate, no eres bienvenido.<br /><o:p> <br /></o:p>Jeraseth ignoró la
orden de Vesphurs y se dirigió a mí.<br /><o:p> <br /></o:p>— Lilith, estaba preocupado
por ti — me dijo intentado justificar su inesperada visita y desacertada
intromisión — no esperaba encontrarlos en esta situación tan desagradable y
obscena.<br />— La puerta de la
alcoba estaba cerrada, tocaste y no abrimos — le respondí haciendo un esfuerzo
para sentarme, me sentía débil nuevamente — creo que debiste de suponer que
estábamos ocupados. Entiendo que dadas las circunstancias te haya resultado
desagradable encontrarnos en esta situación tan íntima. Lo que no comprendo es
tu hipocresía, que catalogues como obsceno el hecho que comparta el lecho con
mi actual primer consorte y Vesphurs… ¿no era obsceno cuándo lo hacíamos
contigo?<br /><o:p> <br /></o:p>Jeraseth se mordió
los labios y cerró los puños.<br /> <o:p> <br /></o:p>— Jeraseth — le dije
— por favor, retírate.<br />— ¡Soy tu segundo
consorte, no puedes echarme! — me reclamó.<br />— ¡Tú ya no puedes
reclamar los privilegios de segundo consorte! — le respondió Vesphurs — mi
madre te amaba y te deseaba casi tanto como amaba y deseaba a Lucipher, además
te admiraba y te respetaba… ella confiaba en ti, se sentía segura a tu lado,
reía como nunca antes la había escuchado reír y su mirada se iluminaba cuando
estaba contigo… la intensidad de lo que mi madre sentía por ti era tan grande
que le daba miedo, pero yo podía sentir sus sentimientos y lo había visto
cuando los tres compartíamos el mismo lecho… casi la misma mágica alquimia que
ella tenía con Lucipher, una magia capaz de lograr cosas maravillosas porque
mezclaban el poder del astral rojo con el poder del astral azul… ¡maldita sea,
ustedes activaron todos los portales desde la Tierra hasta Júpiter en cadena
solo copulando, esos portales que necesitaban la inmolación de mil psíquicos
azules y rojos cada uno!... no puedo creer que no te hayas dado cuenta de lo
que ella sentía por ti.<br /> — Lilith no quiso
compartir esta vida conmigo — dijo Jeraseth.<br />— Porque ella tenía
miedo — le respondió Vesphurs — miedo de no poder cubrir tus expectativas de
una relación de pareja en el real… mi madre te perdonó tus estúpidos deslices
más de una vez, en una ocasión ella fue a buscarte a aquella cabaña que tienen
a orillas del lago y te encontró en medio de una orgía con unas híbridas que ni
siquiera eran humanas, regresó al Palacio de Invierno tan destrozada que tuve
que pedirle a Neph que le diera de beber una copa de nepente… si en el astral
la tenías a ella, la Emperatriz más noble, la Luna más hermosa que se haya
visto en eones, la Reina por la cual se enfrentaban ejércitos y se destruían
imperios, la Hechicera que domó al Dragón y restauró los pilares, pero en lugar
de reconocer que eras el más afortunado de los hombres te ibas a pasar el
tiempo con unas monas… ¿qué le hubieras hecho a aquella mujer insegura de sí
misma que es Lilith en el real?<br />— La hubiera amado,
protegido y respetado — respondió Jeraseth — hubiera consagrado mi vida entera
a hacerla feliz, hubiera renunciado a todo para conservarla a mi lado.<br /> — No, la hubieras
hecho infeliz como en el paralelo que descartaron — dijo Vesphurs.<br />— No, esta vez no
hubiera cometido los errores que cometí — insistió Jeraseth.<br />— Eso dices pero
aquí seguiste cometiendo los mismos errores — prosiguió Vesphurs — tú debiste
de haberla sostenido cuando ella perdió a mi padre, tu principal deber de
segundo consorte era estar a su lado si algo le pasaba al primero… pero precisamente
cuando perdimos a Lucipher y mi madre te necesitaba más que nunca, le fuiste
infiel… mientras mi madre lloraba desconsoladamente entre mis brazos porque
había perdido a su hermano y esposo con quien al fin, después de milenios de
rencor y odio, se había reconciliado tú estabas follando con aquella a la que
llaman la Draconia… ¡lárgate de aquí!<br /><o:p> <br /></o:p>Mientras tanto me
había puesto de pie, las palabras de Vesphurs habían vuelto a abrir aquellas
heridas, empezaba a recordar y entender los motivos por los que le pedí a Neph
que me borrara la memoria de esos años. De soslayo vi que Mordred estaba de pie
en la puerta, seguramente había escuchado la discusión y se sentía culpable de
haberle permito el ingreso a Jeraseth.<br /><o:p> <br /></o:p>— Lilith — dijo
Jeraseth arrodillándose a mis pies — yo te amo, eres mi única esposa y mi única
reina, después de que nos casamos mi padre quería que yo tomara a una de mis
hermanas en segundas nupcias, pero me negué… cuando me dijiste que no querías
compartir esta vida conmigo me dolió tanto que lo dejé todo y me fui a Barzoom…
pero si quisieras darme la oportunidad de…<br /><o:p> <br /></o:p>No le dejé terminar
lo que quería decirme, ya lo sabía, lo había empezado a sospechar desde hace
unos días que regresó de Barzoom… me quité el anillo que Jeraseth me había obsequiado
cuando contrajimos nupcias y se lo arrojé a la cara. Entonces sentí un mareo,
estaba soltando los lazos que me unían con él, los únicos lazos que en esos
momentos tenía con un Sol y eran los que me estaban sosteniendo… sentí frío y
todo empezó a oscurecerse a mi alrededor… en un último parpadeo vi que Niq
estaba sacando a Jeraseth de la habitación y me desvanecí entre los brazos de
Mordred que alcanzó a sostenerme antes de que cayera al suelo.<br /><o:p> <br /></o:p>Cuando recuperé la
conciencia estaba recostada en el lecho con Vesphurs a mi lado. Mordred estaba
de pie contemplándonos preocupado. Sentí frío otra vez, seguía soltando los
lazos que me unían a Jeraseth… la oscuridad estaba envolviéndome de nuevo.<br /><o:p> <br /></o:p>— Lilith está
perdiendo los últimos lazos que tiene con Jeraseth — le dijo Mordred a Vesphurs
— si los pierde todos se quedará dormida en un sueño semejante al de la muerte…
tienes que hacer lazos de pareja con ella ahora mismo.<br />— Ya lo intentamos,
pero no funcionó — murmuró Vesphurs preocupado — llamaré a Jeraseth, tal vez él
pueda evitar que ella siga perdiendo esos lazos.<br /><o:p> <br /></o:p>Estaba perdiendo la
conciencia otra vez, entonces Mordred se inclinó sobre mí y me besó, sentí que
con ese beso me llenaba de luz, una luz azul como la de Lucipher… me levantó
del lecho poco a poco sosteniendo el beso hasta que abrí los ojos. La oscuridad
y el frío se habían alejado.<br /><o:p> <br /></o:p>— Gracias — le dije
a Mordred mirando sus ojos oscuros — pero tu esencia es Muerte y Oscuridad, no
entiendo qué hiciste… ¿cómo pudiste darme luz con un beso?<br />— Digamos que fue
energía “egregórica” — me
respondió — por llamarla de alguna manera.<br />— Gracias por
salvarla — le dijo Vesphurs.<br />— Dale las gracias a
todas las personas que me confunden con Lucipher — le respondió Mordred.<br /><o:p> <br /></o:p>Necesitaba
descansar, cerré los ojos. Ellos se quedaron a mi lado.<br /><o:p> <br /></o:p>— ¿Cuánto tiempo
crees que puedas sostenerla con esa energía? — preguntó Vesphurs.<br />— Creo que puedo
hacerlo máximo por un mes — respondió Mordred — tienes que averiguar por qué la
creación de lazos de pareja que intentaron hacer no funcionó.<br />— Creo que no
funcionó porque Lilith no me desea como esposo — dijo Vesphurs.<br />— El deseo es básico
para la creación de lazos de pareja — dijo Mordred — sé que la amas y que ella
te ama, pero si ella no te desea lo único que podrán crear serán lazos de madre
e hijo.<br />— Lo sé — murmuró
Vesphurs — pero no sé que hacer para que ella me desee.<br />— Tienes que ser el
hombre que ella desea tener como esposo — concluyó Mordred.</div><div><br /></div><div><b>Liliana Celeste Flores Vega - 04 de abril del 2021</b></div><div>Imagen: Google<br /><o:p> </o:p></div><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal"><o:p></o:p></p><p class="MsoNormal">
</p></div></div>
Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-60269523651993439252020-12-16T00:51:00.001-05:002021-01-15T00:54:11.427-05:00El anciano<div style="text-align: left;"><div style="text-align: justify;"><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhVKm6BPnUOSWrClQF05_olYua5jLkdWDiirv_shslK5yNlRB_RKsS7K_S29KkWItRu0xHSrVPBddj-fx9WaA9_o_LFoR9BOUx1MBEHx57O5QlmNu2y5MUBF4M9uBA3ttb0QZEBkQdxK1c/s625/48+el+anciano.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="625" data-original-width="500" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhVKm6BPnUOSWrClQF05_olYua5jLkdWDiirv_shslK5yNlRB_RKsS7K_S29KkWItRu0xHSrVPBddj-fx9WaA9_o_LFoR9BOUx1MBEHx57O5QlmNu2y5MUBF4M9uBA3ttb0QZEBkQdxK1c/w256-h320/48+el+anciano.jpg" width="256" /></a></div>El anciano vivía
solo en la casona de la esquina rodeado de libros, mapas, astrolabios y demás
objetos indescriptibles. Era un hombre anacrónico y estrafalario, de costumbres
extrañas.</div><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Los vecinos
empezaron a preocuparse por su salud mental, entonces llamaron al servicio
social para que lo visitaran.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">Una tarde un
asistente social tocó a su puerta, el anciano lo dejó pasar.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— ¿Vive solo?</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Si, no necesito
de nadie.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— ¿Cómo se
mantiene?</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Recibo rentas
de unas propiedades que tengo en el extranjero.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— ¿Y a qué se
dedica? ¿En qué se entretiene?</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">— Colecciono
vidas.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">El anciano abrió
el libro que tenían entre las manos, murmuró unas palabras arcanas, un destello
dorado inundó la estancia y el asistente social quedó atrapado entre las
páginas.</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;"> </div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">El anciano colocó
el libro en el librero. Las desapariciones ya estaban causando sospechas,
tendría que irse a otra ciudad.</div></span></div>
Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-12047195254907545672020-12-09T21:13:00.003-05:002021-01-15T00:54:55.098-05:00Recuerdos<p style="text-align: justify;"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgkS8NirqHUidbWqWKD6Sn0dQQFGblcmQafIzhfYbUhbdFVwfE4jPAAn38aiA0q7FlAeU1AcsFZwIX97gKYa5uQjGy9WTEGYqahmE4jgZuumBluspx2xCvCOONuRo18Z_iciCJgKX8YQdk/s625/47+recuerdos.jpg" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="625" data-original-width="500" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgkS8NirqHUidbWqWKD6Sn0dQQFGblcmQafIzhfYbUhbdFVwfE4jPAAn38aiA0q7FlAeU1AcsFZwIX97gKYa5uQjGy9WTEGYqahmE4jgZuumBluspx2xCvCOONuRo18Z_iciCJgKX8YQdk/w320-h400/47+recuerdos.jpg" width="320" /></a></div><div style="text-align: justify;">Hans recorría la
decadente ciudad en dónde había crecido. Las callejuelas estrechas, sucias y
mal iluminadas. Sonó la alarma de la fábrica, las callejuelas se llenaron de
los obreros que con prisa se dirigían a sus pequeños departamentos en los
edificios tugurizados. El sudor de las personas se mezclaba con el olor rancio
de las frituras de los puestos de comida de las esquinas. </div><p></p><p style="text-align: justify;">Hans nunca creyó que
extrañaría aquel lugar tan miserable pero ahora, en la soledad de la base
espacial del planeta yermo en el que se encontraba, la cápsula de simulación
virtual que proyectaba sus recuerdos era su único entretenimiento.</p>Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-21616016754742321112020-11-15T20:10:00.011-05:002020-12-03T00:24:56.602-05:00La ayalga<p style="text-align: justify;"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiMpX5KFhfOx0rvt_ARqinDiuowBTCuDGqk7yAZVyvwyJ9Mw5cRlolknvaWL86e-mNfx0B9288Y42jOF81n8sRKrjQF71_kKC5iovpFCV6JfhyLxHlnVkOiw3Px2PoFf5MijZhP6qXuZVA/s1367/46+la+ayalga.jpg" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1367" data-original-width="1024" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiMpX5KFhfOx0rvt_ARqinDiuowBTCuDGqk7yAZVyvwyJ9Mw5cRlolknvaWL86e-mNfx0B9288Y42jOF81n8sRKrjQF71_kKC5iovpFCV6JfhyLxHlnVkOiw3Px2PoFf5MijZhP6qXuZVA/s320/46+la+ayalga.jpg" /></a></div><p></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"></p><p style="text-align: left;"></p><div style="text-align: justify;">Levantad una
torre de las cenizas del castillo,</div><div style="text-align: justify;">que sobre la
bella ingrata sea la maldición de la Ayalga,</div><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">tres Cuélebres
sean sus guardianes</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">(rubí, zafiro y
amatista en sus alabardas)</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">y que de su
cautiverio solo pueda liberarla</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">el caballero de
la rosa</div></span><span lang="ES" style="mso-ansi-language: ES;"><div style="text-align: justify;">a quien ella ha
hecho derramar lágrimas amargas.</div></span><p></p>
<div style="text-align: justify;"><br /></div><p></p>Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-10702641200404467962020-11-13T19:21:00.000-05:002020-11-13T19:21:02.464-05:00Sueños de Otoño<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdYrcTzkwvMpVlxUH5g9uj6Luzu_cJN4njKpK4prIpVuURq9QSjy1LqayFGEhFvnDMW5zNYhaaZdqwTfwEpMNk8W_w9l6KquNZpd8ApNv3Eqs0qShzasp3TTG-5L58eKOLx-Nmgk_mPSk/s1300/00+sue%25C3%25B1os+de+oto%25C3%25B1o.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="867" data-original-width="1300" height="266" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdYrcTzkwvMpVlxUH5g9uj6Luzu_cJN4njKpK4prIpVuURq9QSjy1LqayFGEhFvnDMW5zNYhaaZdqwTfwEpMNk8W_w9l6KquNZpd8ApNv3Eqs0qShzasp3TTG-5L58eKOLx-Nmgk_mPSk/w400-h266/00+sue%25C3%25B1os+de+oto%25C3%25B1o.jpg" width="400" /></a></div><div style="text-align: justify;">Recopilación de relatos románticos, eróticos y oníricos.</div><p></p><p style="text-align: justify;">01</p><p style="text-align: justify;">02</p><p style="text-align: justify;"><a href="https://lilinaceleste.blogspot.com/2016/08/penumbria.html">03 - Penumbria </a></p><p style="text-align: justify;"><a href="https://lilinaceleste.blogspot.com/2016/07/cuando-el-buho-ulule-bajo-los-olmos.html">04 - Cuando el búho ulule bajo los olmos</a> </p>Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8948072929211521442.post-42739679887626771712020-11-11T22:49:00.005-05:002021-03-26T06:56:20.528-05:00Susurros de Luna<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBomYkO1uwMlcdAt_jLrdriWDiGJKcpAebgtsZP7JX4ZtUpUUtAtIuKhpKtvyOtJXNoNgRtEmLqAHt1s48Vn7EgnYwGE7OUlzwmbdDL4a1gETO85AL9HQYgK-B3gDeVMW6hqoZdOHEHqA/s480/00+susurros+de+luna.jpg" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="480" data-original-width="480" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBomYkO1uwMlcdAt_jLrdriWDiGJKcpAebgtsZP7JX4ZtUpUUtAtIuKhpKtvyOtJXNoNgRtEmLqAHt1s48Vn7EgnYwGE7OUlzwmbdDL4a1gETO85AL9HQYgK-B3gDeVMW6hqoZdOHEHqA/w320-h320/00+susurros+de+luna.jpg" width="320" /></a></div>Prosa poética, romántica, onírica y erótica.<div><br /></div><div><a href="https://lilinaceleste.blogspot.com/2014/01/prologo-bajo-el-embrujo-del-lucero-de.html">00 - Prólogo: Bajo el embrujo del Lucero de la Tarde</a><br /><p></p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2015/03/recuerdas-la-primera-noche-que-te.html">01 - ¿Recuerdas la primera noche que te visité mientras dormías?</a></p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/03/en-nombre-del-pecado.html">02 - En nombre del pecado</a> </p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/05/corazon-de-invierno_17.html">03 - Corazón de invierno</a> </p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/05/luciernaga.html">04 - Luciérnaga </a></p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/05/una-promesa-de-luna-llena.html">05 - Una promesa de luna llena</a> </p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/05/el-inicio-de-la-larga-noche.html">06 - El inicio de la larga noche</a> </p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/05/cuando-el-invierno-se-instala-en-tu-alma.html">07 - Cuando el invierno se instala en tu alma</a> </p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/05/seguire-danzando.html">08 - Seguiré danzado</a> </p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/05/desde-la-medianoche-hasta-el-alba.html">09 - Desde la medianoche hasta el alba</a> </p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/06/y-pesar-de-la-distancia.html">10 - Y a pesar de la distancia</a> </p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/06/vesphurs.html">11 - Vesphurs </a></p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/06/libelulas-vagarosas_13.html">12 - Libélulas vagarosas</a> </p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/06/preludios-vespertinos.html">13 - Preludios vespertinos</a> </p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/06/esta-noche-no-me-esperes.html">14 - Esta noche no me esperes</a> </p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/07/noche-de-romance-medieval.html">15 - Noche de romance medieval</a> </p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/07/danzamos.html">16 - ¿Danzamos?</a> </p><p><a href="http://lilinaceleste.blogspot.com/2016/07/a-puertas-cerradas.html">17 - A puertas cerradas</a> </p><p><br /></p></div>Liliana Celeste Flores Vegahttp://www.blogger.com/profile/14424968481703717074noreply@blogger.com0Antártida-75.250973 -0.071389-88.230044140972325 -35.227639 -62.271901859027679 35.084861